Anoche, tras una reunión que sostuvo con el gremio médico y con el ministro de Salud, Fernando Ruiz, la Alcaldesa Mayor modificó los tiempos de las tres cuarentenas rotativas que cubrirían las seis semanas del pico pandémico en Bogotá.

Ya no se trata tanto de disminuir el número de contagios sino la velocidad del mismo. Ante esta nueva prioridad, la Alcaldía decidió mantener la cuarentena rotativa pero intensificándola, trasladando los grupos de localidades entre sí, es la mejor fórmula para lograr este cometido.

Aclarando que en estos momentos no es recomendable aplicar la medida de una cuarentena en la totalidad de la ciudad, que de todas formas se mantiene en alerta naranja y el sistema de salud en unidades cuidados intensivos (UCI) se mantiene en alerta roja, la Alcaldesa comenzó su intervención de ayer diciendo que con esta modalidad de cuarentenas se está avanzando en la dirección correcta.

Dado que su primera evaluación fue satisfactoria, la medida de ciclos de cuarentenas rotativas en la ciudad se mantendrán, pero sus horarios se acortarán, de tal forma que por un periodo de cinco a seis días alrededor de cinco millones de personas no puedan salir a la calle, lo que desacelerará -que en estos momentos es el principal objetivo- la velocidad del contagio.

“Ya pasamos la primera semana del pico. Este no es un día, tampoco es una hora. Es un periodo de tiempo en el cual sistemáticamente los casos suben, la demanda de hospitalización sube y la demanda de cuidados intensivos sube por un periodo de seis semanas hasta que comienza a bajar. Ya pasamos la primera y la pasamos bien. Vamos a lograr que cualquier paciente de Covid-19 o de otra enfermedad que necesite atención médica, hospitalaria o de cuidado intensivo, lo tenga asegurado”, enfatizó la Mandataria Distrital.

Nuevos horarios de cuarentenas

Frente a la meta específica de desacelerar la velocidad del contagio, lo mejor que puede hacer la ciudad de Bogotá es perseverar en una cuarentena por localidades, la Alcaldía Mayor también fue clara en afirmar que se debe reforzar esta medida. ¿Cómo lo harán? Acelerando los tiempos de entrada del segundo y del tercer grupo de localidades.  

En este momento hay ocho localidades en turno que deberán estar terminando su cuarentena el próximo domingo 26 de julio a la medianoche. Con esta pauta, estaba previsto que el segundo grupo de localidades entrará el próximo lunes 27 de julio a su cuarentena. Ya no será así.

“Lo que vamos a hacer es anticipar el cronograma de la cuarentena de los otros dos grupos de localidades y hemos decidido que el segundo grupo de localidades que van a entrar en cuarentena, ya no van a comenzar el lunes 27 sino que van a comenzar este jueves 23 de julio. Vamos a anticiparlas y a trasladarlas para que coincidan en el tiempo por algunos días los dos grupos de cuarentena”, aclaró López.

Eso quiere decir que Bosa, Kennedy, Fontibón, Puente Aranda y Antonio Nariño -que ayer se sumó a este grupo- comenzarán su turno de cuarentena este jueves 23 de julio e irá hasta el próximo jueves 6 de agosto.

“El jueves 23, el viernes 24, el sábado 25 y el domingo 26, todo el sur, todo el centro y todo el suroccidente de la ciudad, estará en cuarentena. 10 localidades de la ciudad, la mitad de la ciudad y casi 5 millones de personas que estarán en cuarentena durante cuatro días seguidos”, aclaró López.

Y con el tercer grupo de localidades se hará lo mismo: se adelantará su fecha de entrada a cuarentena para que coincida por un periodo de 4 a 5 días con el segundo grupo. De esta manera, Suba, Engativá y Barrios Unidos -el grupo se mantiene igual- comenzarán su cuarentena el 31 de julio e irá hasta el viernes 14 de agosto. Eso quiere decir que entre el 31 de julio y el 6 de agosto van a coincidir en el tiempo de cuarentena, por siete días, todo el occidente de Bogotá.

“Esto nos va a permitir terminar más rápido el periodo de cuarentenas. Ya no vamos hasta el 23 de agosto sino hasta el 14. Haremos la cuarentena más corta pero también más intensa, de manera tal que más personas se quedarán en casa para seguir bajando la velocidad del contagio. Ya comenzó a bajar pero necesitamos que baje mucho más: todavía está muy alta”, añadió la Alcaldesa, quien dijo que con esto se aliviará la labor “ya heroica, que están haciendo nuestros médicos y nuestras enfermeras”.

Las UCI ya no son un problema

Asimismo, la Alcaldesa precisó que las UCI ya no son el problema. A este respecto, López le aclaró a EL NUEVO SIGLO que “las UCI están absolutamente chequeadas”. De acuerdo con la Mandataria, el cronograma de crecimiento de unidades y el cronograma de entregas de UCI privadas, aquellas que compró la Secretaría de Salud y las que se han instalado con ventiladores del Gobierno nacional “van bien”.

“Todo el número de ventiladores, de equipos y lo más importante, de personal, de intensivistas y de terapistas respiratorios, va al día. Ya no tenemos preocupaciones en esa materia”, respondió anoche la alcaldesa López a este Medio, quien dijo que ahora la preocupación es bajar la tasa de velocidad del contagio.

Por último, a este respecto la Mandataria Distrital dijo que al personal de la salud se les garantizarán sus condiciones de trabajo, sus elementos de bioseguridad y protección, “y se mejorarán sus condiciones de remuneración, lo que estamos haciendo desde la Secretaría de Salud, pero además con el acuerdo al que hemos llegado con el Ministerio de Salud, para que tengan la compensación adicional que se les prometió. Tendrán mejores condiciones de pago por su trabajo, pero lo que más alivia su carga es nuestro cuidado”, finalizó diciendo la Alcaldesa.