La figura del candidato a vicepresidencia no tiene la capacidad hoy en día de aportar caudales electorales importantes a los candidatos, pero si refuerzan, moderan o pueden empeorar la imagen que las personas puedan tener sobre ellos.

Por eso al final resulta tan interesante la elección de la fórmula vicepresidencial, pues allí lo que se espera es que esa sorpresa cumpla con esos requisitos y que al final no le aleje al candidato a la presidencia, sectores que él dentro de su campaña está tratando de conquistar, contrario a eso, que le ayude a convocarlos.

Las campañas más fuertes, al día de hoy, hicieron el ejercicio en forma diferente. Realizado el análisis de los nombres que escogieron, la campaña de Gustavo Petro al decidirse finalmente por Francia Márquez buscó llegar con el mensaje que cumple los acuerdos, es lo menos que puede hacer un candidato de un pacto, honrar lo prometido. Sin embargo, al final del ejercicio políticamente lo que hizo fue pasar dinero de un bolsillo para el otro del mismo pantalón. Para nadie es un secreto que los casi seis millones de votos que tuvo en la pasada consulta el Pacto Histórico, están en la caja de las cuentas de Petro, independiente de él solo haber obtenido el 80% de esa votación.

Entonces suma como tal no hubo de nuevos votos, lo que se esperaría es que no hubiera resta del sector del centro que es hacia donde se encuentra el electorado que dará el triunfo en segunda vuelta. Sin embargo, las relaciones entre la Márquez y el presidente del Partido Liberal se rompieron desde el primer momento. No serán todos los votos los perdidos, pero si una parte de sus líderes que son influyente hoy no quiere estar a ese lado e incluso se pide libertad a la hora de votar.

Por su parte Federico Gutiérrez escogió una fórmula que viene de ese sector de los verdes y que piensa seducir el centro. Aunque desconocido nacionalmente, Lara Sánchez no tiene además tacha conocida que haga que se produzca una desbandada de electores hacia la otra campaña. Por el contrario, asumo que su papel principal será al momento de enfrentar la segunda vuelta, que es donde la mayor cantidad de simpatizantes del centro queda libre y donde seguramente veremos el total protagonismo de este hombre recogiendo entre liberales y verdes la mayor cantidad de simpatizantes.

Por su parte Sergio Fajardo optó por un hombre con los pergaminos académicos suficientes para ser parte de su gobierno, pero políticamente Luis Gilberto Murillo no logró atajar la migración actual de los políticos de centro hacia las otras campañas, menos el guiño a las minorías que se ven hoy por hoy más representadas por Francia Márquez.

Por ahora solo queda esperar las nuevas encuestas y ver si con las fórmulas pasó algo o simplemente llegaron para acompañar, lo cierto es que más allá de lo que uno pudiera pensar de la utilidad o no de esta figura, debe estar lista para en algún momento regir el destino de la nación.