¿Su majestad el usuario? | El Nuevo Siglo
Lunes, 1 de Agosto de 2016

En entrevista televisiva el nuevo director de Aerocivil dijo que a partir de ahora el consumidor será “su majestad el usuario”. Y, calificó su gestión como “una aviación para la paz”.


Me preocupa que en Colombia se insista en desconocer los principios establecidos en las normas internacionales que protegen los derechos del consumidor de servicios de transporte aéreo y que no ponen en una posición superior a ninguna de las dos partes en esa relación de consumo. Todo lo contrario. Propenden por una igualdad o balance en la relación. Es decir, ni se trata de su majestad la aerolínea ni de su majestad el usuario. Darle calificativos al usuario en un tema tan delicado como los derechos del consumidor de servicios de transporte aéreo es con todo respeto irresponsable pues crea de entrada un desbalance entre consumidores de servicios de transporte aéreo y las aerolíneas. Colombia es parte del Convenio de Montreal de 1999. (Ley 701 de 2001) y esta norma internacional propende por una relación totalmente balanceada entre consumidores de servicios de transporte aéreo y las aerolíneas. Esa es la armonía que las normas colombianas deberían reflejar. Enviar un mensaje dando preponderancia a una parte más que a la otra no es conveniente y en mi opinión no obedece a la realidad legal vigente.


De otra parte, no está nada bien empezar a calificar la aviación civil con tintes políticos. La “aviación para la paz” no tiene ningún sentido. Si algo ha funcionado bien y ha crecido en los niveles que conocemos, ya sea en la supuesta guerra en que nos tenía Uribe o en la supuesta paz en que nos tiene Santos, la industria aérea en Colombia ha crecido porque se ha mantenido ajena a cualquier aspecto político interno.  Fluye bajo una dinámica internacional. Y, así debe ser por mandato de otro Convenio (Convenio de Chicago de 1944). En fin, el único objetivo debe ser el que la aviación civil siga desarrollándose de manera segura y ordenada. Que la aviación pueda ser operada de forma económica y sin tantas trabas, para que el sector como tal, siga creciendo y que los beneficios de esto los vea el usuario. 

 

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En el año 2010 Colombia obtuvo un puesto en el Consejo de la OACI y no se hizo nada. Esperemos que, si llegamos a presidir la Comisión Latino Americana de Aviación Civil, esta vez sí, hagamos algún papel. 
@ReyesJuanfelipe