Con Nuevas ideas, Bukele apuesta a mayoría parlamentaria | El Nuevo Siglo
NAYIB BUKELE gobierna desde que asumió, hace más de un año con minoría parlamentaria.
Foto archivo AFP
Domingo, 28 de Febrero de 2021
Redacción internacional

No son las presidenciales pero si unos comicios claves para continuar avanzando en su proyecto político. Los comicios legislativos y municipales de hoy en El Salvador son tan decisivos para el mandatario Nayib Bukele que lo llevó a involucrarse en dicho proceso para asegurar un gobierno con mayoría parlamentaria.

“Dictador” para unos, “populista” según otros y el único presidente que ha cumplido sus promesas es para la gran mayoría de los 5.3 millones de habitantes de este país centroamericano este joven ‘millenial’ de 39 años que hace un año gobierna uno de los países sin guerra más violentos del mundo.

Combatir la inseguridad, el imperio de la ‘ley’ que impusieron en el país pandillas de fuertes tentáculos como la Mara Salvatrucha (MS), Barrio 18 y otros grupos menores, fue su bandera de campaña y hoy es su mayor bandera electoral. Ello lo llevó a una política de cero tolerancia con la delincuencia, lo que ha sido calificado por sus detractores como una tendencia autoritaria y violadora de los derechos humanos.

Exmilitante del Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) este mandatario joven, de corte conservador, logró en febrero de 2019 lo impensable en la nación centroamericana: derrotar a los tradicionales partidos de izquierda y de derecha con un mensaje renovador, claro, dirigido a su generación y divulgándolo hábilmente por las redes sociales. Sus lemas de campaña fueron recuperar la seguridad y ‘hacerle la guerra’ a los corruptos. 

Precedido de una buena gestión como alcalde capitalino, Nayib Bukele, compitió en la presidencial con el aval de la conservadora Gana (Gran Alianza por la Unidad Nacional), por lo que se hizo al apodo de “El Golondrino”. Meses después de asumir el poder, decidió fundar su propio partido ‘Nuevas Ideas’, el que hoy es favorito tanto para las legislativas como las municipales.

El gobernante salvadoreño promete continuar con la tarea que ha emprendido, la que no le ha sido fácil precisamente por tener minoría parlamentaria y de allí que desde semanas atrás ha pedido el apoyo de los ciudadanos para la crucial jornada electoral de este domingo.

Impulsados por la popularidad del presidente Bukele, que a más de un año de mandato supera el 65%, estas elecciones apuntan a un incremento de las fuerzas que le son afines (Gama y Nuevas Ideas) según lo señalan todas las encuestas.

En los últimos días e ignorando el período de silencio electoral, el gobierno divulgó repetidamente en la televisión un anuncio en el que el Presidente llama a elegir una asamblea con diputados "que vayamos todos para el mismo lado".

Como reseñamos, sin ser candidato, ha estado en el centro de la campaña electoral y de esta forma ha aparecido en todo tipo de publicidad (desde vallas hasta propaganda televisiva) de los aspirantes a cargos de elección popular.

Los opositores, por su parte, han advertido del peligro que puede representar una concentración de poder en manos del “Golondrino”, a quien reiteradamente cuestionan por su aparente menosprecio a las reglas democráticas.

Danilo Miranda, profesor de Ciencias Políticas de la jesuita Universidad Centroamericana (UCA) recuerda que Bukele usó políticamente a las fuerzas del orden, cuando el 9 de febrero de 2020, se hizo acompañar por militares para tomar la Asamblea Legislativa y "presionar" a los diputados a aprobar un préstamo para fines de seguridad.

Para Miranda, Bukele ha hecho un uso partidario de recursos públicos, en plena campaña electoral, con la distribución de paquetes de alimentos durante la pandemia, "cuya compra no ha sido fiscalizada adecuadamente".

Y finalmente señala que un control legislativo le permitiría al Jefe de Estado afianzar su poder con nombramientos de jueces en la Corte Suprema y la Fiscalía, instituciones con las cuales el presidente ha tenido choques, consideró.

Sin embargo, uno de los partidarios del mandatario, el diputado Guillermo Gallegos, de la oficialista Gana, consideró que "la gente se va a volcar a votar por Gana y por Nueva Ideas porque respaldamos al Presidente, es un reconocimiento a su gestión y esto es sobre todo por la insatisfacción de la gente con los partidos tradicionales.

