LA NOVEDAD entre los 296 parlamentarios en la actualidad en el Congreso son los 16 que fueron elegidos por las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz, en representación de las víctimas del conflicto. Son regiones donde pareciera que se juntaron todos los problemas, como el abandono del Estado y la violencia de los grupos armados. Estas poblaciones esperan bastante de los voceros que eligieron, muchas veces soluciones que ellos no pueden dar.

Las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz fueron creadas en el Acuerdo que firmó el gobierno de Juan Manuel Santos con la guerrilla de las Farc, en el segundo punto, con el fin de darle representación o voz, en la Cámara, a las zonas que históricamente han sido más afectadas por el conflicto armado.

Precisamente, estas circunscripciones corresponden a los 16 territorios cobijados por los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial – PDET.

Sin embargo, a 6 años de que entraran en vigor los PDET, hay atrasos en las inversiones en las 16 zonas priorizadas y no se sienten todavía los impactos de las estrategias de orden económico y de obras de desarrollo para reducir la brecha de estos territorios con las áreas urbanas.

Está contemplado que las Circunscripciones Especiales de Paz sean por dos congresos, es decir el actual y el que se elija para el período 2026- 2030.

Se busca que quienes ocupen estos escaños no sean políticos, sino personas surgidas de colectivos sociales. Por esta razón solo pueden ser inscritos por organizaciones de víctimas, organizaciones campesinas y grupos significativos de ciudadanos.

No podrán aspirar quienes hayan sido candidatos elegidos o no a cargos públicos, con el aval de partidos o movimientos políticos con representación en el Congreso o con personería jurídica

Jhon Fredy Valencia Caicedo ocupa una curul en la Cámara por la Circunscripción Especial de Paz del Putumayo. “Llegamos al Congreso de la República nuevos viniendo del campo colombiano, en mi caso del departamento del Putumayo, sin haber participado en política nunca”, explicó a EL NUEVO SIGLO.

Agregó que “tenía un concepto de que el Congreso era otra cosa, pensé que acá se podía hacer de todo, y realmente no se puede hacer de todo, pero sí hemos logrado hacer un aporte muy significativo para las víctimas, para el campesino y para el pueblo colombiano”.

Valencia le ha llamado la atención trabajar por su comunidad, por ello antes de ser congresista, participó en juntas de acción comunal por 8 años, fue líder comunitario y, además, voluntario de la Defensa Civil, en donde junto con sus vecinos lograron soluciones a algunas problemáticas.

Sin embargo, acota que estando en el Congreso es “algo muy diferente porque se crean unas expectativas muy grandes en la Colombia donde nosotros venimos, pues la gente cree que uno tiene el poder de solucionar todos los problemas que se presentan en las regiones, y eso no es así. Entonces sí le cambia la vida a uno cuando la gente lo llama y le pide, le dice ‘ayúdeme con esto, ayúdeme con lo otro’. Y uno, pues está en lo Legislativo, no tiene ese poder de ayudar a toda la gente. Pero ahí vamos haciendo un trabajo significativo”.

Señaló que en Putumayo “hay diversos problemas: el conflicto armado, el narcotráfico, la inseguridad, la falta de oportunidades, no tenemos buenas vías, no tenemos universidad, no tenemos un sistema económico que garantice a las personas la sostenibilidad”.

Indemnización de víctimas

Jorge Rodrigo Tovar Vélez representa la Circunscripción Especial de Paz de los departamentos de Cesar, La Guajira y Magdalena.

“Todos los que estamos hoy en curules de paz es primera vez que participamos en política electoral, entonces todo lo que nos hemos encontrado ha sido nuevo. Estamos en un proceso de aprendizaje”, indicó a este Diario el parlamentario.

Agregó que llegó al Congreso “con muchas ganas e intenciones” de trabajar en varios temas, uno la indemnización de las víctimas.

• Le puede interesar: Naufragios podrían contener elementos de patrimonio cultural

“En Colombia hay más de 9 millones 500 000 víctimas, de las cuales más o menos 7 millones 500 000 son sujetas a indemnización”, dijo Tovar. Sin embargo, acotó, en más de 15 años “se ha indemnizado alrededor de 1 millón de víctimas”.

Asimismo, señaló que este es un problema que se soluciona con voluntad política y con recursos. Empero dijo que “hemos encontrado en este Gobierno una talanquera frente a este tema. Se lo hemos solicitado a la directora de la Unidad de Víctimas, ha sido una comunicación muy difícil con ella; con el ministro de Hacienda pasado; con el ministro del Interior pasado. Hemos radicado proposiciones”.

Añadió el congresista que “se nos han comprometido, pero al final no hemos logrado lo que las víctimas esperan en nuestros territorios, que las indemnizaciones les lleguen. Esa ha sido una de las frustraciones que me he encontrado en este ejercicio del Congreso de la República”.

Por otro lado, el representante también expresó que no es fácil la seguridad en las áreas rurales a donde va para hablar con las comunidades.

“Nosotros representamos, a diferencia del resto de congresistas, las zonas rurales de algunos municipios. Tenemos que estar en contacto con las personas que habitan los corregimientos y las veredas, es decir la Colombia profunda de este país, donde no existe el Estado, donde no hay Fuerza Pública, donde los ministerios no llegan”, dijo.

Destacó que: “la Colombia profunda donde hoy estamos llegando los representantes de paz, en algunas de ellas el SENA es lo único que nos encontramos de presencia del Estado. Y una realidad que en Colombia seguimos en conflicto armado, Colombia sigue viviendo una guerra en la cual estos territorios, que además de ser los que históricamente más ha afectado la violencia, son en los que hoy están los grupos al margen de la ley casi que controlando todos esos territorios”.

Es una oportunidad

James Hermenegildo Mosquera ocupa una curul en la Cámara por la Circunscripción Especial de Paz de Chocó y Antioquia.

“La verdad es que creemos que esta es una gran posibilidad, que la bancada de paz de los 16 representantes de estas regiones del país abandonado, del país pobre, del país que tenía otra circunstancia histórica, no teníamos cómo llegar tan siquiera al Congreso, y creo que se ha dado un avance enorme”, compartió el parlamentario a este Medio.

Entre lo que mencionó, resaltó que son 16 voces “que desde el Congreso le reclamamos a este, que dice ser el Gobierno del cambio, derechos para estas víctimas, porque lo común que tenemos en estas 16 subregiones” es la carencia de los servicios básicos y otras necesidades fundamentales para una vida digna de la población.

Explicó Mosquera que: “represento a los 12 municipios priorizados del Chocó y a dos de Antioquia, que son los dos más pobres de Antioquia: Vigía del Fuerte y Murindó. Nosotros allá no tenemos agua potable ni servicio de energía eléctrica ni escuela ni salud ¡no tenemos nada!”.

Agregó que: “nosotros por lo menos desde el Congreso hemos venido poniendo de presente eso, y creo que ha valido la pena que estemos en el Congreso representando, no solamente a las víctimas del conflicto armado de nuestro territorio, sino también a toda la población de Chocó y de Antioquia, porque hemos puesto de presente esas necesidades”.

Dijo el Legislador que: “hemos hecho un llamado perentorio, no solamente al gobierno de Gustavo Petro, sino también desde que fuimos elegidos el 13 de marzo del año anterior, comenzamos a tener contacto con la comunidad internacional a través del PNUD, de Naciones Unidas; de la OEA; y comenzamos a hacer visible la importancia que las víctimas estuviéramos en el Congreso”.