Aunque la deuda externa de Colombia se incrementó 7,2% en septiembre de este año y llegó a US$165.561 millones, que representa el 52,5% del Producto Interno Bruto (PIB), con un aumento de US$11.053 millones (7,2%) respecto a diciembre de 2020, esta situación tiene su explicación ante la emergencia sanitaria.
En efecto, el país ha tenido que hacer un esfuerzo adicional para poder suministrar la atención de empresas y población vulnerable ante el impacto de la pandemia. Señala el Banco de la República que el 86% del saldo total de la deuda corresponde a créditos con vencimiento original mayor a un año y el 14% a créditos con vencimiento igual o menor a un año.
Por tipo de instrumento, el saldo de la deuda externa corresponde principalmente a préstamos y a títulos de deuda. El mayor saldo de septiembre de 2021 con respecto a diciembre de 2020 (US$11.053 millones), se explica principalmente por la mayor deuda de largo plazo (US$10.094 millones, 7,6%) contratada especialmente por entidades del sector público.
A su vez, las obligaciones de corto plazo aumentaron US$959 millones (4,4%). Por sectores, el saldo de la deuda externa pública representa el 60% del total y la del sector privado el 40%.
Señala el Emisor en su reporte que del total de la deuda externa, el 15% corresponde a préstamos entre empresas con relación de inversión directa.
Sector público
A septiembre de 2021, el saldo de la deuda externa del sector público alcanzó un monto de US$98.563 millones (31,2% del PIB), mayor en US$8.863 millones (9,9%) respecto a diciembre de 2020. El aumento del saldo en lo corrido del año a septiembre fue explicado principalmente por la mayor deuda de largo plazo, US$8.809 millones (9,9%).
Del saldo de la deuda contratada a largo plazo, el 69% está en cabeza del gobierno central, seguido por las entidades descentralizadas nacionales que responden por el 21% y el restante 10% corresponde a obligaciones de otros deudores.
Por prestamistas, el 50% de esta deuda corresponde a títulos de deuda emitidos en los mercados internacionales, el 36% a deuda contratada con la banca multilateral y el restante 14% se origina en créditos con entidades bilaterales y a otras instituciones financieras.
De otro lado, explica el Banco de la República que el aumento del saldo de la deuda de largo plazo, US$8.809 millones, se explica principalmente por: i) la mayor deuda por concepto de obligaciones con organismos internacionales, US$3.284 millones, ii) mayores préstamos con la banca comercial, US$3.317 millones, y iii) mayor deuda por concepto de bonos, US$2,282 millones.
Respecto a diciembre del año anterior, las entidades no bancarias aumentaron sus obligaciones externas en US$6.308 millones (7,4%), mientras que las entidades bancarias (incluye pasivos por asignaciones de Derechos Especiales de Giro por parte del Fondo Monetario Internacional al Banco de la República) las aumentaron en US$2.501 millones (77,5%)
Indica el informe oficial que, a septiembre de 2021, el servicio de la deuda ascendió a US$6.103 millones, mayor en US$1.004 millones respecto al mismo periodo de 2020. Del monto del servicio, US$3.240 millones (54%) fueron por amortizaciones y US$2.773 millones (46%) por intereses.
Durante los tres primeros trimestres de 2021, la tasa de interés promedio de las nuevas contrataciones de deuda se estimó en 2,4%, menor en 1,2 puntos porcentuales a la tasa contratada en el mismo periodo de 2020.
Sector privado
Por otro lado, y al cierre de septiembre de 2021, el saldo de la deuda externa del sector privado fue de US$66.999 millones (21,2% del PIB). De este monto, el 79,9% correspondió a obligaciones del sector no bancario y el restante 20,1% a deudas adquiridas por instituciones bancarias.
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Con relación al saldo de la deuda del sector no bancario, los préstamos con entidades del exterior representaron el 78,6%, los créditos de leasing financiero el 9,7%, las obligaciones por concepto de crédito de proveedor el 7,8%, el 3,9% restante corresponde a bonos y pasivos de seguros.
En cuanto al sector bancario, a septiembre de 2021, las obligaciones por concepto de préstamos representaron el 42,4% de la deuda externa, el 54,0% correspondió a bonos adquiridos por inversionistas extranjeros y el restante 3,5% a depósitos de no residentes.
Asimismo, el sector privado no bancario incrementó sus obligaciones externas en US$2.323 millones (4,5%) frente a lo registrado en diciembre de 2020. Este aumento lo explica, principalmente, los desembolsos netos por concepto de préstamos de largo plazo, compensado parcialmente por el vencimiento de bonos.
Por su parte, el saldo del sector privado bancario se redujo en US$134 millones (- 1,0%) frente al observado a diciembre de 2020. Este resultado se debe al pago de préstamos de largo plazo, compensado parcialmente por la emisión de bonos.
Señala el análisis del banco central que, de enero a septiembre de 2021, los desembolsos informados fueron adquiridos en su orden por el sector de auxiliares financieros (26%), empresas manufactureras (14%), transporte y comunicaciones (14%), y por el sector minero (13%). El resto de las actividades (en el que sobresale comercio) responden por cerca de la tercera parte.
El costo de las nuevas contrataciones de deuda externa en el tercer trimestre de 2021 se estima en 4% (excluyendo préstamos a plazos menores a un mes que presentan alta rotación), mayor en 0,1 puntos porcentuales (pp) a la tasa del trimestre inmediatamente anterior y menor en 0,7 (pp) al registrado en igual período de 2020.
Por concepto de préstamos de largo plazo adquiridos en el tercer trimestre de 2021, el plazo promedio (ponderado por monto) fue cercano a 7 años. El plazo del endeudamiento de corto plazo (excluyendo plazos menores a un mes) fue cercano a 7,4 meses.
En 2020 llegó al 55,4% del PIB
La deuda externa de Colombia terminó el año 2020 en niveles de US$154 mil millones, es decir, 55,4% del PIB.
Supera el saldo presentado a diciembre de 2019, cuando sumó US$138 mil millones y representaba el 42,9% del producto bruto nacional.
El aumento es todavía más fuerte si se compara con el cierre del año 2018, cuando el país tenía una deuda externa pública y privada que equivalía al 39,7%.
Tanto el Gobierno de Colombia como las empresas privadas han tenido que aumentar su endeudamiento para responder a un reto inesperado: la pandemia de covid-19.
En el Plan Financiero, el Ministerio de Hacienda estimó que la deuda del Gobierno Nacional Central (GNC) cerró el 2020 en niveles de 64,8% del PIB y que solo se ubicará por debajo del 60% en el año 2030.
De hecho, ese Plan Financiero dijo que, a mediano plazo, el Gobierno nacional considera que es necesario que el endeudamiento público se reduzca de tal forma que converja a niveles prudenciales, que permitan contar con un margen de maniobra suficiente para absorber futuros choques adversos.
Señala que, si bien los niveles de endeudamiento público actuales no comprometen en sí mismos la sostenibilidad fiscal, estos se encuentran relativamente próximos a los niveles en los que se estima que se puede empezar a comprometer la solvencia del Estado.
De acuerdo con estimaciones realizadas por el Ministerio de Hacienda, para niveles de deuda bruta del GNC superiores de 70% del PIB, empieza a aumentar de forma sustancial la probabilidad de que la deuda pública entre en una senda explosiva, que se materializa cuando el costo que genera el endeudamiento público supere la capacidad de pago del Gobierno.