Resaltó la importancia que este gobierno quiere darle a África, llevando una delegación muy nutrida, sesenta personas, pertenecientes a diferentes sectores como cámaras de comercio, congresistas, empresarios y afrodescendientes, que pretenden fortalecer sus relaciones con nuestros orígenes. Cuestiono la poca eficiencia de la Cancillería, que envió las agendas preparatorias la semana pasada a las Misiones que se visitaran y el número de participantes que es excesivo, la mayoría sin conocimiento de este continente. Menos técnicos y expertos hubiesen garantizado un real impacto y eficiencia con menos gasto.
Escribo sobre este tema, pues creo conocer el África bien. He sido la única colombiana que ha sido embajadora en los tres países del África Subsahariana. Kenia en el oeste, Costa De Marfil al este y Suráfrica en cono sur austral, con 41 concurrencias a cargo de estas misiones y representante ante la ONU ante los programas de Medio Ambiente y Hábitat.
He revisado todo lo que se ha dicho sobre este viaje, algunos especialistas hablan acerca de que el tema del África se abandonó en el año 2000, aspecto que refuto, dado que yo fui jefe de misión, tanto en Kenia como en Suráfrica (2013-2020) y doy testimonio del trabajo comercial, empresarial, turismo, seguridad, narcotráfico, cultural, acuerdos bilaterales, tripartitos, especialmente en la Cooperación Sur-Sur y demás aspectos que se realizaron. No sé si la Cancillería da información sobre ésto o existe un desconocimiento actualmente, como el del ministro Leyva, al decir en una entrevista que la sede de la Unión Africana está en Mozambique. (El Tiempo abril 4-23 Sebastián Lombo). Fui representante ante esta Organización y hasta donde sé, está ubicada en Etiopía.
No es la primera vez que un alto funcionario visita África. Carlos Lemos como vicepresidente, estuvo en Costa de Marfil, firmó dos acuerdos (uno comercial y otro cultural) que nunca se ejecutaron. Valoro la importancia de este país cafetero, que jugó un papel fundamental con la Caja de Estabilización Ivoriana y la Federación de Cafeteros presidida por Jorge Cárdenas Gutiérrez en la estabilización de los precios internacionales del café. El presidente Misael Pastrana también visito la sede Unesco para el medio ambiente ubicada en este país y me permito recordar que el presidente Samper también visitó Suráfrica.
Reconozco que para los colombianos este continente es lejano y poco conocido. Dicté una conferencia en la Universidad Externado, en el único departamento académico existente en el país sobre África, dirigido por Jerónimo Delgado, y allí reafirmé la miopía y el desdeño extremo con que Colombia siempre ha mirado este continente, desconociendo el potencial económico, político, comercial, de inversión, turismo, migración etc. Supliqué por una oficina de Proexport para ayudar a desarrollar el comercio y no se consiguió. Se sigue manejando a distancia. El gobierno y sus asesores prefieren a Asia y Europa.
El transporte es nuestro gran desafío. Con esto quiero decir que, si Colombia no toma una decisión seria de enfocarse en África, como un continente de posibilidades y trabajo, y nombra embajadores con conocimientos de la región, no por su raza, sino por su experticia y capacidad, esta visita será un tour más por este continente.
Ojalá la afro descendencia de la vicepresidenta no sea lo principal razón de este viaje, sino que exista un interés real del gobierno hacia un continente lleno de posibilidades, desafíos y esperanza. Allá no impresionan los discursos sobre el colonialismo ni la resistencia, ni el rasgarnos las vestiduras sobre nuestro origen. Ellos son pragmáticos y conocen muchas formas de negociación.