La Novena de Aguinaldos es una tradición profundamente arraigada en Colombia, que se celebra durante nueve días. El día 9, que corresponde al 24 de diciembre, es especialmente significativo, ya que se dedica a la Santísima Virgen María y culmina con la celebración de la Nochebuena. Este ritual es una preparación espiritual para la Navidad y también un momento de unión familiar y reflexión.
Oraciones y Reflexiones del Día 9
En este último día de la novena, los participantes se reúnen para rezar una oración especial a la Virgen María, pidiendo su intercesión para preparar sus corazones para el nacimiento del Niño Jesús. La oración destaca las virtudes de María y su papel en la historia de la salvación. Se reza con devoción, buscando que su humildad y amor sean un ejemplo a seguir.
Oración para todos los días
Benignísimo Dios de infinita caridad, que tanto amasteis a los hombres, que les disteis en vuestro Hijo la mejor prenda de vuestro amor para que hecho hombre en las entrañas de una Virgen, naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio; yo, en nombre de todos los mortales, os doy infinitas gracias por tan soberano beneficio.
En torno a él os ofrezco la pobreza, humildad y demás virtudes de vuestro hijo humanado; suplicándoos por sus divinos méritos, por las incomodidades con que nació y por las tiernas lágrimas que derramó en su pesebre, que dispongáis nuestros corazones con humildad profunda, con amor encendido, con total desprecio de todo lo terreno, para que Jesús recién nacido tenga en ellos su cuna y more eternamente. Amén. (Se reza tres veces el Gloria al Padre).
Oración a la Santísima Virgen María
"Soberana María que por vuestras grandes virtudes y especialmente por vuestra humildad, merecisteis que todo un Dios os escogiese por madre suya, os suplico que vos misma preparéis y dispongáis mi alma y la de todos los que en este tiempo hicieren esta novena, para el nacimiento espiritual de vuestro adorado hijo. ¡Oh dulcísima madre!, comunicadme algo del profundo recogimiento y divina ternura con que lo aguardasteis vos, para que nos hagáis menos indignos de verle, amarle y adorarle por toda la eternidad. Amén." (Se reza nueve veces el Avemaría).
Oración a San José
¡Oh santísimo José, esposo de María y padre adoptivo de Jesús! Infinitas gracias doy a Dios porque os escogió para tan soberanos misterios y os adornó con todos los dones proporcionados a tan excelente grandeza.
Os ruego, por el amor que tuvisteis al Divino Niño, me abracéis en fervoroso deseos de verle y recibirle sacramentalmente, mientras en su divina esencia le veo y le gozo en el cielo. Amén (Se reza el Padrenuestro, el Avemaría y el Gloria).
Consideración del Día Noveno
La consideración del día 9 de la Novena de Aguinaldos se centra en el momento culminante del viaje de María y José hacia Belén, donde se prepara el nacimiento del Niño Jesús. Este día, celebrado el 24 de diciembre, es de especial importancia, ya que marca la llegada de la Nochebuena.
"La noche ha cerrado del todo en las campiñas de Belén. Desechados por los hombres y viéndose sin abrigo, María y José han salido de la inhospitalaria población y se han refugiado en una gruta que se encontraba al pie de la colina. A su lado, sigue el jumento que ha servido de humilde cabalgadura durante el viaje. En aquella cueva hallaron un manso buey, dejado allí probablemente por alguno de los caminantes que habían ido a buscar hospedaje en la ciudad. En este entorno, la Santísima Virgen María, llena de ternura y amor maternal, se prepara para dar a luz al Salvador. La oscuridad de la noche simboliza tanto las dificultades que enfrentaron como la esperanza que trae consigo el nacimiento del Niño Dios. Este momento nos recuerda la humildad con la que llegó al mundo el Mesías, nacido en un pesebre, rodeado de sencillez y amor. La consideración invita a reflexionar sobre el significado profundo de este acto: el nacimiento del Niño Jesús no solo es un evento histórico, sino también un regalo divino que trae luz y esperanza a la humanidad. Al recordar este pasaje, los fieles son llamados a abrir sus corazones para recibir al Salvador y a vivir con amor y generosidad hacia los demás."
Gozos
Dulce Jesús mío, mi niño adorado, ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
¡Oh sapiencia suma del Dios soberano,
que a infantil alcance te rebajas sacro,
¡oh Divino Niño, ven para enseñarnos
la prudencia que hace verdaderos sabios! ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Adonai potente que a Moisés hablando,
de Israel al pueblo diste los mandatos,
¡ah, ven prontamente para rescatarnos,
y que un niño débil muestre fuerte brazo! ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
¡Oh raíz sagrada de Jesé que en lo alto,
presentas al orbe tu fragante ramo!
Dulcísimo Niño que has sido llamado
Lirio de los valles, Bella Flor del campo. ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Llave de David que abre al desterrado
las cerradas puertas de regio palacio,
¡sácanos, oh Niño, con tu blanca mano
de la cárcel triste que labró el pecado! ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
¡Oh lumbre de oriente, sol de eternos rayos,
que entre las tinieblas tu esplendor veamos!
Niño tan precioso, dicha del cristiano,
luzca la sonrisa de tus dulces labios. ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Espejo sin mancha, santo de los santos,
sin igual imagen del Dios soberano,
borra nuestras culpas, salva al desterrado,
y en forma de Niño da al mísero amparo. ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Rey de las naciones, Emmanuel preclaro,
de Israel anhelo, Pastor del rebaño,
Niño que apacientas con suave cayado,
ya la oveja arisca, ya el cordero manso. ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Ábranse los cielos y llueva de lo alto,
bienhechor rocío como riego santo.
Ven hermoso Niño, ven Dios humanado,
luce hermosa estrella, brota flor del campo. ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Ven que ya María previene sus brazos,
do su Niño vean en tiempo cercano.
Ven que ya José con anhelo sacro,
se dispone a hacerse de tu amor sagrario.¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Del débil auxilio, del doliente amparo,
consuelo del triste, luz del desterrado,
vida de mi vida, mi dueño adorado,
mi constante amigo, mi divino hermano.¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Ve ante mis ojos de ti enamorados,
bese ya tus plantas, bese ya tus manos.
Prostérneme en tierra, con fervor clamando:
¡Ven a nuestras almas, ven no tardes tanto! ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
Oración al Niño Jesús
Acordaos, ¡oh dulcísimo Niño Jesús!, que dijiste a la Venerable Margarita del Santísimo Sacramento, y en persona suya a todos tus devotos, estas palabras tan consoladoras para nuestra pobre humanidad agobiada y doliente: “Todo lo que quieras pedir, pídelo por los méritos de mi infancia y nada te será negado”.
Llenos de confianza en Ti, ¡oh Jesús, que eres la misma verdad!, venimos a exponerte toda nuestra miseria. Ayúdanos a llevar una vida santa, para conseguir una eternidad bienaventurada.
Concédenos, por los méritos de tu encarnación y de tu infancia, la gracia... de la cual necesitamos tanto.
Nos entregamos a Ti, ¡oh Niño omnipotente!, seguros de que no quedará frustrada nuestra esperanza, y de que en virtud de tu divina promesa, acogerás y despacharás favorablemente nuestra súplica. Amén.
¿Cuál es el orden correcto de la Novena?
- Oración inicial.
- Oración para todos los días.
- Consideración diaria.
- Oración a la Virgen María.
- Oración a San José.
- Gozos.
- Oración al Niño Jesús.
- Oración final.