LORENA RUBIANO FAJARDO | El Nuevo Siglo
Domingo, 6 de Mayo de 2012

Concejos eunucos

 

“La democracia sustituye el nombramiento hecho por una minoría corrompida, por la elección hecha merced a una mayoría incompetente”

George Bernard Shaw

 

Cada día se reduce más y más la participación democrática de los pueblos en la toma de sus decisiones.

Ahora en el Congreso camina silenciosa y cautelosa una ley por medio de la cual se reforma la Ley Orgánica 128 de 1994, con una nueva ley, 141 del 2011, por la cual se crean las áreas metropolitanas y las corporaciones metropolitanas, que suplirían las funciones de los concejos municipales en lo concerniente a movilidad y transporte masivo, medio ambiente, servicios públicos, tierras y Planes de Ordenamiento Territorial.

En esta forma los concejos locales quedan castrados y se ocasionará un gran conflicto de intereses, porque derogará todos los acuerdos que les sean contrarios e impondrá normas de inmediato cumplimiento, así cada municipio haya aprobado las propias semanas antes.

Estas denuncias fueron hechas en la plenaria del Senado por el congresista César Tulio Delgado Blandón, quien advirtió que habrá un choque de trenes, porque no es claro y específico qué norma será prioritaria, si la de los concejos municipales o las de las corporaciones metropolitanas, quién percibirá los recaudos y cómo se implementarán las nuevas disposiciones con las ya establecidas.

Los concejos municipales pierden así toda su razón de existir y no quedarían sino aprobando saludos a la bandera y condecoraciones.

El senador denunció en la plenaria de la corporación que se estaría legislando o enviando una señal de inseguridad jurídica a los entes territoriales y las decisiones las tomaría un delegado de cada municipio, quienes tendrían toda la potestad suprema de expedir las normas.

Estoy de acuerdo con la creación de las áreas metropolitanas, establecidas en la Constitución de 1991, en sus artículos 319 y 325, pero considero que estos nuevos entes burocráticos, como está concebido el proyecto, además de ser demasiado onerosos para los municipios, por sueldos, sedes, vehículos burocracia etc., van a crear más caos que organización. Es urgente definir desde la propia ley las competencias y contar más con los concejos municipales.

Se podría pensar en suprimir los concejos municipales y crear un gran concejo metropolitano, pero con igualdad de condiciones de participación de los municipios, para que el grande no se coma al chico y los alcaldes conservarían su autonomía en cada uno de ellos.

lorenarubianofajardo@gmail.com