Bogotá se llena de teatro | El Nuevo Siglo
Viernes, 11 de Marzo de 2016

LA FIESTA cultural más grande de Colombia, la decimoquinta edición del Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá inicia hoy cargada con una alucinante programación, en la que México es el invitado de honor y los países nórdicos van a tener una amplia visibilidad.

Esta vez el festival inició con un gran regalo para el público: el mejor teatro de calle del mundo traído desde España que abrió el telón una semana antes del inicio oficial. Cada edición del Festival tiene su sello, y este año no es la excepción. Un acuerdo con los países nórdicos (Suecia, Noruega, Finlandia, Dinamarca, Islandia e Islas Faroe) permitirá que los colombianos puedan disfrutar nueve maravillosas puestas en escena.

 

Por su parte, el país invitado de honor le dará un sentido más popular y folclórico a esta fiesta capitalina. México desplegará con toda su comisión lo mejor de la cultura, las fiestas patrias, la danza y las tradiciones típicas de la tierra del Sol y el tequila. El Ballet Folclórico de la Universidad de Guadalajara será el encargado de abrir la primera franja de este festival, con 168 artistas capacitados para actuar en danza y música coral en tres niveles, toda una explosión de colores, texturas, música y ritmos.
 

La delegación mexicana contará con siete obras de sala como ‘Misa fronteriza’, de la Compañía Gorguz Teatro y Universiteatro; ‘Mendoza’ de los Colochos Teatro; ‘Memorias de dos hijos caracol’, de Carretera 45 Teatro; ‘Baños Roma’, de Línea de Sombra; ‘Una Luna para los mal nacidos’, de la Universidad Nacional Autónoma de México, y ‘Tristán e Isolda’, la más grande leyenda de amor de todos los tiempos.

Representación nacional

Una nómina de artistas luminosos y de grupos de trayectoria mundial estará presente a lo largo del Festival de Teatro más importante de Latinoamérica, para representar el talento, carisma y evolución de las artes escénicas del país.

En toda esa nómina de artistas luminosos y grupos de trayectoria mundial que presenta cada dos años el Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá, también hay un espacio para conocer las producciones recientes de los grupos de las regiones colombianas.

Entre los recomendados de teatro de sala se ubican las compañías: Teatro Cenit con las obras: Antígona, genealogía de un sacrificio y los Alabados (Cantos Sagrados); Teatro Línea de sombra con la obra: Pequeños territorios en reconstrucción; El Mulato y su Swing Latino con su obra Salsa Cabaret; Amalia Lú Posso con su obra Cuentos eróticos del Pacífico colombiano, y Diokaju Generación Arte Afro con su obra Ex Posición.

Se destaca también la compañía indígena de Teatro Jayeechi que presentará su obra: “Yonna: Ritual Wayuu” en los parques Tibabuyes y Villa Mayor.Las poblaciones étnicas estarán presentes adicionalmente en: coloquios temáticos, talleres de teatro prácticos en cinco disciplinas: juegos teatrales, cuerpo, danza ritual y ritmo, teatro de objetos, escrituras creativas e historia local en el marco de la programación de la Escuela del Festival.

Con 7 obras colombianas, 9 conciertos, talleres prácticos, coloquios y la participación especial de la obra internacional John Kani´s Missing, escrita y protagonizada por “el abuelo del teatro sudafricano”, lo afro se toma el XV Festival Iberoamericano de Teatro para exaltar la labor cultural que se logra a través de la celebración del festival, y garantizar la preservación de las manifestaciones artísticas en las artes escénicas de las poblaciones étnicas en riesgo de exclusión en Colombia.

El FITB, declarado Patrimonio Cultural de la Nación en 2013, en la alianza con el Programa para Afrodescendientes e Indígenas de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), busca promover el auto-reconocimiento y la diversidad para el sostenimiento de las expresiones artísticas propias de las poblaciones étnicas.

Anamarta de Pizarro, directora del Festival, explicó que por medio de la alianza se brindará formación de procesos artísticos a 100 personas, a través de talleres prácticos, clases teóricas, charlas con artistas, visitas a los montajes del festival, y la difusión de las manifestaciones artísticas del país dentro de toda la programación, como un modelo de inclusión desde las artes escénicas, la educación y la reproducción de la memoria histórica.

El arte tiene un efecto transformador, y es generador de cambio, en ese sentido el proceso creativo supone una oportunidad para asimilar, replantear, reflexionar, comprender o cambiar el entorno en que se vive. La creación o la interpretación artística tienen, hoy en día, un compromiso de participación activa con el entorno y el momento histórico en el que están inmersas, especialmente con aquellos colectivos vulnerables.,

Esta iniciativa tiene como objetivo abordar las artes escénicas desde su capacidad de provocar cambios en los individuos o en amplios colectivos sociales, entendidas como instrumentos artísticos para empoderar a los ciudadanos y a las comunidades en riesgo de exclusión.