El mercado laboral estadounidense se mostró fuerte en mayo y los trabajadores siguen en una posición de fortaleza a pesar de la ralentización de la creación de empleo, pero la lucha contra la inflación debería cambiar eso en los próximos meses.
Los empleadores estadounidenses crearon 390 mil puestos de trabajo en mayo, según informó el viernes el Gobierno, una reducción en el ritmo de contratación.
La cifra es inferior a los 436 mil de abril (revisados al alza), pero mejor que los 325 mil previstos por los analistas.
La tasa de desempleo se mantuvo en el 3,6% por tercer mes consecutivo, apenas una décima por encima del nivel prepandemia, de febrero de 2020, dijo el Departamento de Trabajo.
Los restaurantes y los hoteles, diezmados por el covid-19, mostraron una fuerte recuperación en mayo, añadiendo 84 mil puestos.
Los empleadores han tenido dificultades para cubrir las vacantes, lo que ha impulsado los salarios. El salario medio por hora subió otros diez céntimos en comparación con abril, hasta los 31,95 dólares.
La tasa salarial es un 5,2% superior a la de mayo de 2021, pero el ritmo de crecimiento va en descenso, según el informe.
Esto podría ser una buena noticia para la Reserva Federal, que ha lanzado una agresiva campaña de subida de los tipos de interés para combatir la inflación en Estados Unidos, que se sitúa en su nivel más alto de las últimas cuatro décadas.
Desde la Casa Blanca, el presidente estadounidense, Joe Biden, aseguró más tarde que es posible controlar la inflación "sin sacrificar" el empleo, en momentos en que los indicadores económicos muestran solidez.
"Desde cualquier punto de vista, este es uno de los mercados laborales más sólidos de los últimos 50 años", comentó Mike Fratantoni, economista jefe de la Asociación de Banqueros Hipotecarios.
"Sigue habiendo millones de puestos de trabajo más que personas disponibles para cubrirlos, y el crecimiento salarial sigue siendo fuerte", detalló.
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Deterioro esperado
Los sectores del ocio, la hostelería, los servicios empresariales, el transporte y el almacenamiento fueron los principales creadores de empleo el mes pasado, mientras que el comercio minorista destruyó puestos de trabajo, informó el Departamento de Trabajo en un comunicado.
La tasa de participación, es decir, la proporción de adultos que trabajan o buscan un empleo, mejoró ligeramente, pero con un 62,3% (0,1 puntos más que lo reportado en abril), sigue estando 1,1 puntos por debajo de su nivel prepandémico.
Aunque la lucha contra la inflación podría provocar un nuevo aumento del desempleo y frenar el crecimiento económico, incluso provocando una recesión. Es por ello que, para frenar el alza de precios, una de los principales mecanismos es frenar la demanda de consumidores y empresas.
Y allí la FED lleva la batuta, subiendo progresivamente las tasas de interés.
"Si bien la situación del mercado laboral debería seguir siendo buena a corto plazo, la demanda de mano de obra debería caer a finales de año, ya que las empresas se enfrentan a costes más elevados, una demanda reducida de los consumidores y una rentabilidad más débil", afirma Kathy Bostjancic, economista de Oxford Economics.
Sin embargo, cree que un mayor número de trabajadores podría empezar a buscar trabajo de nuevo, lo que "debería aliviar la presión al alza sobre los salarios en el segundo semestre".