
Las intensas lluvias que han azotado a Armenia en las últimas horas desataron una serie de emergencias que dejan a la ciudad en un estado de alerta. Uno de los lugares más afectados es la carretera Armenia-Calarcá, donde el sector La María sufrió el derrumbe de una parte de la banca que se encuentra en ampliación. Esta situación llevó a las autoridades y al contratista del proyecto a restringir el paso únicamente a vehículos de emergencia y transporte público, dejando a muchos conductores frustrados y buscando rutas alternativas.
Pero las lluvias no solo han causado problemas en la infraestructura vial. La situación se ha vuelto aún más preocupante con la desaparición de una menor de edad, quien fue arrastrada por la creciente de una quebrada. Equipos de rescate y organismos de emergencia están trabajando arduamente en la zona para localizarla, lo que añade un sentido de urgencia y preocupación entre los habitantes.
Las alcantarillas rebosaron su capacidad, provocando inundaciones que atraparon vehículos en medio del caos. Los ciudadanos, acostumbrados a las lluvias, se ven sorprendidos por la magnitud de este fenómeno.
En medio de esta adversidad, los habitantes deben mantenerse informados y preparados para cualquier eventualidad. Las autoridades han emitido alertas sobre posibles deslizamientos y crecientes súbitas en las fuentes hídricas del departamento.
Plazo del primer contrato
Las obras en la carretera Armenia-Calarcá continúan, aunque con grandes retos por delante. La construcción de puentes avanza, pero el verdadero desafío radica en la edificación de una escuela que permitirá el empalme de la vía en doble calzada con la actual. El plazo para finalizar esta obra es hasta el 31 de mayo, pero los trámites para obtener la licencia de construcción apenas están comenzando, lo que genera incertidumbre sobre si se podrá cumplir con esta fecha.