LA AGRUPACIÓN ganadora en la modalidad de ‘Marimba y Cantos Tradicionales’ del Festival Petronio Álvarez 2024, presentará el espectáculo ‘La noche de la memoria, la música de marimba y los cantos tradicionales del sur del Pacífico colombiano’, un homenaje a Inés Granja, Emeterio Balanta y Faustina Orobio.

La puesta en escena contará con 17 artistas jóvenes entre percusionistas, cantoras y bailarines oriundos de distintos territorios del Pacífico como Timbiquí, Guapi, Ladrilleros, El Charco, Iscuandé, López de Micay y Cali.

El encuentro será el sábado 31 de agosto a las 7:30 p. m., en la Sala Delia Zapata del Centro Nacional de las Artes.

Dirigido por Felipe Amú, este espectáculo cuenta con un variado repertorio de ritmos autóctonos como jugas, arrullos o bambucos viejos, homenajeando a figuras emblemáticas de los sonidos raizales, que serán interpretados por más de diez percusionistas, cantoras y marimberos jóvenes, junto a bailarines expertos del grupo de danza Folklorombia.

Ancestralidad

La presentación será un tributo al conocimiento de los mayores y una muestra de relevo generacional que busca visibilizar a maestras y maestros, a la vez que promueve una integración cultural con una propuesta estética que resalta la ancestralidad y vigorosidad musical del Pacífico sur.

Para Felipe Amú, director musical de Cantoras de Mar y Río, este concierto es un homenaje a las voces representativas del folclor colombiano como el maestro Emeterio, de la dinastía Balanta, y las maestras Inés Granja de Timbiquí y Faustina Orobio de Guapi. “La esencia de este show está puesta en los más de 10 percusionistas, cantoras y marimberos jóvenes de la agrupación De Mar y Río que, cantando con sus mayores, junto a un cuerpo de bailarines expertos egresados de la reconocida compañía de danza Corculguaupi de Oliva Arboleda (Q.E.P.D), hacen una significativa muestra de relevo generacional, como tributo a la maestría y sabiduría de quienes han sido pilares del folclor y el acervo cultural del Pacífico”.

Los bailarines que participarán en este montaje son nativos conocedores de los estilos musicales y dancísticos propios de la región del Pacifico sur, quienes presentarán una propuesta estética, en el escenario y el vestuario, acorde al mensaje de ancestralidad, dinastía y realeza musical que busca mostrar el colectivo.

Faustina Orobio

Cantora de música tradicional de la costa del Pacífico sur, nacida en Guapi, Cauca. Fue criada en una familia que estaba profundamente conectada con las tradiciones musicales de la región. La música y la danza han sido parte integral de su vida cotidiana. Su trabajo ha sido dedicado a la preservación y difusión de la música tradicional de su región natal.

Orobio es reconocida por su habilidad excepcional en la interpretación de música tradicional del Pacífico, incluyendo ritmos y géneros como el currulao, el aguabajo y la marimba. Su voz potente y su habilidad para tocar la marimba y otros instrumentos tradicionales han sido fundamentales para la preservación de estas formas musicales.

Inés Granja

Inés Granja es una de las figuras más emblemáticas del folclor del Pacífico colombiano, especialmente conocida por su maestría en la interpretación de la marimba y su aporte a la preservación de la música tradicional afrocolombiana.

Nacida en Timbiquí, Cauca, es reconocida, no solo por su habilidad musical, sino también por su compromiso con la enseñanza y transmisión de conocimientos a las nuevas generaciones. A lo largo de su carrera, ha formado a jóvenes en las tradiciones musicales del Pacífico, asegurando que estas costumbres no se pierdan con el tiempo. Su música es una mezcla de ritmos afrodescendientes y cantos que evocan las historias, la resistencia y la espiritualidad de su pueblo.

Emeterio Balanta

Emeterio Balanta es compositor, intérprete, maestro y líder cultural que ha influido en varias generaciones de jóvenes artistas del Pacífico. Su música se caracteriza por las historias que narra en sus canciones sobre la vida cotidiana, la naturaleza y la resistencia de las comunidades afrodescendientes, arraigada a las vivencias y la espiritualidad de su pueblo, por las cuales transmite la riqueza cultural de esta región.

Su legado trasciende la música, ya que ha trabajado incansablemente para fortalecer el sentido de identidad y comunidad a través del arte. Su contribución a la cultura del Pacífico colombiano es invaluable y su música sigue siendo una fuente de inspiración y orgullo para todos aquellos que buscan conectar con sus raíces.