EDMUNDO LÓPEZ GÓMEZ | El Nuevo Siglo
Viernes, 19 de Septiembre de 2014

¿Somos capaces  de humanizar la guerra?

 

“No se puede entender que el repudio se limite a lamentaciones”

 

Dentro de  la campaña  “Soy  capaz” , a través de la cual se hace una  sana pedagogía por  la reconciliación  entre los colombianos ,- en la dirección de construir un nuevo país-,  cabe preguntarle a los  representantes del Gobierno y de las Farc en  la mesa de negociaciones  de La Habana ,  por qué no han sido capaces de  pactar un acuerdo mínimo para humanizar nuestro conflicto armado,  cuando las normas  del DIH son de carácter imperativo y  de  obligatorio cumplimiento para las partes no solamente en las  guerras internacionales, sino en los conflictos armados internos .

Haber sido capaces, en cambio,  dichos negociadores,  de tolerar hechos de lesa humanidad  o actos prohibidos de guerra, expresamente señalados en los convenios internacionales suscritos por Colombia , vale decir,  de seguir negociando sin exigir  que se pare  la guerra sucia que cobra todos los  días vidas  de personas  inocentes , se constituye en aberración intolerable y sobre lo  cual los promotores de “Soy capaz”  deben  tomar  nota  para  incorporar esa exigencia en sus libretos publicitarios,  pero dirigidos  a los voceros Gobierno y de la insurgencia armada en La Habana, pues son  los únicos  eventualmente capaces de pactar la humanización de nuestro conflicto mientras  llega la paz.

Dentro de esa  perspectiva uno no puede entender que el repudio se limite a las lamentaciones , como acaba de ocurrir  con el asesinato de siete policías,  por fuera de combate, como cuando  escuchamos los lamentos  del  general  Palomino, director de la Policía  Nacional  y  su ofrecimiento de cien millones de pesos para quien informe sobre el autor o  autores de la masacre  de los jóvenes policías  a su mando.

Cabe preguntar: ¿Si se hubiera pactado el acuerdo mínimo de respeto al DIH  en  la Mesa de Negociaciones de La Habana  esos siete policías de las fuerzas que dirige el general Palomino   hubieran sido masacrados? , ¿O  será que estamos emplazados  a solo  deplorar los hechos atroces que seguirán ocurriendo  en los escenarios  de nuestro  conflicto?

Cuán importante sería que se creara una clara conciencia  sobre la necesidad  y conveniencia  de humanizar nuestro conflicto. Para el propio  Gobierno y para las Farc  sería la mejor  manera de aprestigiar el proceso  de paz ante los colombianos  y ante el resto del mundo , y  de esperar,  de contera, que el referendo de los acuerdos de paz  en los cuales será  incluido el  derecho de los guerrilleros desmovilizados  a ser elegidos a la corporaciones públicas  de elección popular ,  se apruebe en las urnas.

Y  qué  bueno pensar en  que el presidente Santos le diga  a sus  compatriotas, más temprano que tarde: “Soy capaz de obtener que se humanice la guerra  mientras llega la paz”.   

¡Hagamos   votos para que así  sea!

edmundolopezg@hotmail.com