Después de haber estudiado periodismo, allá por la década de los sesenta, en la Universidad Central de Madrid, regresamos para recorrer de nuevo nuestros pasos, tapas, y paseos. Encontramos desde luego una España muy diferente pero igual de cálida en su hospitalidad para con los Iberoamericanos, como les gusta llamarnos a los hijos del descubrimiento.

La ciudad con anchas, hermosas y limpias vías, así como espectaculares parques y documentos, es deleite para los más de diez millones de periodistas que visitan cada temporada la capital española. Colombia pone por lo menos medio millón de ellos. En una tarea de renovación de grandes edificios, la obra que más se destaca es la del viejo y tradicional Ritz, considerado en su momento el mejor hotel del mundo. Igual suerte corren otros edificios emblemáticos para dar la sensación que la ciudad se remoza todos los días

El motivo de nuestro viaje lo ocasionó la boda de nuestro hijo con una madrileña. Es decir, nos convertimos en una auténtica familia hispánica. Fue una oportunidad para volver a visitar, por ejemplo, el hermoso Museo del Prado y sus invaluables pinturas y recorrer las empinadas calles Toledanas, palpando las cinco culturas que integran la riqueza de la raza.

Próximos a nuestro regreso, contamos las horas que nos quedan para culminar esta visita inolvidable y desde ya nos hacemos el propósito, con la ayuda de la providencia, de regresar lo más pronto posible por estos lares y solares.

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Una de nuestras más ricas experiencias personales fue haber conocido, tratado y trabajado con Kofi Annan, un africano tan universal como lo fue Nelson Mandela, su inspirador en sus luchas por humanizar las democracias del mundo. Carismático y brillante, fue a la vez un sencillo pero cálido interlocutor de los problemas internacionales más agudos de su tiempo.

A él le deben las Naciones Unidas el éxito de trabajar más armoniosamente en momentos en que la polarización de bloques era muy crítica. Sus esfuerzos en favor de la paz le merecieron el Premio Nobel en el 2001. Sin embargo, tuvo fracasos significativos al no poder primero evitar la guerra de Irak y luego tratar de terminarla sin mayores consecuencias. Fracasó en su intento como también sufrió un serio revés al no poder evitar la confrontación de los cascos azules en varias regiones del África

Sin embargo el juicio de la historia será seguramente benévolo y hasta universal que no descanso un solo día después de su retiro del Secretariado en acudir en ayuda de los países del Tercer Mundo que se veían comprometidos por desgracias naturales o confrontaciones tribales o regionales. Paz en su tumba.

Adenda

El nuevo gobierno español trata, por todos los medios, de conformar una coalición de partidos que le permitan gobernar por lo menos un año y consolidar una mayoría precaria que, por vez primera en esta década, le proyectan las encuestas.