En desarrollo de las actividades de prevención y acción contra el delito, uniformados de la Policía Metropolitana de Bogotá incautaron más de 3.600 botellas de licor adulterado en la localidad de Los Mártires, evitando su comercialización y afectación a la salud de los habitantes de la capital del país.
En tal sentido, se conoció que un ciudadano alertó sobre la existencia de varias botellas de dudosa procedencia en un inmueble, razón por la que integrantes del Grupo de Reacción de la Fuerza Disponible y de la Estación de Policía Los Mártires llegaron al lugar con el propósito de verificar la información.
En efecto, se encontraron más de 3.600 envases de licor adulterado, estampillas, tapas, cajas y empaques de ron, whisky, aguardiente y vino. De esa manera se procedió a efectuar la respectiva incautación para la disposición final de todos los elementos.
De acuerdo con los cálculos preliminares, el licor incautado tendría un valor aproximado de 450 millones de pesos. Las investigaciones continúan con la misión de ubicar y capturar a los responsables de esta mercancía.
La Policía Nacional reitera a los habitantes de Bogotá la importancia de adquirir este tipo de productos en establecimientos reconocidos, para evitar tragedias en esta época de fiestas navideñas.
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En el marco de los recientes hechos, el Distrito reforzó los operativos de inspección, vigilancia y control a establecimientos comerciales, para ubicar este tipo de mercancías y evitar tragedias en la temporada de Navidad y fin de año.
El Distrito reitera que las personas que comercialicen, distribuyan, imiten o simulen bebidas alcohólicas, podrían incurrir en una sanción de cinco a 11 años de prisión, una multa de 1.500 salarios mínimos y el cierre definitivo del establecimiento comercial.
Además, podrían estar inmersos en los delitos de corrupción de alimentos, productos médicos o material profiláctico, además de imitación o simulación de alimentos, productos y/o sustancias. De esta manera, la Secretaría de Salud hace un llamado a los dueños y encargados de establecimientos comerciales a abstenerse de comprar o vender bebidas adulteradas que no cumplan con la norma sanitaria, debido a que están siendo cómplices en delitos que atentan contra la salud pública.
La Administración Distrital reitera su llamado a la ciudadanía para que informe a la Línea 123 sobre cualquier lugar donde se identifique la venta o manipulación de este tipo de bebidas fraudulentas.