El Primer semestre de 2021 es, sin duda, el periodo de más cambios en el gabinete del presidente Iván Duque en lo que va de su gobierno. De hecho, salvo que ocurra algo extraordinario, se podría decir que faltándole apenas trece meses para deje el poder, será ese el lapso con más modificaciones en la nómina ministerial.
La ‘cirugía’ en su equipo más inmediato de colaboradores comenzó muy temprano este año. El pasado 12 de enero se posesionó Felipe Buitrago como ministro de Cultura, en remplazó de Carmen Vázquez, que fue enviada a la embajada de Uruguay.
Buitrago venía fungiendo como viceministro en esa misma cartera y es considerado como uno de los mayores expertos en materia de economía naranja, uno de los ejes del gobierno Duque. De hecho es muy amigo del Jefe de Estado.
Seis días después, se posesionó Daniel Palacios como ministro del Interior en reemplazo de Alicia Arango, quien presentó su renuncia y fue enviada a la embajada en Ginebra. El nuevo titular de la cartera del Interior venía desempeñándose como viceministro de esa cartera y tiene un claro origen uribista.
Llegó febrero y los cambios en el gabinete no pararon. Diego Molano asumió como ministro de Defensa Nacional, tras el fallecimiento a finales de enero de Carlos Holmes Trujillo, víctima del covid. Molano venía de desempeñarse como Director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República. También es cuota del Centro Democrático.
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Subienda
En marzo la nómina ministerial se mantuvo estable pero llegó mayo y se precipitó un alud de cambios. A comienzos del mes, en medio de la ola de paros en todo el país en protesta por la reforma tributaria, el Gobierno no solo se vio en la obligación de retirar la iniciativa del Parlamento sino que el titular de Hacienda, Alberto Carrasquilla, presentó la renuncia al ser insostenible su permanencia en el cargo.
En una jugada rápida, el Jefe de Estado decidió mover a José Manuel Restrepo del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo a la cartera de Hacienda. Como se sabe, este alto funcionario es considerado de las filas del conservatismo.
Pero no terminó allí la inestabilidad en el gabinete. El 13 de mayo la canciller Claudia Blum, cuya gestión era blanco de polémicas, también anunció su renuncia. Seis días después Duque designó en el cargo a la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, de cuya posible dimisión como segunda a bordo todo el país estaba pendiente, ya que se le agotaba el tiempo para dar un paso al costado y no inhabilitarse de cara a volver a lanzarse a la Presidencia en los comicios de 2022. Al final decidió quedarse en el gobierno hasta el último día, sobre todo en medio de esta difícil coyuntura de pandemia y clima de alta tensión social y crisis de imagen internacional.
Pero los cambios en mayo no terminaron. El día 20 el presidente Duque designó a la abogada María Ximena Lombana Villalba como ministra de Comercio, Industria y Turismo. Esa cartera, como se recuerda, se encontraba sin titular porque Restrepo fue pasado a Hacienda. La nueva alta funcionaria es asociada con Cambio Radical.
Al mismo tiempo, el Jefe de Estado anunció un relevo en la cartera de Cultura, el segundo en el año. Angélica Mayolo entró a reemplazar a Buitrago, que no alcanzó a durar cinco meses en esa cartera.
El Jefe de Estado no solo destacó las calidades personales y profesionales de Mayolo, sino que recalcó que era una de las dirigentes afrodescendientes de más proyección en el país.
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Siguen los ajustes
Llegaría junio y se pensaba que ya el ajuste en el gabinete terminaría, pero no fue así.
En la primera semana Duque designó a Tito José Crissien como ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, en tanto que la saliente Mabel Torres pasó a liderar un nuevo proyecto de inversión social oficial en Chocó. El entrante alto funcionario es considerado cercano a La U.
Pero los cambios tampoco acabaron. A mediados del mes pasado el ministro de Deporte, Ernesto Lucena, anunció su dimisión. Fue el primer titular de la cartera, creada en 2019, y su cercanía al Centro Democrático es conocida.
Solo hasta mediados de esta semana se conoció el nombre de su reemplazo: Guillermo Herrera, un administrador de empresas de la U. del Rosario, con más 20 años de experiencia en ejecución de políticas públicas. Por el momento no se le conoce una clara afinidad partidista.
Así las cosas, solo en tres carteras se mantienen ministros desde el principio de este gobierno: en Educación, María Victoria Ángulo; en Transporte, Ángela María Orozco Gómez; y en Vivienda, Jonathan Malagón González. En el resto se han operado cambios.
De acuerdo a algunos analistas, tras el remezón de este primer semestre no se esperaría que continúen los cambios en la nómina ministerial. De hecho, en altas fuentes políticas se da por seguro que esta será el equipo que acompañará a Duque en el remate de su mandato, al que le quedan ya menos de trece meses.
Otro cambio que se operó recientemente fue en la embajada de Estados Unidos, que si bien no es una cartera ministerial es evidente que se trata del principal cargo diplomático en el exterior. Allí llegará el exministro Juan Carlos Pinzón, en reemplazo del ex vicepresidente Francisco Santos.