Crisis

LA  crisis materia de estas líneas se refiere a la seguridad democrática a partir del análisis de Pedro Medellín en “¿El fin de un ciclo?” (El Tiempo, septiembre 6). Se distingue entre la Versión Uribe de contenido limitado y la de Santos de alcance amplio extensiva a la prosperidad democrática. La palabra “ciclo” abarca la dimensión uribista.
La primera modalidad busca la neutralización de la guerrilla y las bandas criminales con índices bajos y decrecientes de seguridad como resultado de la acción militar. Se considera que su evolución fue positiva; sin embargo, Medellín cita aspectos negativos hasta indicar que “muchos de los resultados se obtuvieron transgrediendo los bordes de la ley e incluso los límites del Derecho Internacional Humanitario” y, pasando de lo general a lo concreto, sostiene que “todavía están por determinar los territorios que efectivamente fueron recuperados por la Fuerza Pública y que no terminaron bajo el control paramilitar; aún hoy hay que descontar las bajas y desmovilizaciones que resultaron falsos positivos para conocer la dimensión real del golpe a las organizaciones armadas ilegales”. En suma, la verdadera tasa de homicidios no se conoce porque “falta por incorporar en las cifras oficiales los muertos hallados en los centenares de fosas comunes”.
La Versión Santos implica “que la seguridad es complementaria de los esfuerzos que se van a adelantar con las locomotoras de la infraestructura, vivienda, agricultura, minería e innovación”, es decir, incluye el desarrollo económico.
Se está de acuerdo con Medellín en que “el fin del ciclo de la Seguridad Democrática todavía está por verse”. El Gobierno Nacional debe finalizarla mediante la revisión de la estrategia y la táctica vigentes que, se entiende, es un compromiso del nuevo Ministro de Defensa y su reciente cúpula militar. Lo anterior implica que la Versión Santos fue un tanto apresurada y máxime cuando las locomotoras no están funcionando a cabalidad. La infraestructura, aparte de defectuosa desde la Colonia, enfrenta los inviernos (igual la agricultura) y los escándalos. La minería requiere legalidad y respeto al medio ambiente. La ciencia, tecnología e innovación no ha recibido los recursos de las regalías. Marcha bien la vivienda.
Se comparte la tesis de no ser “realista afirmar que para el 2014 espera (el régimen) acabar con la amenaza de la guerrilla y las bandas criminales”. ¿Por qué? Las Farc han demostrado capacidad de supervivencia.