Con el hecho cierto que por primera vez en Colombia hay una importante cantidad de recursos para invertir en ciencia, tecnología e innovación, pero con la necesidad de hacer algunos ajustes en el esquema para que éstos fluyan con menos trabas con destino a financiar los respectivos proyectos, se cumple un año de que estas actividades en el país se financien en su mayor parte con recursos de regalías.
El año anterior fueron financiados 80 proyectos a nivel nacional por un valor de $398.754 millones, en tanto que hasta julio de este año han sido aprobados $168.298 millones de recursos del Fondo de Ciencia, Tecnología e Innovación con el objeto de incrementar la capacidad científica, tecnológica, de innovación y de competitividad de las regiones, mediante proyectos que contribuyan a la producción, uso, integración y apropiación del conocimiento en el aparato productivo y en la sociedad en general, incluidos proyectos relacionados con biotecnología y tecnologías de la información y las comunicaciones, contribuyendo al progreso social, al dinamismo económico, al crecimiento sostenible y una mayor prosperidad para toda la población.
El Fondo de Ciencia, Tecnología e Innovación es uno de los cinco fondos establecidos por la reforma al Sistema de Regalías, el cual recibe 10% de los recursos provenientes de las regalías petroleras y extracción de minerales. Los otros son el Fondo de Ahorro y Estabilización (FAE), con el 20%; el Fondo de Desarrollo Regional, con el 16% de los recursos; el Fondo de Compensación Regional, con el 60%; además de otros beneficiarios y conceptos que se alimentan con estos dineros, como son el Ahorro Pensional de las Entidades Territoriales, con el 10%.
En diciembre pasado, el Congreso de la República aprobó el presupuesto de regalías para el bienio 2013-2014 por $17,7 billones. En ese sentido al Fondo de Ciencia, Tecnología e Innovación le corresponderán este año $864 mil millones, mientras que para el año entrante hay destinados un total de $811 mil millones.
La reforma al sistema de regalías ha sido hasta el momento una de las iniciativas más audaces de la administración Santos Calderón, aunque por lo mismo una de las más polémicas, pues significó una disminución para los departamentos y municipios productores, de millonarios recursos que recibían a manos llenas, mientras que otras regiones empezaron a verse beneficiadas por primera vez con estos dineros.
El presidente Santos consideró inequitativo que estos millonarios recursos, cercanos a los $9 billones de pesos anuales, se concentraran en unas pocas regiones productoras, mientras que el resto se veían privadas de beneficiarse a pesar de que tenían las mismas o incluso más necesidades.
Además, otro de los argumentos del Gobierno nacional para esta reforma del sistema, por medio del Acto Legislativo 05 de 2011, era la alta corrupción que se presentaba en las regiones con el manejo de estos dineros, cuando no se dilapidaron en proyectos mal fundamentados que terminaron convertidos en elefantes blancos en educación, salud y saneamiento básico, los sectores que por ley se podía invertir.
Para la administración Santos era claro que Colombia debía invertir más en ciencia, tecnología e innovación si es que quiere avanzar en su desarrollo e insertarse de forma competitiva en el concierto mundial.
Hasta el año 2011 la inversión que hacía el país en ciencia, tecnología e innovación era apenas del 0,2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que para la época otros países de la región destinaban mayores rubros para estos sectores, como era el caso de Argentina, con el 0,5 por ciento; Chile con el 0,7 por ciento; Brasil con el 0,8 por ciento; aunque todos muy lejos de Corea del Sur, que invertía el 3,2 por ciento en 2011.
“Al sumar los recursos de Colciencias (370 mil millones anuales) y las regalías de ciencia, tecnología e innovación (867 mil millones anuales), el país cuenta hoy con 3,2 veces más recursos públicos para esta actividad, frente a los tradicionalmente asignados”, señaló en junio pasado el saliente director de Colciencias, Carlos Zárate, quien le dio paso a la actual directora, Paula Marcela Arias, para que el presidente Santos pudiera cumplir con la Ley de Cuotas, que exige la presencia de un 30% de mujeres en cargos de dirección, cambios que también tuvieron lugar en varias superintendencias.
Sujeto a cambios
La Ley 1530 de 2012, reglamentaria del Acto Legislativo 05 de 2011, determinó la distribución, administración, ejecución, control y uso eficiente de los ingresos provenientes de la explotación de los recursos naturales no renovables precisando las condiciones de participación de sus beneficiarios.
En ese sentido además de los fondos de inversión, la Ley 1530 dio vida a los Órganos Colegiados de Administración y Decisión (OCAD), responsables de definir los proyectos de inversión sometidos a su consideración que se financiarán con recursos del Sistema General de Regalías, así como evaluar, viabilizar, aprobar y priorizar la conveniencia y oportunidad de financiarlos.
Estos OCAD están conformados por los tres niveles de gobierno (nacional, departamental y municipal, los cuales tienen voz y voto. Un proyecto requiere 2 de 3 votos para ser aprobado en estos órganos.
