El Acto Legislativo que regula el Cannabis de Uso Adulto fue aprobado en la Plenaria de la Cámara de Representantes por mayorías en su segundo debate de la segunda vuelta. Con 98 votos a favor y 57 en contra, y a dos debates en el Senado de la República para convertirse en ley, las críticas y objeciones por parte de múltiples representantes dejan al descubierto la disyuntiva que el proyecto ha generado.

Los congresistas del Partido Conservador Juana Londoño, Julio Roberto Salazar y Luis Eduardo Díaz votaron en contra del proyecto.

La representante Juana Londoño argumentó su voto en que la regulación del consumo de cannabis no soluciona los problemas.

“Respeto mucho la diferencia en torno a un tema tan sensible en materia de consumo de cannabis, sin embargo, hoy quiero hablarles como madre que representa muchos hogares donde hoy padecen el problema de consumo de la marihuana. Un testimonio en el Congreso de un joven que consumió durante 16 años dice que la marihuana sí mata, que a él le mató sus sueños, le mató una relación sana con su hijo y que le mató la paz de su madre. Para mí las drogas no son una libertad, son una esclavitud y la regulación no soluciona los problemas, solo facilita su consumo”, aseveró.

Por su parte, el representante Julio Salazar explicó las razones por las que cree que esta iniciativa no es viable para la sociedad.

“Al aprobar esta iniciativa, se puede abrir la puerta a otras drogas y adicciones. La regulación del cannabis recreativo podría permitir que los menores tengan acceso a esta sustancia, lo que aumentaría su riesgo de problemas de salud y adicción. La regulación podría aumentar el tráfico y el cultivo ilícito de cannabis, lo que tendría un efecto negativo en la seguridad pública. Además, es posible que la regulación no tenga el efecto deseado en la economía, ya que podría haber una sobreproducción y disminución de los precios, lo que afectaría negativamente a los productores locales”, señaló.

Finalmente, el representante Luis Eduardo Díaz afirmó que este proyecto de ley generará más problemas en la sociedad que las bondades económicas que pueda traer.

“El Estado no tiene unas políticas públicas claras para que esta disposición sea viable y se pueda contrarrestar para que nuestra juventud tenga un control efectivo. Dios nos ampare que en nuestras familias caiga alguien en un vicio del consumo, porque será una tragedia para cada una de las familias”, sostuvo.

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Regularización sí, pero no así

La representante del Partido Cambio Radical, Adriana Arbeláez, explicó las razones por las que la bancada se apartó de este proyecto.

“Somos conscientes de que hoy las familias colombianas están muy preocupadas por el aumento en el consumo que se ha venido dando, sobre todo en menores de edad. No se está abordando el tema como un tema de salud pública. Nos apartamos, no sin antes recordar que hemos sido nosotros los que impulsamos una iniciativa para que haya delimitación del consumo en los parques y en el espacio público”, señaló.

Por su parte, el representante del Centro Democrático, Edward Osorio, aseveró que cuesta mucho pensar que, en el Congreso de la República, donde se ven representados todos los ciudadanos del país, se estén dando este tipo de iniciativas.

“Lo que hacen es inducir a jóvenes y adultos al consumo de sustancias. Los que afirman que la ‘droga no mata’, están ‘totalmente equivocados’. Una adicción trae consigo la muerte de sueños, de proyectos, de la salud y el bienestar de quienes caen en este devastador mundo y, por consiguiente, de aquellos que están a su alrededor. Esperamos que el Senado tenga más sindéresis y no permita que este proyecto sea aprobado y se incorpore a la Constitución Política”, señaló.

Finalmente, el representante Jorge Tovar de las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz (Citrep) explicó que, a pesar de estar a favor de regular su consumo y comercialización, el uso recreativo del cannabis tiene consecuencias negativas en la salud.

“Si normalizamos el uso del cannabis, más, aun reformando la constitución, estamos enviando un mensaje erróneo a la niñez y a los jóvenes. La marihuana recreativa no es buena. Debemos comprometernos desde la Constitución Política con castigar y restringir su consumo en espacios concurridos por la niñez y la juventud en concordancia con la legislación y jurisprudencia vigente”, concluyó.