Quizás porque alberga tendencias diversas, el partido Alianza Verde podría convertirse en la bisagra que acerque las coaliciones de izquierda y centroizquierda de cara a los comicios presidenciales del próximo año.
Se trata de una tarea prácticamente imposible, pero que las directivas verdes hayan autorizado sostener conversaciones con ambos grupos le abre una rendija a esa posibilidad.
Sin embargo, el exsenador Antonio Navarro, copresidente de la Alianza Verde, le dijo a EL NUEVO SIGLO que “no me voy a poner a especular al respecto. Yo no tengo bola de cristal, pero la búsqueda de ver si podemos llegar a tener algunos puntos en común es el propósito de las conversaciones”.
“Cada uno de los dos esfuerzos tiene su propia lógica y sus diferencias, pero por ahora no voy a hacer ningún anuncio hasta que haya acuerdos”, anotó.
Navarro explicó que "con Fajardo seguimos conversando como hace varias semanas. Tomamos la decisión también de conversar con Colombia Humana y Polo Democrático. No hemos descartado ninguno. La idea es ver los puntos de vista de todos. Yo he hablado con Petro, él es compañero de historia".
Consideró que a "todos los alternativos y distintos de partidos tradicionales también hay que tenerlos en cuenta y avanzar en lo que se puede. Por ahora, la decisión es conversar, nada más. Tomamos la decisión de conversar con todos. Creemos que las elecciones del 2021 son importantes. Conversar no significa que vamos a tomar decisiones. Todos son nombres que buscan la alternativa para gobernar y con todos hay que conversar".
Conversaciones
Mientras en el diálogo con el sector de centro donde está el exgobernador Sergio Fajardo, líder del movimiento Compromiso Ciudadano, está la senadora Angélica Lozano y el copresidente verde Carlos Ramón González, en los acercamientos con la izquierda en el que figura el senador Gustavo Petro, jefe del movimiento Colombia Humana, Navarro va con González y el representante por Bogotá, Inti Asprilla.
“He dicho que la derrota del fascismo criollo encarnada en el uribismo, exige mucha madurez política y personal de nosotros. No sentarse a intercambiar ideas entre los partidos de oposición al gobierno Duque, hubiera sido un error histórico de inmadurez parecido a la patria boba”, expuso Asprilla, apuntando que “a los que me dicen tibio infiltrado en la izquierda o petrista infiltrado en el verde les mando un afectuoso saludo. Se equivocan de contradictor. De mi lado solo obtendrán fraternidad. Así como el uribismo solo obtiene toda mi determinación para enfrentarlo”.
La conformación de esa coalición debería incluir, declaró a este Medio hace un par de días el senador Iván Cepeda, del Polo Democrático, “fuerzas muy diversas, desde el llamado centro, que incluye expresiones liberales, incluso sectores de la derecha democrática, pasando por fuerzas de centroizquierda y también de la izquierda”.
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Verdes
Los verdes han reiterado que sus precandidatos presidenciales siguen siendo los senadores Iván Marulanda, Antonio Sanguino y Jorge Londoño, así como el exgobernador Camilo Romero, y en ese orden de ideas se descartó que Fajardo pudiera incluirse en esa baraja.
La dirección verde señaló que próximamente determinará el mecanismo para elegir a un candidato único a la Presidencia, de tal manera que a más tardar en junio se conozca el nombre definitivo.
Que Fajardo y Petro sean quienes centren estas coaliciones claramente obedece a que ambos se abrogan la potestad de llegar a una segunda vuelta presidencial con quien nomine la centroderecha.
Acudiendo a lo ocurrido en 2018, Fajardo calcula que esta vez sí podría superar a Petro y pasar a segunda vuelta, en tanto que este está seguro que al menos podría repetir lo hecho en aquella ocasión.
Con Fajardo han confluido personalidades sin partido como la representante Angela María Robledo (que fue fórmula vicepresidencial de Petro), el exministro Juan Fernando Cristo, el exvicepresidente Humberto de la Calle y el exsenador Juan Manuel Galán, así como los precandidatos verdes Marulanda y Sanguino, y el senador Jorge Enrique Robledo, del partido Dignidad.
Ellos, le precisó Navarro a este Diario, “ya se vienen hablando desde hace semanas. Eso sí ha avanzado bastante en las conversaciones. Lo otro todavía no ha empezado”.
Al sumarse a estas reuniones, la representante Robledo dijo que “llego a escuchar y construir, espero un talante democrático para seguir sumando. Son buenas noticias para el país los diálogos entre nuestras fuerzas alternativas”.
Este grupo se presenta como una corriente política que quiere convertirse en alternativa a las posiciones de la centroderecha, distanciándose de los postulados enarbolados por Petro, a quien además señalan de que en lugar de tender puentes de entendimiento haya trazado una táctica de polarización que los margina.
En sus redes sociales, Fajardo ha dicho que “podemos ser diferentes sin ser enemigos. Podemos enfrentarnos, pero con respeto, con reconocimiento, con solidaridad, con empatía. Los medios justifican el fin y no al revés. Debemos buscar una convergencia por fuera de los extremos”.
Primera vuelta
Al cierre de esta edición estos dirigentes estaban reunidos sin se conociera alguna decisión concreta. Ocho días antes manifestaron que estaban construyendo una “amplia convergencia para la necesaria transformación de Colombia. Avanzamos en discusión de principios ideológicos que nos unen y seguiremos trabajando las próximas semanas”.
A ellos, Petro les ha propuesto "ganar la Presidencia de la República en primera vuelta para cambiar de verdad a Colombia hacia la paz, el trabajo y la democracia", es decir desmarcándose de la idea de esperar a definir quien pasa a segunda vuelta.
Precisamente, ayer la coalición de izquierda liderada por siete movimientos políticos (Colombia Humana, Unión Patriótica-Partido Comunista, Polo Democrático, Movimiento Alternativo Indígena y Social -MAIS-, Partido del Trabajo de Colombia, Unidad Democrática y Todos Somos Colombia) anunciaron lo que denominaron un “pacto histórico” para conformar las listas al Congreso, con la aspiración de elegir una bancada de 55 senadores y 86 representantes.
En su comunicado manifestaron que “nuestro proyecto está ligado a una consulta de todas las candidaturas presidenciales propuestas por las fuerzas progresistas y liberales, que aspiramos derrotar en primera vuelta a los candidatos del bloque del actual gobierno”.
Petro sostuvo que “para cambiar de verdad el país, que comienza por cambiar el Congreso donde se hacen las leyes. Porque las leyes estén al servicio de la gente que trabaja, del campo, del territorio excluido, de la democracia y la paz”.