Sin embargo para el caso de los OCAD de Ciencia, Tecnología e Innovación, están integrados por el Gobierno nacional, el gobierno departamental y las universidades, representados porseis rectores de universidades, seis gobernadores y cinco funcionarios del Gobierno central (Ministerio de Educación, Ministerio de Tecnología de la Información y las Comunicaciones, Ministerio de Agricultura, Departamento Nacional de Planeación y Colciencias).
El esquema ofrece la oportunidad a los departamentos, municipios, entidades territoriales indígenas y afrocolombianos de presentar proyectos de alcance regional.
Igualmente, las universidades, centros de investigación, sector privado pueden participar por medio de los Pecti, Planes Estratégicos Regionales de Ciencia; en los Codecti, que son los consejos departamentales de ciencia, tecnología e innovación, con proyectos en investigación y desarrollo (I+D), formación de capital humano, servicios científicos y tecnológicos, transferencia tecnológica, propiedad intelectual, infraestructura y actividades de innovación productiva y social.
De ahí los proyectos pasan a las secretarías de planeación departamentales, las cuales les dan traslado a Colciencias si es que la iniciativa de ciencia, tecnología o innovación se ajusta a los planes de desarrollo económico y social de la región. Finalmente esta última, como Secretaría Técnica del OCAD, le corresponde verificar que los proyectos cumplan los requisitos y criterios establecidos para el acceso a estos recursos, luego de lo cual lo presenta ante el OCAD, el cual lo aprueba o desaprueba.
Este sistema para algunos ha resultado un poco engorroso, por lo que el sector privado y centros de investigación aún no se animan en muchos casos a participar con sus ideas e iniciativas.
De cualquier forma, los resultados en la investigación científica no son de un día para otro, se requieren pruebas y contrapruebas para establecer si un procedimiento es exitoso o termina siendo un fracaso, más teniendo en cuenta que se busca que tenga impacto regional, según lo prevé este Fondo del Sistema de Regalías. Es por ello que por lo general, los proyectos que se han presentado son para desarrollarse entre 3 y 4 años.
En ese punto cabe pensar que de igual forma, el esquema de distribución de recursos para ciencia, tecnología e innovación así como los organismos creados para tal fin son susceptibles de ser modificados en el tiempo.
Investigadores
Sobre el particular, la doctora María Mercedes Zambrano, directora científica de Corpogen, Ciencia y Tecnología, le dijo a EL NUEVO SIGLO que “creo que para uno como centro de investigación pequeño es muy difícil acceder a esos recursos, pienso que hay mucha política involucrada porque las platas se destinan es a los centros administrados por las entidades públicas, me parece, y con ese método es muy difícil para nosotros poder acceder a los recursos".
Añadió que “para poder participar toca primero aprender a hacerlo vía las entidades gubernamentales o las alcaldías, que son las que van a definir los proyectos que se van a escoger para cada departamento. Nosotros no tenemos la suficiente capacidad de gestión para hacer eso”. Por lo que, explicó, les toca buscar alianzas con entidades más grandes como universidades, “que tienen la capacidad de ir a buscar esos recursos y convencer a los gobernadores de turno y a los alcaldes que un tipo de investigación vale la pena”.
Finalmente, la doctora Zambrano consideró que la cantidad de recursos que hay ahora debería partir en dos la historia de la ciencia y la tecnología en Colombia, “pero la manera como se están manejando esos recursos realmente no da pie para que haya grandes avances en ciencia y tecnología”.
Antioquia
Uno de los departamentos que se ha mostrado más inquieto hasta el momento con el nuevo panorama que se abre para la ciencia en el país por los recursos de regalías es Antioquia. Precisamente el plan de desarrollo del gobernador Sergio Fajardo se denomina ‘Antioquia, la Más Educada’. Fajardo hizo parte del OCAD respectivo en representación de varios gobernadores del país, entre ellos los del Eje Cafetero.
El año anterior este departamento presentó 13 proyectos por un valor de $103 mil millones en las áreas de agroindustria, salud, educación, infraestructura, con una activa participación de las universidades.
“Es un sistema nuevo que se está estructurando, que siempre hay algunas dificultades” señaló a este Diario el director de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Gobernación de Antioquia, Alejandro Olaya Ávila. Sin embargo anotó que en “términos generales es lo mejor que le ha pasado a la ciencia en toda su historia en Colombia porque hay recursos, antes no había dinero. Me parece que como es un sistema nuevo requiere procedimientos pero eso es manejable, se puede aprender y los departamentos lo han venido aprendiendo. Todavía se pueden ajustar cositas en cuanto a herramientas, comunicaciones, una plataforma para manejar esa información con Colciencias, pero ya son elementos accesorios. El fondo de la reforma es positivo”.
Proyectos aprobados recientemente
El OCAD para Ciencia, Tecnología e Innovación aprobó en julio pasado 67 proyectos presentados por 25 departamentos y Bogotá D.C., por $704.851 millones, de los cuales $588.122 millones provienen del Fondo de Regalías.
. Programas de Ciencia, Tecnología e Innovación en Educación y Formación de alto nivel (48,65%)
. Agropecuarias (31,2%)
. Biodiversidad y Hábitat (6,6%)
. Programas de Salud, Centros y Parques de Investigación, Mar y Recursos Hidrobiológicos, Energía y Minería, Innovación Industrial y Biotecnología (13,6%).