Los editores alemanes mostraron este martes su confianza en el sector editorial frente al peso creciente del gigante estadounidense de la distribución en línea Amazon, la víspera de la apertura de la Feria del Libro de Fráncfort.

"El sector alemán de la edición no tiene miedo de Amazon", declaró Heinrich Riethmüller, director de la Asociación de Librerías y Editores Alemanes. "Confiamos en nosotros mismos. Hemos aprendido mucho estos últimos años (...) y a partir de ahora podemos estar presentes al mismo tiempo en internet y fuera", añadió.

"Al mismo tiempo nos defendemos de los ataques contra las estructuras de creación de valor llevados a cabo por empresas que actúan en situación de monopolio", añadió en una rueda de prensa.

La Comisión Europea anunció el martes la apertura de una investigación en profundidad sobre posibles ventajas fiscales acordadas por Luxemburgo a Amazon.

Al igual que otros grandes grupos estadounidenses como Google o Apple, Amazon es habitualmente blanco de críticas de los editores, como en Alemania, donde estas empresas están acusadas de "chantaje" en sus prácticas comerciales y de abuso de posición dominante. Los sindicatos alemanes denuncian asimismo las condiciones de trabajo en estas compañías.

La venta de libros en Internet, alrededor de un 16% del conjunto de este mercado en Alemania, está dominada por Amazon, cuya cuota de mercado está estimada entre "un 50% y un 70%" en términos de volumen de negocios, subrayó Riethmüller.

Tras una ligera progresión el año pasado, la cifra de negocios de los tres principales canales de distribución de libros en Alemania -librerías, comercio electrónico y centros comerciales- registró una reducción del 3% en los ocho primeros meses de 2014. Las librerías consiguieron limitar este retroceso al 1,8%, afirmó.

Junto al comercio en línea, la explosión de los libros electrónicos o "E-books" y el desarrollo a gran velocidad de la autoedición han afectado a una industria, que busca ahora un nuevo modelo en un contexto de crisis económica en Europa.

En España, especialmente afectada por la crisis, algunos editores registraron un descenso de su cifra de negocios de entre el 30% y el 40% en dos años, había explicado anteriormente Jürgen Boos, director de la Feria del Libro de Fráncfort.

Esta importante cita mundial de editores tiene previsto acoger entre 280.000 y 300.000 visitantes esta semana. Hasta el viernes, la feria está reservada a los profesionales, quienes pasarán el testigo el fin de semana al gran público que podrá visitar los 7.000 expositores provenientes de un centenar de países.