¿Qué planea el Eln con su escalada terrorista en el país? | El Nuevo Siglo
Integrantes de la organización han atacado vehículos en las carreteras para generar temor en la población.
Foto AFP
Sábado, 26 de Febrero de 2022
Redacción Política

Desde el pasado 23 de febrero, fecha en la que anunció su “paro armado” por todo el territorio nacional, el Eln ha venido desarrollando diferentes ataques contra la población civil.

En días pasados, sus integrantes habían señalado que estas nuevas emboscadas pretendían no solamente paralizar el comercio y la movilidad de los colombianos, sino manifestar su inconformidad con las políticas económicas y sociales que viene ejecutando el Gobierno nacional, en cabeza del presidente Iván Duque.

Sin embargo, a poco menos de 15 días para que se realicen las elecciones legislativas y de consultas, el panorama en varios departamentos es bastante crítico, ya que incluso algunos candidatos han preferido no realizar actividades de campaña para evitar ser atacados por estos sujetos, pese a que advirtieron que su objetivo no es arremeter contra la población.

Aunque inicialmente estas acciones ilegales iban a finalizar ayer, en un nuevo comunicado, emitido el pasado viernes, la organización criminal extendió su protesta violenta hasta las 6:00 de la mañana del 28 de febrero, y recriminó que la población no “acatara” su orden de resguardarse en sus viviendas, sino que continuó desarrollando sus actividades normales, tal como lo indicaron las autoridades locales.

Temores de la ciudadanía

Esto ha derivado que varias organizaciones de carga expresen su preocupación frente a la toma de las principales carreteras. Así lo manifestó la Federación de Empresarios de Transporte de Carga, cuyos voceros pidieron la militarización de las vías departamentales de Cesar, Nariño, Cauca, Norte de Santander, Valle del Cauca, entre otras.

“Los daños a la infraestructura afectan directamente la operación de los transportadores de carga, el comercio exterior y la competitividad del país. Pedimos que se nos garantice el acompañamiento a todos los vehículos en dichos tramos”, se lee en el comunicado.

Ante las amenazas y palabras soeces que emplearon los integrantes de esta estructura criminal, el ministro del Interior, Daniel Palacios, fue enfático en declarar que la Fuerza Pública estará para proteger a los colombianos de los temores que este grupo pueda generar.

“Lo que ha caracterizado al Eln es hacer incursiones en donde se atraviesan momentáneamente en la vías, siembran el miedo y luego se repliegan, también lo vemos a través de esos petardos panfletarios (…) Todas las acciones han sido atendidas por la Fuerza Pública, tenemos un gran despliegue y llegaremos a cualquier lugar”, indicó el alto funcionario.

Por su parte, el ministro de Defensa, Diego Molano, había mencionado que este actuar criminal podría interferir en el proceso electoral que se aproxima, y cuestionó si estos hechos tendrían como propósito beneficiar la candidatura de un aspirante a la Presidencia.

“Faltando pocos días para las elecciones, nosotros nos preguntamos cuáles son los propósitos que tiene el Eln cuando plantea este tipo de actividades. ¿Cuál es su propósito? Influir en ellas. Es muy extraño que estos planteen esas acciones para generar temor en la población, y mientras tanto un candidato les dice que les va a dar perdón social en el futuro. A los terroristas se les combate, con decisión, con contundencia, como lo hace nuestro Ejército Nacional”, indicó.



Cabe recordar que la Conferencia Episcopal también solicitó que se concrete un diálogo entre el Gobierno con estos actores, en búsqueda de nuevas alternativas para el país.

“Como Iglesia, en medio de la situación que afecta al país y particularmente a algunas regiones, hacemos un llamado a respetar la vida y a abandonar los caminos de la intolerancia y la violencia. Den ese primer paso para continuar en el camino de la paz y la reconciliación”.

