Con Fipronil hasta en los huevos | El Nuevo Siglo
Miércoles, 14 de Abril de 2021

Hace poco celebramos que el ICA haya emitido la Resolución 09101 mediante la cual se suspendió temporalmente el registro de los productos formulados que contengan el ingrediente activo Fipronil y destinados a los cultivos de aguacate, café, cítricos y pasifloras. A pesar de que de entrada sabemos que será inoperante, la valoramos porque constituye un reconocimiento oficial del problema. Al final creemos que es un contentillo para ganar margen de maniobra y sostener la molécula en el mercado el mayor tiempo posible, a pesar de las evidencias científicas locales y globales que demuestran su capacidad de afectación a la salud humana, animal y ambiental.

El uso de la molécula de Fipronil ha sido restringido en la agricultura europea, al punto que solamente está permitido en el tratamiento de semillas para siembra en invernadero y para algunos otros productos que se cosechan antes de floración, esto es en condiciones muy controladas. Desde 2011, de acuerdo con el Reglamento de Ejecución número 540 Europa prohibió su uso en la cadena alimenticia, no es posible usarlo para desinsectar las aves de corral, vacunos, porcinos y demás animales de abasto, es decir aquellos que todos los días son llevados a la mesa como fuente de proteína.

En 2017 Europa vivió la “crisis de los huevos” causada por el uso soterrado de Fipronil en galpones de varios países, identificándose trazas de la molécula en carne y huevos. Eso causó la destrucción de millones de huevos.

Pensábamos que en Colombia el Fipronil solamente estaba asociado a la muerte masiva de abejas y polinizadores; todo indica que estábamos equivocados, la caja de pandora parece haberse abierto. La molécula anda muy activa en el sector avícola nacional, viaja como ingrediente no explicitado, al menos en el producto promocionado como una tierra de diatomeas, comercializado como RGR 200, de uso específico para el acondicionamiento de camas de galpones de pollos y gallinas ponedoras.  Los avicultores que lo han usado lo alaban por su efectividad, acaba hasta con los insectos fuera del galpón, mata todo lo que se mueva menos al pollo y al operario, a pesar de comercializarse como insumo pecuario actúa como el mejor de los insecticidas, deambula sin registro ICA.

De eso tan bueno no dan tanto. Pruebas realizadas por el Laboratorio de Cromatografía y Espectrometría de Masas de la Universidad Industrial de Santander, allegadas obviamente a las autoridades competentes, revelaron que el efecto milagro del RGR 200 es causado por la presencia, entre otros, de la molécula de Fipronil, que de paso no es informada en su etiquetado.

El hallazgo de la UIS debe prender las alertas de las autoridades, generar las intervenciones necesarias para garantizar que al mercado no lleguen productos con trazas, pues si bien para que represente un peligro se deben consumir importantes cantidades, lo cierto es que causa daño y pone en riesgo la salud pública. De la efectiva intervención de las autoridades depende que no tengamos Fipronil hasta en los huevos.

@ludogomezm, luisdomingosim@gmail.com