Fin de año y Reyes tranquilos
Han sido muchos los esfuerzos de la Fuerza Pública y autoridades para conservar la paz y tranquilidad ciudadana este fin de año, extensivas a los primeros días del entrante, compromiso que estimula a la comunidad para apoyar, respaldar y acompañar los planes propuestos en este periodo. Es conveniente llover sobre mojado recordando los programas diseñados por las Alcaldías, la Fuerza Pública y demás autoridades buscando el acompañamiento ciudadano.
En los terminales de transporte tanto terrestres como aéreos, se dispuso una serie de operativos tendientes a reducir una actividad ilegal que se presenta en esos lugares especialmente por los días de navidad y año nuevo, (transporte pirata) debido a la gran afluencia de pasajeros que buscan movilidad en las diferentes ciudades, persuadiendo a los viajeros que para se abstengan de usar servicio de este tipo, no autorizado y muy riesgoso para su seguridad.
Especialmente en Bogotá se dispuso suspender los días primero de enero y nueve del mismo mes la ciclovía sobre la Avenida Boyacá facilitando con ello los planes retorno. Me permitiría sugerir a las autoridades estudiar muy detenidamente esta medida y extenderla a lo largo del año, pues los planes retorno se ven malogrados al encontrar las entradas a la ciudad congestionadas ante el embotellamiento que generan las ciclovías; mi recomendación apunta a una limitación en el horario, restringiendo el uso de las vías por la comunidad hasta el medio día en estos fines de puente. Si hablamos de carreteras, las fuerzas del orden siguen empeñadas en brindar, además de tranquilidad, fluidez sobre los corredores, destinando un representativo número de efectivos a estas rutas viales; algunos harán presencia física sobre las carreteras, mientras otros adelantarán labores de Inteligencia y vigilancia a cubierta. Si lográramos sumar a lo anterior prudencia en la conducción, revisión previa del vehículo, control del exceso de pasajeros, sensatez en la velocidad y ausencia de licor, las autoridades podrán ver reflejado el compromiso ciudadano con los planes.
Sobre un tema de mucha expectativa como es el pico y placa tanto para el presente como el futuro, les quiero recordar que a partir del 26 de diciembre quedó suspendido en Bogotá, permaneciendo la Capital a la expectativa de medidas futuras en esta dirección; por ahora bástenos saber que recibiremos el año nuevo sin este tipo de restricciones. Ojalá el alcalde tenga claridad en las determinaciones para bien de la movilidad capitalina. Termino esta serie de recordatorios y alguna sugerencia, con la restricción del porte para armas de fuego en el Distrito Capital, este comenzó a regir desde los primeros días de diciembre y se extenderá hasta el 8 de enero, momento en que las autoridades deben evaluar los beneficios de la medida. Recuerden, andar armado es un arte.