Frente a esto, EL NUEVO SIGLO consultó con expertos en materia de seguridad y paz, para conocer cuál es el objetivo enmarcado por el Eln para realizar este “paro armado”, y si esto tiene relación directa con los comicios electorales que se desarrollarán en marzo, mayo y junio de este año.

Perturbación electoral

Inicialmente, el presidente de la Asociación de Oficiales Retirados de las Fuerzas Militares (Acore), John Marulanda, mencionó que el objetivo principal que tiene este grupo armado con su escalada terrorista por todo el país es interferir violentamente en los comicios del legislativo y de Presidencia.

“El objetivo del Eln con esta escalada terrorista es más que claro, perturbar todo el periodo electoral en Colombia, generando estrés y terror en la ciudadanía de todo el país; pero todos se están dando cuenta que solo lo están logrando en partes periféricas como la frontera con Venezuela o la frontera con Ecuador”, señaló.

No obstante, advirtió que en “lo que concierne en Bogotá o en Medellín, en Cali, en Bucaramanga, en Barranquilla, es decir, las ciudades capitales de Colombia, poco se ve de actividades armadas del Eln. No obstante, vemos que este grupo demuestra que con sus actos quiere interferir en esta etapa preelectoral para condicionar a la ciudadanía”.

Entretanto, el director del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), Camilo González Posso, calificó como “absurda” la manera en la que los integrantes de esta organización pretenden atemorizar a la población colombiana.

“Es una forma absurda de llamar la atención en la coyuntura electoral, y tener visibilidad para buscar algún tipo de diálogos en el próximo Gobierno, hacer una demostración de fuerza con atentados y con intimidación a la gente, interrupción de transporte de vías. En nuestros registros de Indepaz, con corte al día viernes, tenemos reportados cerca de 47 eventos en el territorio nacional”, afirmó.

Frente a una supuesta injerencia en las próximas elecciones, González Posso declaró que “supuestamente, el Eln cree que interfiere en las decisiones electorales del país, pero yo creo que esto es contraproducente porque lo que hacen es aislarse de todos los sectores de izquierda, derecha, centro, de arriba o de abajo, y generar un distanciamiento mayor de la mayoría de la población”.

Mientras que el director del área Dinámicas del Conflicto de la Fundación Ideas para la Paz, Jorge Mantilla, indicó que el grupo armado Eln se ha fortalecido en los últimos años, tras la desaparición de las Farc como organización al margen de la ley, y afirmó que es una estructura que no escucha las peticiones de organismos internacionales como Naciones Unidas u otras entidades como la Iglesia.

“Lamentablemente, hay que decirlo: esta estructura solamente se ha fortalecido en estos últimos años. Y este paro armado solamente ha confirmado que si no ocurre en Bogotá u otras ciudades, entonces no tenemos paro, pero lo cierto es que las regiones son las que siempre sufren este tipo de embestidas”, comentó.

Más de 32 atentados durante la semana: Mindefensa

En diálogos con los medios de comunicación, el ministro de Defensa, Diego Molano, afirmó que en el transcurso de la semana se presentaron 32 acciones de alteración al orden público en el país, a causa del “paro armado” convocado por el Eln.

El jefe de cartera señaló que estas acciones se concentraron principalmente en cinco departamentos y 15 municipios, pero recalcó la disposición de la Fuerza Pública para la tranquilidad de la población.

“Tenemos el Plan Democracia con más de 240 mil hombres de la fuerza pública, para contribuir a la seguridad en el país, y hemos reaccionado oportunamente a esas acciones, con capturas y neutralizaciones”, afirmó el funcionario.

Frente a la constante presencia de milicianos en zonas como Arauca o Norte de Santander, Molano afirmó que “de forma cobarde realizan atentados y después cruzan la frontera. Entonces, a la fuerza pública lo que le corresponde es capturarlos y judicializarlos”.

Vale destacar que la población de Pailitas (Cesar) es la región más perjudicada por el “paro armado” del Eln, ya que se registró la quema de cinco tractocamiones en la vía municipal, así como la destrucción de un puente vehicular que conecta con Tamalameque.