Bogotá se convirtió en la sede del Smart City Expo World, lo que evidencia los avances que tiene la capital en este tema. Dentro de los factores que dieron sentido a su elección se encuentran su visión integral para el desarrollo de una ciudad sostenible, las soluciones que está implementando y la oportunidad de desarrollar una plataforma que reúne colaboraciones público-privadas.
La tecnología se está convirtiendo en un facilitador para los gobiernos de cara a los ciudadanos, de ahí que diferentes servicios se están digitalizando y varios procesos optimizando. Aspectos clave de la ciudadanía como la movilidad, seguridad, eficiencia energética y la participación ciudadana se encuentran adaptándose a innovaciones. Entonces ¿cómo una ciudad inteligente puede cambiar la realidad de los capitalinos? La solución más eficiente a este cuestionamiento es utilizar la tecnología para el beneficio ciudadano de forma sostenible y eficiente, a través de energías renovables, la implementación de IoT, inteligencia artificial y reducir el consumo de recursos.
Actualmente los ciudadanos no solo demandan soluciones digitales, sino que esperan en ellas la misma tecnología de clase mundial que obtienen cuando inician sesión en Netflix o compran en línea, por lo que las organizaciones del sector público enfrentan desafíos operativos y presupuestales para trabajar en el desarrollo de nuevas tecnologías. Según el IDC, para más del 24% de las organizaciones gubernamentales, la nube se está convirtiendo en el habilitador para compartir y acceder a los recursos de infraestructura para apoyar modelos operativos digitales seguros y resistentes.
Con el objetivo de seguir aprovechando los beneficios de las soluciones digitales, es fundamental cambiar el paradigma con el que se suelen ver las tecnologías, para empezar a entenderlas como una herramienta sencilla y escalable que permiten hacer las cosas de otro modo, al poder tomar decisiones informadas en tiempo real con los datos obtenidos, impulsando la innovación para resolver los retos cotidianos. De esta forma, se tiene un incremento en la calidad de vida de los ciudadanos y se puede hacer uso eficaz de los recursos disponibles.
Estás soluciones ya se han ido implementando en Colombia de la mano de distintas instituciones como es el caso del proyecto Cerebro de Datos que adelanta el distrito para digitalizar su información, por otro lado, el Sistema de Información para la Gestión y Operación del Servicio Público de Aseo de Bogotá (Sigab), que atiende a 2.5 millones de usuarios, con 588 camiones recolectores, ha empezado a implementar la nube de AWS para monitorear rutas y tiempos de manera eficiente, recolectando casi dos billones de registros, al reportar cada 30 segundos la posición del camión.
En otras ciudades del país, la seguridad también se ha fortalecido con el aprovechamiento de tecnologías como la nube. En Medellín, la aplicación móvil “Te pille”, les ha permitido a los ciudadanos la posibilidad de hacer videos de cuando presencian un robo. De esta forma, pueden subirlo a la nube para que las autoridades puedan efectuar controles con mayor rigurosidad, mejorando los procesos y la percepción de seguridad.
La transformación digital no radica solo en aspectos técnicos, implica una transformación cultural que requiere de un amplio esfuerzo para fortalecer la educación y capacitar a los ciudadanos en habilidades tecnológicas. Es por esto que diferentes compañías apuestan por colaborar con el sector público para cerrarla.
Cada vez hay más innovaciones que se pueden usar para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos con grandes avances para mejorar servicios y productos que se usan en el día a día. Las decisiones que se tomen hoy en cuanto a desarrollo tecnológico en las ciudades determinarán qué tan competitivas serán en el futuro y, por lo tanto, qué tan relevantes serán para una región que cambia y se enfrenta a los retos del mundo 4.0.
*Country manager del sector público de AWS para la región Andina