Si las proyecciones de las encuestas se cumplen "habría una concentración de poder en el presidente de la República, ya que podría aprobar, reformar o derogar leyes a su conveniencia", comentó el director de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), Saúl Baños.

El partido Nuevas Ideas (NI) lidera las preferencias. Actualmente, el Legislativo es controlado por los partidos de oposición Arena (derecha) y la exguerrilla FMLN (izquierda), que le hacen contrapeso.

Se puede "inferir" que Nuevas Ideas conseguirá 55 diputados, uno menos que la mayoría calificada, dijo el rector de la Universidad Centroamericana (UCA), Andreu Oliva, al presentar el 12 de febrero su última encuesta sobre esta elección.

Baños recordó que desde la firma de los acuerdos de paz en 1992 que terminaron con doce años de guerra civil, ningún partido ha obtenido la mayoría simple de 43 diputados en el Congreso unicameral de 84 escaños, por lo que para gobernar debió prevalecer el diálogo.

Hartazgo ciudadano

Los  partidos tradicionales de derecha e izquierda llegan alicaídos a esta cita electoral, pero albergan la esperanza de un repunte de última hora que les permita mantener algo de su fuerza en el Congreso.

La derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena), que gobernó entre 1989-2009, y el izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que gobernó entre 2009-2019, pasan por su peor momento desde la victoria presidencial de Bukele.

Arena y el FMLN dominan el Congreso desde 2018, cuando se celebró la última elección municipal y legislativa.

Ambos perdieron popularidad "por dar la espalda a la voz de la gente", aseguró, la directora del Instituto de Opinión Publica de la Universidad Centroamericana (UCA), Laura Andrade.

La imagen de Arena descendió, cuando fueron encarcelados los expresidentes Francisco Flores (1999-2004, ya fallecido) y Elías Antonio Saca (2004-2009), para afrontar juicios por la malversación de más de 315 millones de dólares.

En el caso del FMLN, según Andrade, los gobiernos fueron "incapaces de hacer cambios radicales en la estructura" sociopolítica que provoca la desigualdad entre los salvadoreños.

El FMLN también carga con el desgaste que le ocasionó el expresidente Mauricio Funes (2009-2014), quien se exilió en Nicaragua para evadir un juicio por la supuesta malversación de 351 millones de dólares.

Andrade consideró "preocupante" que, en ese escenario, las elecciones del domingo apunten a consolidar el poder político en una sola fuerza, afín al presidente Bukele.

Recordó que El Salvador puso todo el poder en manos de Arena entre 1994 y 2000, y "fue lo peor que le pudo ocurrir al país" porque la derecha impulsó privatizaciones que debilitaron el patrimonio del Estado.

Bukele, según Andrade, supo capitalizar la frustración ciudadana para ganar la presidencia en 2019 y ahora sus ‘Nuevas Ideas’ concitan un respaldo mayoritario en la población.

Menos crímenes 

Sin duda uno los mayores éxitos de gestión de Bukele para la baja en la criminalidad que se ha dado en todo el país y especialmente en aquellas colonias acosadas por las pandillas.

Vale recordar que Mara Salvatrucha, Barrio 18 y otras menores tienen unos 70.000 miembros en El Salvador, más de 17.000 de ellos encarcelados, y se dedican a la extorsión, el narcotráfico y otras actividades ilegales.

El Plan de Control Territorial, puesto en vigencia en junio de 2019, fue el punto de partida de la reducción de los índices de criminalidad en El Salvador.

"Veníamos de una tasa (anual) de 50 homicidios por 100.000 habitantes, y en 20 meses de vigencia del Plan de Control Territorial llegamos a 19 homicidios por cada 100.000", detalló un funcionario gubernamental. Así, El Salvador pasó de hasta 12 homicidios diarios a 3,5 en el último año.

La guerra contra la violencia criminal no está ganada, falta mucho por recorrer, pero los salvadoreños reconocen esta importante ofensiva de Bukele por lo que se presume lo respaldarán mayoritariamente hoy en las urnas, donde se elegirán a los nuevos miembros del Congreso, 262 alcaldes y una veintena de diputados del Parlamento Centroamericano (Parlacen).