Comunicaciones | El Nuevo Siglo
Sábado, 2 de Febrero de 2019

Los eventos y desarrollos tecnológicos modernos, de hecho han obligado a todo el mundo a actualizarse y ponerse al día para no quedarse atrás. Todo es el producto del talento humano y también los deseos de aprender de la gente. La velocidad con la cual se han puesto a disposición las nuevas tecnologías y adelantos ha sido sin lugar vertiginosa.

La manera como nos hemos ingeniado para comunicarnos los unos con los otros ha sido tan rápida que difícilmente tiene parangón; nos dimos cuenta que una parte del universo llamaba nuestra atención para saber que había más allá, nos movió la inteligencia por conocer.

Pensando en qué movió a Cristóbal Colón y a todos sus compañeros aventureros a desafiar el mar y querer ver lo que había más adelante. Si el mundo era plano o redondo y qué se encontraba allende el horizonte. Los movió el espíritu aventurero si no, el comercial pretendiendo encontrar un camino marítimo más expedito entre los consumidores de Europa y las riquezas y tesoros de África y el Medio Oriente. En esa investigación o aventura se encontraron con un continente rico, poblado por gente que tenía bien desarrollado su “modus vivendi” excepcional. Tenían una civilización bien organizada, leyes, jerarquías para su aplicación y orden, si así puede llamarse la información la organización de seres humanos.

Se nos viene a la imaginación, utópica desde luego, lo que hubiera sucedido con toda esta gente que habitaba las Américas si no hubiera sido descubierta por los españoles y  luego habitada, invadida y sometida por las olas de europeos que trajeron sus costumbres, sus creencias y su manera de vivir impuesta a los habitantes de estas tierras en términos actuales “a la brava”. El descubrimiento, el del colonialismo y luego la independencia guardaron sistemas “adecuados” de convivencia y civilización al estilo de los invasores.

Así fue pasando el tiempo hasta que nos dimos cuenta que la tierra, nuestro habitáculo forma parte de lo que se llama el universo. Nos hemos sentido amos y señores de él, aunque hemos descubierto que existen planetas, satélites y en fin otros universos que conjuntamente forman parte de lo que hay que investigar y descubrir;  para ello nos hemos empeñado en conocer. Hemos ido a la luna uno de los satélites de la tierra; para ello nos inventamos los aparatos apropiados que manejados por seres humanos han estado allá. Nos han proporcionado observaciones valiosas.

Nuestros actuales navegantes espaciales tienen conocimientos de astronomía, de matemáticas y de todo lo que la sabiduría del mundo ha acumulado hasta ahora. Eran no navegantes solitarios; podían comunicarse con la tierra por medio de sistema de comunicación a través de los cuales daba razón de su aventura y podían pedir  y recibir instrucciones para lograr el éxito de sus viajes, las comunicaciones tenían que ser instantáneas. Podrá haber opiniones en contrario pero estos viajes interplanetarios que están que nos llevan a Marte son el origen de nuestras comunicaciones diarias a través del celular.