Una nueva causal para muerte política se establecería por las obras inconclusas que dejen los gobernadores y alcaldes, comúnmente conocidas como ‘elefantes blancos’. Así lo anunció el representante a la Cámara por el Centro Democrático, Ricardo Ferro, quien presentará un proyecto en ese sentido en los próximos días
EL NUEVO SIGLO: ¿En qué consiste la iniciativa?
RICARDO FERRO LOZANO: Uno de los temas en los cuales más se pierde dinero público es en las obras inconclusas. Entonces, lo que estamos buscando es que cuando un alcalde o un gobernador arranque una obra en su período de gobierno y no la termine, que quede inhabilitado de por vida para volver a ejercer un cargo público, es decir, que se le decrete muerte política a aquellos mandatarios que dejen ‘elefantes blancos’ en su paso por la administración pública.
ENS: ¿Habría excepciones o la sanción sería automática?
RAFL: Hay obras que desde la planeación misma no serán terminadas dentro del periodo del mandatario, esa es la única excepción. Pero cuando no logra finiquitarse una obra que se encuentra planeada y que tiene cierre financiero, y que arranca su ejecución y debe culminar dentro del periodo de gobierno de un alcalde o un gobernador, ese mandatario que quede inhabilitado de por vida.
Hay cerca de $23 billones en este momento embolatados por cuenta de ‘elefantes blancos’, y esos $23 billones le representan a los colombianos la necesidad de hacer una reforma tributaria.
Si nosotros en vez de estar haciendo reformas tributarias cada año, cada dos años, cada cuatro años, nos preocupamos porque las obras que se comiencen se terminen, vamos a requerir menos recursos para poder cumplir con el objetivo social del Estado.
- Le puede interesar: Rechazan demanda de Francia Márquez contra presidente del Senado
ENS: ¿Cuál es la principal razón para los ‘elefantes blancos’?
RAFL: La principal razón es la corrupción, que se roban la plata, que la plata que era para la obra se va en coimas y esa plata se va para las personas.
Pongo un ejemplo: un kilómetro de pavimento actualmente en una vía del Tolima, la vía Ibagué-Rovira. Es una vía que inicialmente se planeó para hacerle unas intervenciones en cerca de 10 kilómetros, y arreglar un kilómetro costaba cerca de $2.500 millones, y era una obra que se tenía que hacer en menos de un año.
Resulta que finalizó el año, no se terminó la obra, se adicionaron $11 mil millones. Es decir, ya vamos en cerca de $35 mil millones y en el momento la obra no se ha terminado.
Entonces una obra que inicialmente costaba un kilómetro $2.500 millones, ya vamos en $3.500 millones el mismo kilómetro.
Uno se pregunta por qué es necesario, primero, que adicionen recursos a las obras y, segundo, que prorroguen el tiempo de la ejecución de las mismas, sabiendo que cuando se prorroga el tiempo los materiales van subiendo de costo de un año a otro, y esa obra que no se ha terminado en el tiempo previsto hubiera costado lo que originalmente se había planteado.
Así puedo hablar de megacolegios, de escenarios deportivos, de acueductos, de viviendas, en fin, de todas las obras de infraestructura del Estado.