Comunidades digitales, en la mira del Museo del Oro para el 2021 | El Nuevo Siglo
María Alicia Uribe, quien desde 1984 ha estado en sintonía con las labores del museo, fue designada como cabeza de esta institución desde el 2010.
Foto cortesía
Domingo, 14 de Febrero de 2021
Redacción Cultura

Incentivar las conversaciones entre sus visitantes y expertos, la formación básica y profesional desde casa y abrirse campo aún más en la oferta virtual son algunas de las apuestas que el Museo del Oro tiene para este 2021, año en el que la pandemia sigue su paso.

Ante un nuevo ciclo de actividades a la par de la emergencia sanitaria María Alicia Uribe en diálogo con EL NUEVO SIGLO habla sobre sus proyecciones, fórmulas y programación para este año.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cuál es el balance para el museo después de un 2020 de pausa en el mundo cultural?

MARÍA ALICIA URIBE: Es un panorama muy bueno. Paradójicamente esta situación tan difícil, este reto tan enorme que hemos tenido todos los museos en el mundo, nos ha impulsado a transformarnos y cambiar para bien.

Hemos aprendido muchísimo y hemos tenido la flexibilidad, la creatividad y la pasión por lo que hacemos, lo que nos ha permitido transformarnos muchísimo y no solo para adaptarnos a esta nueva forma de vida y de trabajo, sino también para aprender, avanzar y crecer. Somos otros en este camino.

ENS: ¿Cómo ha vivido la virtualidad este centro cultural?

MAU: Por un lado, tuvimos que transformarnos tanto en el trabajo que hacemos de cara al público como en el trabajo interno, es decir todo el detrás de escena que pasa en los museos que es enorme y es lo que finalmente se ve reflejado en unos objetos y actividades para el público.

En la parte del público hemos aprendido muchísimo de virtualidad, pues veníamos de una tradición de actividades presenciales, de las exposiciones con las colecciones, las conferencias in situ, los talleres y las actividades para los colegios y universidades, entonces lo que teníamos virtual era solo un complemento de eso, era muy escaso, pero esto nos ha obligado a replantear todo y a poner la virtualidad como un foco muy importante del trabajo y de los públicos.

Nosotros somos grandes expertos en nuestros públicos presenciales, pero de los virtuales sabíamos muy poco, entonces esto nos ha obligado a entender y a conocer esta población que es muy distinta. Eso nos ha hecho conocer y captar nuevos públicos para el museo.



Este conocimiento nos ha llevado a transformar esos productos y actividades para adaptarlas a esos públicos, a esas especificidades. Por eso, estamos promoviendo mucho más esa participación y esa conversación entre el público y el museo, que es otra de las cosas maravillosas que ha sucedido con esta virtualidad.

También nos ha permitido tener en nuestra programación personas que no podíamos tener porque estaban en otros lugares del mundo o del país. Con esto hemos hecho una agenda nuestra, pero hecha desde otras ciudades o países y esto es algo que llegó para quedarse.

Tenemos muchas actividades con formatos nuevos. Por ejemplo, la que hacíamos para los escolares que era presencial, porque son uno de nuestros grandes públicos y lo han sido desde que el museo existe, ahora son virtuales, que son las animaciones pedagógicas y estas han sido una de las actividades más exitosas que estamos teniendo en este tiempo.

Para los maestros, estas animaciones pedagógicas han sido un alivio. Son conversaciones con los niños sobre las colecciones del museo, el patrimonio arqueológico y el pasado prehispánico. Con ellas hemos tenido experiencias preciosas con los estudiantes y estamos llegando a regiones donde jamás lo lográbamos por la presencialidad.

Y todo esto es posible gracias al Banco de la República, todas estas transformaciones, de continuar trabajando, nuestros proyectos. Indudablemente, hay muchísimos museos en crisis económicas, de públicos en estos momentos y nosotros hemos podido hacer todo esto, avanzar, crecer y transformarnos gracias al apoyo de esta institución, no solo económico, sino institucional.

ENS: Entonces en este tiempo de pandemia, ¿se podría decir que los colombianos aumentaron su interés por esta oferta cultural de los museos?

MAU: Sí. Por lo menos el Museo del Oro ha tenido una buena participación de públicos en todas nuestras actividades, unas más, otras menos. Por ejemplo, en esto para los colegios tenemos un público impresionante, todo el tiempo tenemos solicitudes. Ahora que volvieron los niños de vacaciones, tenemos muchas solicitudes para esa actividad. Pero también estamos haciendo conferencias, tenemos actividades en redes sociales, talleres. Ha crecido el público de nuestras redes.

También ha crecido nuestro público con discapacidad auditiva, con el que hemos tenido varias actividades, animaciones pedagógicas, pero también videos.

ENS: En este 2021, ¿qué planes tiene la institución?

MAU: Desde hace unos años venimos renovando todos nuestros museos regionales, tenemos seis en el país: cinco Museos del Oro y uno etnográfico, en los que abarcan temas como las sociedades prehispánicas donde hubo importantes tradiciones orfebres en el país.

Primero hicimos nuestro estudio de público por vías virtuales para el Museo de Armenia. Hemos hecho investigación de las colecciones en la virtualidad a través de las fotografías y de la base de datos y también investigaciones de la arqueología de sus regiones, que en el caso del museo del oro Quimbaya, es lo que se está llamando el paisaje cultural cafetero y el museo de Cartagena es sobre todo las llanuras del caribe y del bajo Magdalena. Esto nos ha permitido tener una mayor interacción con las personas que están en esos museos en esas ciudades y con los otros museos del oro.



Entonces esa será nuestra apuesta, continuar estas renovaciones de museos tan importantes que se abrirán entre 2022 y 2023.

ENS: ¿En qué se enfocará la programación de este año?

MAU: El reto para este año es continuar con nuestra exposición temporal en este momento que es La Sacerdotisa de Chornancap, una mujer con poder del antiguo Perú. Es una exposición que venía luchándola desde hace varios años y que la íbamos abrir en marzo del año anterior, pero tuvimos que parar todo cuando cerramos. La muestra llegó a finales del año pasado y se abrió ahora el 12 de enero y la vamos a tener hasta el 9 de mayo, entonces tenemos público presencial poco pero paulatinamente esperamos poder ir ampliando nuestro aforo y tener más posibilidades de visita presencial a la exposición, para la cual tenemos varios elementos virtuales y un ciclo de conferencias muy interesante alrededor de algunos temas de la exposición.

Por otro lado, desde el 2019 venimos celebrando los 80 años del museo, por lo que hicimos una exposición que recorre todo el museo y vamos a seguir haciendo programación alrededor de este aniversario.

En diciembre vamos a tener una exposición internacional procedente de Asia de un intercambio, que contará con una magnífica muestra también de materiales antiguos y modernos de un país maravilloso.

ENS: ¿Cómo se manejará la virtualidad y presencialidad en la agenda del museo?

MAU: No sé si tengamos un equilibrio, pero sí estarán las dos vías de trabajo al mismo tiempo. La idea es seguir explorando este mundo virtual, desarrollándolo, descubriendo más posibilidades y entendiendo mucho mejor estos públicos. Pero mantendremos nuestra presencialidad para la exposición permanente con las colecciones del museo y con esta exposición temporal. Entonces tendremos visitas por reserva a través de la página web banrepcultural y seguiremos teniendo este público presencial.