Bogotá fue reconocida como una de las “Ciudades Arboladas del mundo” por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, y la Fundación Arbor Day.
Con este nombramiento, la capital colombiana se suma a las 120 ciudades de 65 países del mundo que ostentan esta membresía y reafirman su compromiso con el mejoramiento, cuidado y protección del arbolado y de las coberturas verdes de sus territorios en un contexto global.
El Programa, Tree Cities of the World, evalúa anualmente los esfuerzos de las ciudades del mundo para garantizar la protección de sus bosques y árboles urbanos así como las acciones de recuperación, mantenimiento y gestión sostenible de sus coberturas vegetales que realizan.
Este reconocimiento se otorga en un momento estratégico para Bogotá, teniendo en cuenta el compromiso de la administración de la alcaldesa Claudia López de reverdecer la ciudad a través del cumplimiento de una de las metas definidas en el Plan de Desarrollo 2020-2024, como es plantar cerca de 802 mil árboles por toda la ciudad.
En lo corrido de 2021, se han plantado más de 53.000 árboles tanto en áreas rurales como urbanas de Bogotá, con especies aptas para cada tipo de ecosistema capitalino. Más de 330.000 árboles ya existentes han sido objeto de mantenimiento para garantizar su óptimo desarrollo.
Como parte de los compromisos que se adquieren con este reconocimiento de la FAO, Bogotá continúa con las estrategias que promueven la participación ciudadana en las labores de cuidado y protección del arbolado. También se están adelantando campañas sociales que permiten mostrar a las comunidades las actividades silviculturales es decir, de mantenimiento y cuidado que se realiza a los árboles de la ciudad, en la que la sociedad no solo observa sino que también se involucra en las actividades para cuidar las coberturas verdes.
Es clave recordar que el aporte que brindan los árboles y coberturas verdes a la sostenibilidad ambiental de las ciudades, contribuye en enorme medida a proteger la calidad del aire, regular el microclima, mitigar la crisis climática, prevenir la erosión del suelo y conservar los recursos hídricos, entre otros beneficios.
El mejoramiento del estado de salud físico y mental de las personas, el disfrute de un bello paisaje y hasta la valorización de los inmuebles, también es parte de los beneficios que según el Jardín Botánico, brindan los espacios verdes en la ciudad.