No hemos aprendido a manejar los pálidos billetes de diez, veinte, cincuenta y cien mil pesos emitidos en el 2017, cuesta trabajo precisar la  denominación de las monedas pequeñas, medianas y grandes que circulan en Colombia y de despedida el gobierno presenta al Congreso un proyecto  tendiente a la fabricación y puesta en circulación de pesos nuevos sin tres ceros, que proliferarían mezclados con los de ahora e introduce en el articulado del mismo la acuñación de monedas en centavos, lo cual complicaría  en grado sumo cualquier transacción.

El costoso plan incluye que, entre el 2020 y el 2023, los movimientos se realizarían en pesos nuevos o en pesos viejos, con redondeos, canje de monedas en el Banco de la República y en el sistema financiero, sin prever  efectos económicos colaterales, el impacto en la canasta familiar. 

Extraño proponer el uso simultáneo de esos pesos conjuntamente para terminar fabricando otros con logo distinto en el 2023. Curioso afirmar que dejaremos de parecernos a Vietnam, Irán y Uganda, países donde circulan billetes de alta denominación. Los dineros mal habidos enterrados en caletas  pueden situarse en el mercado en este y los próximos años, durante la discusión y después de aprobada la ley.

Caótico que al iniciarse el lapso de transición todo documento o registro que posea valores en moneda colombiana deba expresarse solo en nuevos pesos, confusa  la instrucción de  informar a los usuarios las equivalencias entre las dos unidades monetarias, lo referente a que, al término del  periodo de transición, se aplicarán a todos los documentos las cifras expresadas en nuevos pesos y en pesos viejos con equivalencia a los pesos correspondientes a una tercera  nueva unidad, difícil la aplicación de la norma  a  tarjetas de crédito,  pago de abonos, a la liquidación de contratos y créditos, en las transacciones cambiarias, en la fijación de la tasa de usura, en cuanto al salario mínimo. ¿El avalúo de inmuebles por catastro sería en pesos nuevos o viejos y el pago de facturas del impuesto predial en qué moneda? ¿El valor en escrituras públicas tendría que modificarse?

En algunos países se han efectuado reformas monetarias, conviene estudiar esas experiencias antes de aprobar una ley que crearía inestabilidad. En campaña presidencial, con senadores y representantes electos a punto de iniciar su período el próximo veinte de julio escucho al Ministro de Hacienda pronunciarse en favor del proyecto con lenguaje similar al utilizado para incrementar impuestos. Después de oírlo pienso que la inflación se incrementaría con la mescolanza de billetes e inclusive el IVA aumentaría. El Congreso debe decir ¡NO! Que no nos enreden más la vida.