La posibilidad de que el gobierno entrante de Gustavo Petro avance en un proceso de paz con la guerrilla del Eln es cada vez más cercana.

Ya el alto comisionado de Paz designado, Danilo Rueda, indicó días atrás que “el 7 de agosto el mandatario le hablará al país sobre su propuesta de un eventual diálogo con el Eln. Todo ha sido, insisto, acercamientos, acercamientos. Los acercamientos que son posibles dentro de la legalidad”, informó.

El mensaje lo dejó claro porque Petro y su administración, legalmente, no pueden por ahora tomar ningún tipo de decisión.

A ello se suma que ese grupo guerrillero se ha manifestado a favor de retomar los diálogos en la misma instancia en donde quedaron en agosto de 2018, al término del gobierno Santos. Por lo menos así lo indicó el máximo comandante del Eln, Antonio García, quien sostuvo que se deberían retomar mediante un "empalme" las negociaciones de paz donde se dejaron con el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos.

"Muy seguramente tendremos que contextualizar lo que en ese momento se acordó, pues también hay que hacer una especie de empalme. ¿El nuevo Gobierno tiene con quién hacer ese empalme? Entendemos que el gobierno de Duque fue muy reacio a recibirle a su predecesor", planteó García a través de un mensaje publicado en su cuenta en Twitter.

Conversaciones

En cualquier caso, García ha destacado que es "importante" que haya "expectativas por la paz en Colombia". "Tanto el nuevo Gobierno como el Eln hemos expresado voluntad y el mutuo interés para reanudar las conversaciones", apuntó el guerrillero en referencia a la toma de posesión el próximo domingo del nuevo presidente colombiano, Gustavo Petro.

Además, García ha apostado por "disminuir el uso del micrófono y trabajar más por reanudar las conversaciones en una mesa, cosa que no podrá hacerse hasta que el nuevo Gobierno no esté en funciones".

García también publicó un mensaje en el que aseguró que "por supuesto que es real nuestra voluntad de paz". "No fuimos nosotros quienes suspendimos las conversaciones. Luego de perder cuatro años tenemos que reanudar. Es una deuda de (Iván) Duque con la historia", planteó en referencia al Presidente.

Como se sabe, el proceso de paz no fue continuado por Iván Duque, quien el mismo día de su posesión, el 7 de agosto de 2018, anunció que la mesa de negociación se suspendía por tres meses y que en “los primeros 30 días de nuestro Gobierno vamos a realizar una evaluación responsable, prudente y completa del proceso de conversaciones que durante 17 meses se ha adelantado con el Eln”, afirmó.

Asimismo, agregó que “un proceso creíble debe cimentarse en el cese total de acciones criminales. Queremos avanzar, pero el pueblo colombiano no tolerará que la violencia sea legitimada como medio de presión al Estado”, subrayó.

Sin embargo, el proceso no se reanudó ese semestre y se rompió definitivamente el 15 de enero de 2019, cuando ese grupo guerrillero perpetró un atentado contra la Escuela Superior de Cadetes, en Bogotá, asesinando a 20 uniformados y civiles.

Desde entonces, a lo largo del mandato del presidente saliente, nunca hubo un acercamiento de paz entre el Gobierno y esa guerrilla. Por el contrario, el Estado colombiano pidió en extradición a los integrantes de la mesa de negociación que permanecían en La Habana y redobló operativos contra esa facción insurgente en nuestro país. Todo ello a la par de aumentar las denuncias contra el régimen dictatorial de Nicolás Maduro por proteger a la cúpula del Eln y a más de dos mil subversivos en su territorio.

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¿Dónde iba la mesa?

Como ‘García’ dijo que quiere retomar la negociación en la misma instancia en que quedó en agosto de 2018, EL NUEVO SIGLO investigó en qué avanzaba entonces la negociación.

El saliente presidente Juan Manuel Santos dijo el 2 de agosto que “al término del sexto ciclo de conversaciones entre el Gobierno y el grupo guerrillero, en La Habana, quedará en manos del nuevo gobierno, a partir de la próxima semana, la decisión sobre los diálogos con el Eln.

Asimismo, Santos celebró el avance logrado en los diálogos entre el Gobierno y el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y dijo que quedan sentadas las bases para un cese del fuego y la continuación del proceso.

De igual forma explicó que pese a los esfuerzos, no se llegó al cese del fuego, ya que se requiere verificación y sería contraproducente adoptar una decisión a pocos días de comenzar la próxima administración.

“Nunca habíamos llegado tan lejos”, expresó el Mandatario y precisó que se elaborara un informe para que el nuevo gobierno decidiera la continuación de las conversaciones.

Finalmente, Santos confió en que el gobierno que comienza el 7 de agosto continúe estas gestiones y dijo que para el cese el fuego solo falta un 10% de las tareas necesarias.

Un día antes, la mesa había cerrado el quinto ciclo de negociación, en el que acordaron temas principales como un nuevo cese el fuego bilateral, temporal y nacional, y el diseño del proceso de participación de la sociedad en la construcción de la paz. En ambos temas lograron un acumulado que constituye un valioso activo de la mesa y del país, pues a él han contribuido diversas organizaciones sociales de las diferentes regiones.

El exministro Ríos

EL NUEVO SIGLO habló con el exministro José Noé Ríos, quien hacía parte de la delegación gubernamental que dirigía el exministro y ex vicepresidente Gustavo Bell.

Ríos puntualizó que lo correcto en términos de negociación es que el gobierno Duque hubiera convocado el sexto ciclo muy rápidamente y no lo hizo. “Quedó todo dispuesto para la convocatoria del sexto ciclo de negociaciones, a lo que muchas personas pensaron que había quedado cerrado, y no, la negociación estaba abierta, había quedado sobre la mesa la prórroga o la continuidad del cese el fuego bilateral, se habían hecho importantes avances en esa materia, pero el tema no alcanzó a cerrarse”, explicó el exministro.

El exdelegado trajo a colación la participación de la sociedad civil, donde se habían analizado los resultados de las audiencias que se hicieron en Tocancipá y había una propuesta sobre la mesa que esbozaba el desarrollo de las formas de participación de la sociedad civil.

Lo anterior se refiere a que ese punto era fundamental para abordar el VI ciclo de negociaciones que nunca fue convocado por el presidente Duque. “Había una plena disposición para ahondar en el caso de las acciones humanitarias y todo quedó en una mesa abierta, congelada totalmente”, manifestó el exministro.

Con respecto a la propuesta del cese el fuego, Ríos explicó que “se tenía un sistema especial de monitoreo y partía de la base de que se suspendían todas las acciones ofensivas, todos los elementos propios de la actividad del Eln”.

Al referirse al tema de retomar el proceso de paz donde se dejó en el año 2018, expresó que “hay posibilidades de que hoy avance, yo pertenezco a la línea de los optimistas, pero creo que una vez esté la voluntad del presidente Gustavo Petro, imagino que hará anuncios el 7 de agosto sobre este tema”.

El exministro finalizó diciendo que “lo pertinente sería sentarse a revisar los términos y condiciones para la reanudación del proceso y qué decisiones se tomarán para que se vuelvan a sentar a la mesa. Es necesario hacer una evaluación de estos cuatro años ya que las dinámicas son muy importantes; en cuatro años hay muchos cambios en las perfecciones, en la forma de pensar, de actuar en el desarrollo institucional, por eso lo conveniente es analizar la situación a las realidades de hoy”.