El gobierno del presidente Gustavo Petro ya tiene una decisión para adquirir la nueva flota de aviones de combate para reemplazar a los cazas Kfir, cuya vida útil comenzó a expirar en diciembre de 2023, tras haber sido fundamentales en la defensa de la soberanía nacional.

Fuentes de las agencias de seguridad del Estado revelaron a EL NUEVO SIGLO que el Ejecutivo se inclinó por el caza Gripen, aeronave interoperable y multirrol, por su gran desempeño en combate aire-aire y aire-tierra, además de cumplir a cabalidad procesos de inteligencia, vigilancia y reconocimiento.

Explican que el Gripen se destaca por su gran desempeño en combate, además de su eficiencia, su baja huella logística y porque puede operar sin ninguna dificultad en todas las bases de la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC) en el territorio nacional.

Como se sabe, la FAC desde hace 15 años inició los trabajos, estudios y análisis para reemplazar a los Kfir, aviones de combate de alto rendimiento, porque su vida útil de cincuenta años de servicio al país estaba llegando a la obsolescencia.

Se estudiaron cuatro propuestas, que cumplían las expectativas de la FAC en materia de misiones de defensa aérea, reconocimiento, inteligencia y ataques aire-aire y aire-tierra, entre otras especificaciones de soberanía nacional.

El expresidente Iván Duque fue duramente cuestionado en el 2021 por el mismo Petro, en aquel momento candidato a la presidencia de Colombia, al señalar que era irresponsable adquirir aviones de combate de alto costo en medio de los graves rezagos económicos que dejó a Colombia la pandemia del covid-19. También otros sectores políticos y sociales criticaron al mandatario.

El entonces jefe de Estado insistió en la necesidad de reemplazar a la flota Kfir debido a la vejez de las aeronaves y porque debían salir de circulación en diciembre de 2023. Además, dijo, el mantenimiento de cada uno de los cazas es muy costoso y en todo momento se debe fortalecer la soberanía nacional.

Previo al anuncio sobre la adquisición de la nueva flota aérea, hubo diálogos acerca de una propuesta de Estados Unidos de entregar a Colombia unos aviones F-16 Block 50 con unas condiciones, entre ellas modernizarlos con equipos electrónicos de última generación y material de guerra. Pero, con el tiempo esas conversaciones se congelaron. Las fuentes consultadas dijeron que no se volvió a tocar el tema de los F-16 entre las fuerzas aéreas de los dos países.

EL NUEVO SIGLO también conoció que la empresa de defensa y aviación sueca Saab, fabricante del Gripen, le ofreció a Colombia un período de ocho años muertos y/o de gracia para iniciar los pagos de las aeronaves de combate y otras prerrogativas en materia de instrucción de pilotos, mantenimientos, transferencia de tecnologías y otros procesos que le convienen al país, y que por esta razón el Gobierno Nacional acogió esta propuesta.

El analista en políticas de seguridad y defensa y presidente del Instituto Popular de Capacitación (IPC), Carlos Andrés Zapata Cardona, afirmó en este diario que “sí o sí se debe cambiar la flota de los aviones Kfir, por cuanto hoy es obsoleta y además ya no hay forma de conseguir repuestos, porque el fabricante de esos cazas ya no los emplea y además porque ya están fuera del mercado. Me refiero a Israel”.

Además, explicó que “las relaciones diplomáticas con Israel están suspendidas y ni siquiera se cuenta con repuestos viejos para poder reparar los cazas. Desde la administración Duque se sabía de esta situación y el gobierno Petro tendría que abrir el proceso de contratación más grande de Colombia. No se habían reemplazado esas aeronaves por el gasto enorme que significa para las arcas de la nación”.

Zapata confirma que “ya se llegó a un punto en el que se está comprometiendo la seguridad nacional. En este momento hay dos opciones para comprar: el F-16, que es de fabricación americana, y el Gripen, que es de fabricación sueca”.

“El reemplazo de la flota actual es necesaria para mantener la superioridad aérea en las políticas de seguridad y defensa nacional y cumplir con los fines del Estado. La FAC debe en todo momento ejercer el dominio en el aire, el espacio y el ciberespacio, con capacidades disuasivas reales, permanentes y sostenibles”, insisten las fuentes consultadas.

También dijeron que luego de los anuncios que hizo el presidente Gustavo Petro durante la ceremonia conmemorativa del centésimo quinto aniversario de la FAC, en el Comando Aéreo de Mantenimiento (Caman), en Madrid, Cundinamarca, se espera que se produzca en próximos días el anuncio oficial sobre la adquisición de los aviones de combate que reemplazarán a los Kfir.

