Ganadores y perdedores

Ganaron.  Juan Manuel Santos: indudablemente el Presidente de Colombia se anotó un hit con la forma como manejó los intereses tan contrarios de unos y otros países. Planteó de frente y sin miedo la necesidad de abordar “sin prejuicios” una reflexión acerca del modelo de lucha contra las drogas. Con diplomacia controló el espinoso tema de Cuba y logró que el Canciller venezolano participara de la cumbre.

Además el Presidente de Estados Unidos vino, se quedó dos noches y  se reunió con él y en conjunto le dieron otro empujón a la implementación del TLC. En últimas consolidó su liderazgo personal en la región y el de Colombia también.

Barack Obama. Era difícil que no ganara en esta cumbre. Es un personaje per se. Digan lo que digan, con los resentimientos de más o de menos, la sola presencia de Obama le cambiaba el tono a la cumbre. Ganó porque al final impuso su criterio como siempre. Nada se dijo de las Malvinas, Cuba seguirá bloqueada y marginada de estos eventos y la guerra de las drogas se mantendrá bajo las mismas premisas.

Perdieron. Shakira: el imperdonable error “de dublime” al entonar en solitario el himno nacional.

El eje Correa-Chávez-Ortega: hicieron bien en no venir. Igual en el aporte a los problemas de fondo y por los cuales vale la pena este tipo de encuentros multilaterales no aportan mucho.

Curioso que defiendan tanto el tema de Cuba. Son presidentes que pretenden a punta de una democracia forzada perpetuarse en el poder.

Cristina Fernández: la Presidenta gaucha se mostró muy brava por la ausencia de apoyo consensuado en el caso de las islas Malvinas. Es curioso que exija tanto apoyo cuando en el pasado Argentina no ha sido muy solidaria con los problemas de otros países de la región. América Latina: el embeleco del tema de Cuba, Malvinas y las drogas no permitieron que se tomaran decisiones importante en torno de temas trascendentales: la niñez, la desnutrición, la educación temprana, la pobreza extrema. No tienen mucho sentido las pataletas de Venezuela y Ecuador cuando en sus calles la gente se muere de hambre. Diferente en cambio la postura del presidente Santos que repitió hasta el cansancio la urgencia de acabar con la pobreza.

Estados Unidos. Ojo me refiero al país y no a su Presidente. Al país del Norte se le está creciendo el enano y si no se pone las pilas, los países del Río Grande para abajo lo van a dejar solo en muchos apoyos necesarios.