La pandemia del covid-19 también ha incentivado una transformación digital en la cotidianidad de las personas. Las cámaras de seguridad, los sensores de movimiento, la iluminación inteligente y controles de acceso son solo algunos ejemplos de cómo la inteligencia artificial permite obtener un mayor provecho de los espacios.

Los números lo respaldan. En el mundo, de acuerdo con la International Data Corporation (IDC), el mercado de dispositivos de smart home ha experimentado un crecimiento del 4,5% en el último año, lo que representa 801,5 millones de unidades vendidas en 2020. En este año se prevé que el mercado siga creciendo y que los dispositivos sean más comunes y accesibles.

Para Fernando Ararat, director de Marketing de VTA, este incremento se debe a que “la automatización de los hogares está cautivando a las personas que buscan confort, eficiencia energética y comodidad a través de dispositivos móviles y servicios tecnológicos. Además, en el contexto actual, brindan una sensación de seguridad, pues evitan el contacto con puertas, ‘switchs’ de encendido, entre otros. Adicionalmente, nuestros productos ofrecen gran facilidad de instalación y precios asequibles para controlar su hogar desde cualquier parte del mundo”.  

Otros beneficios que pueden percibirse del uso de estas tecnologías es la amenidad que otorgan a los diferentes espacios del hogar, impulsada por el cambio en los hábitos de las personas hacia tendencias más digitales. Además, tal y como advierte el director de Marketing de VTA, “diversos estudios señalan que un hogar tiene una valoración adicional del 20% o 30% si es completamente inteligente”.

Si está pensando en domotizar su hogar, estos son tres beneficios que lo motivarán a hacerlo

1. Cuidar al medio ambiente

La domótica ayuda a preservar los recursos naturales, reduciendo el consumo energético y controlando, monitorizando y gestionando los dispositivos que más energía consumen. Esto se puede lograr, por ejemplo, apagando automáticamente las luces que no están en uso o a una hora específica si no se encuentra en su hogar. Así, las personas podrán contribuir a la reducción de la huella de carbono y aumentar la eficiencia energética del hogar.

Por otro lado, en Colombia, el 70% de la electricidad proviene de fuentes hídricas, las cuales son muy vulnerables al cambio climático; por ejemplo, en épocas de sequía se aumenta el riesgo de cortes energéticos. Cerca del restante 30% de la energía es generada por termoeléctricas que usan gas, carbón o diésel, las cuales producen un alto índice de contaminación. Tan solo 0,13% proviene de fuentes de energía renovable como el viento.

Por esta razón, es muy importante ahorrar energía y la tecnología puede ser una aliada. Los dispositivos electrónicos que están en casa están pensados para que sean más eficientes, reduzcan el consumo de energía y agua, y eviten el desperdicio de alimentos, lo que disminuye en las emisiones de CO2. Según una investigación de la Asociación Española de Domótica e Inmótica (Cedom) en España, la domótica permite un uso eficiente de la energía, con ahorros anuales de hasta 30%.

Nevera inteligente: una de las razones del consumo de energía por parte de este electrodoméstico, además del hecho de estar las 24 horas del día encendido, es que se abre y cierra constantemente o se mantiene abierto por un largo periodo de tiempo; situación que genera que el compresor deba estar regulando la temperatura y para eso requiere más energía.

Como solución a este problema, algunas marcas en el país como Samsung ofrecen no solo compresores con tecnología Digital Inverter, sino también posibilidad de revisar el interior de la nevera sin necesidad de abrirla por medio de la pantalla táctil de Family Hub o por medio de un Smartphone vinculado a Family hub, desde cualquier lugar.  De esta manera, puede comprar en el supermercado únicamente los alimentos necesarios, supervisar el vencimiento de los alimentos que ya tiene y hacer uso de los alimentos prontos a expirar.

Adicionalmente, con esta nevera es posible disminuir el desperdicio de alimentos, para optimizar el uso de los recursos que se utilizan durante su producción (tierra, agua, energía) lo que entonces supone una reducción en las emisiones innecesarias de CO2 que contribuyen al calentamiento global y cambio climático.

Lavadora inteligente: Para remover manchas o asegurarse de una óptima limpieza de las prendas, los usuarios tienden a utilizar agua caliente, evitan hacer cargas completas de lavado y utilizan gran cantidad de detergente, lo que genera desperdicio de agua y energía; contribuye a una mayor contaminación de las fuentes hídricas, y deteriora la ropa.

Para evitar lo anterior, con la inteligencia artificial que ofrece el mercado hoy, en las lavadoras de carga frontal, es posible que el mismo dispositivo determine de acuerdo con el tipo de prendas, peso y cantidad de suciedad, cuál es el mejor ciclo de lavado, el tiempo del mismo y la cantidad de detergente que se debe utilizar. Adicionalmente, es posible hacer monitoreo del estado de la lavadora y de los ciclos desde el celular, lo que facilita su entendimiento y mantenimiento. 

Aire acondicionado inteligente: Este electrodoméstico al estar en funcionamiento continuo puede generar un alto consumo energético, de no contar con la tecnología adecuada. Los aires acondicionados inteligentes generan un enfriamiento más rápido y, por ende, un ahorro de energía. Así mismo, el hecho de conectarlo a internet permite que sea controlado desde cualquier parte, así que unos minutos antes de entrar a casa es posible prender el aire desde el Smartphone.

Por otro lado, gracias a la conexión a internet y la inteligencia artificial presente en los aires, de manera automática, optimiza los distintos modos, analizando las condiciones y los patrones de uso, como la temperatura interior, la temperatura exterior, el tiempo de funcionamiento, el ajuste de temperatura y hasta se apaga si después de unos minutos no hay nadie en la habitación. En conclusión, genera un uso eficiente de la energía que utiliza.

Así mismo, no solo los electrodomésticos inteligentes generan un uso eficiente de los recursos energéticos, también pueden optimizar sus gastos con electrodomésticos que cuenten con tecnología para el ahorro de energía. Renovar su electrodoméstico es una inversión, que le asegurará un ahorro mensual en la factura de energía.

2. Ahorro de dinero

Una gran estrategia para ahorrar dinero es evitar el uso de dispositivos en horarios muertos (noche, madrugada). Al automatizar el hogar, las personas pueden, por ejemplo, apagar los tomacorrientes que no están usando, programar la calefacción o ventilación, y activar electrodomésticos en horarios determinados únicamente.

3. Más seguridad

La seguridad del hogar es hoy una prioridad. Un buen sistema de vigilancia tiene la capacidad de enviar imágenes, alarmas y mensajes en tiempo real ante cualquier evento inusual. Incluso, si la persona está fuera de la ciudad, el sistema le alertará y dejará manipular los equipos vinculados a la aplicación.