“Quiero, sí, anunciar que esos nuevos aviones de la Flota Estratégica de Colombia, de la Fuerza Aeroespacial de Colombia, no van a causar un impacto fiscal para este año, ni para el año entrante, ni para el que sigue. Mirando lo que los economistas llaman el plan financiero de mediano plazo, hemos empezado a lograr negociaciones que permiten suficientes años de gracia para que no impacte en nuestra actual crisis fiscal presupuestal”, dijo Petro Urrego.

Según le revelan desde la agencia de seguridad del Estado a este periódico, los respectivos gobiernos trabajan en los acuerdos de compensación offset por la compra de las aeronaves.

El caza Gripen

El consultor del IPC señala que “el caza Gripen utiliza motores de la empresa Saab que son bastante confiables. Pero hay un asunto particular con Suecia, que ingresó a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) desde hace dos años. Y a partir de las guerras actuales, entre ellas Rusia-Ucrania, estas potencias que producen armamento se están lucrando, porque ha subido la compra de armamento estratégico”.

Zapata insistió en que “Noruega y Suecia, países escandinavos que ingresaron a la OTAN, cuentan con un flujo de caja que les permite dar créditos a largo plazo. En el caso de la propuesta de Suecia, sencillamente beneficia a Colombia, que en estos momentos no tiene recursos, porque está pagando la deuda del covid-19, que es de más de 11 mil millones de dólares”.

“Colombia no tiene dinero, pero sí tiene la urgente necesidad de renovar la flota de los aviones caza para la seguridad nacional. Entonces lo que se hace con Suecia es un pacto de un pago a largo plazo, fácilmente conveniente para nuestras finanzas. Es decir, es una oportunidad que están ofreciendo los suecos para poder adquirir la flota que reemplace a los viejos Kfir”, acotó.

Asimismo, puntualizó que “en Suecia está gobernando la derecha, lo que es nuevo para este país, que siempre estuvo bajo la administración de los socialdemócratas. En estos momentos el caza Gripen se ha vendido tanto en estas situaciones de guerra como en otros mercados internacionales y puede darse el lujo de esperar ocho años para empezar a cobrar esa deuda”.

Aseguró que “esta oferta implica que el gobierno Petro Urrego no tendría que hacer ese gasto financiero y tampoco la próxima administración, porque el pago se pactaría a futuro. Claro que tendría que hacer algunos gastos mínimos, obviamente, como una cuota inicial, los pagos de traslado y otros detalles, pero no es el pago completo. Es una inversión necesaria para la seguridad nacional”.

Este panorama permite que durante los dos próximos gobiernos no habrá cargos fiscales por esta compra, puesto que la nueva administración en Suecia se está centrando en fortalecer su economía, apuntando especialmente a un periodo de largo plazo a partir de su fuerte industria militar.

Asimismo, Zapata expresó que “Suecia, además de que habla de paz en el mundo, cuenta con una de las industrias militares más desarrolladas a nivel mundial. Los motores Saab son los de mayor rendimiento en el mercado. Y los aviones Gripen son cazabombarderos, no son bombarderos como el B-52. Son aeronaves de alto rendimiento en materia de defensa, se emplean para eliminar objetivos de alto valor estratégico. Pero bombardear una ciudad con esas aeronaves no es posible, como hacen los israelíes en este momento”.

Zapata Cardona en su diálogo finalmente señaló que el caza Gripen recoge el diseño de sus antecesores, que fueron fabricados para proteger a Suecia frente a la guerra fría y las tensiones en el mar Báltico. También ofrece un formidable desempeño en combate, además de su costo, eficiencia y su baja huella logística.

Insiste en que “el caza sueco cuenta con una facilidad en el mantenimiento y el tiempo de alistamiento para su operación es corto, su rearme y reabastecimiento de combustible se puede ejecutar muy rápido, es decir, en un lapso menor a los 20 minutos”.

Agrega Zapata Cardona que “el Gripen es apto, de acuerdo con la fábrica, para operaciones dispersas de alto impacto y goza de bajos procesos de mantenimiento por hora de vuelo, es decir, pasa menos tiempo en los hangares y más tiempo en operaciones aéreas de reconocimiento, vigilancia, inteligencia y de seguridad nacional”.  

<DESTACADO> "Colombia no tiene dinero, pero sí tiene la urgente necesidad de renovar la flota de los aviones caza para la seguridad nacional"