Cada vez son más los niños, jóvenes y adultos alrededor del mundo que se aficionan por los videojuegos, en un fenómeno al que Colombia no es ajena.
Sin embargo, más allá de ser una actividad lúdica, la creación de estos juegos ayuda a potenciar algunas de las habilidades para la vida, que el World Economic Forum (WEF) considera fundamentales para el futuro, como la resolución de problemas, la toma de decisiones, el pensamiento crítico y la empatía.
EL NUEVO SIGLO consultó a María del Mar Vélez, fundadora y CEO de Crack the Code, quien detalló los cinco beneficios que se generan a través de la creación de videojuegos.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cuál es la edad recomendada para iniciar en el mundo de los videojuegos?
MARÍA DEL MAR VÉLEZ: Una edad aceptable para iniciar es entre seis y ocho años, siempre con títulos acordes a la edad de los niños y siempre buscando que sean videojuegos que aporten algo educativo. Hoy en día hay apps lúdicas y divertidas que, a través del juego, buscan desarrollar habilidades en sus usuarios. Recomendamos este tipo de actividades antes que simplemente jugar videojuegos.
ENS: ¿Cuál es el perfil de los gamers?
MMV: En líneas generales, un gamer suele ser alguien muy involucrado con la cultura de los videojuegos, los eventos sobre este tema, la tecnología detrás de los títulos y las comunidades que se forman con otros gamers. Todos estos son aspectos muy positivos que dan a los niños posibilidades de socializar, explorar sus habilidades digitales y reforzar algunas destrezas que reciben aportes de los juegos a los que juegan. Sin embargo, al margen de eso, recordemos que los niños dependen de sus padres para que su vida como gamers esté correctamente equilibrada con otros ámbitos como el académico, el de la actividad física, el familiar y otros que también forman parte de su desarrollo.
ENS: ¿Cómo hacer para que no se convierta en una adicción en niños y jóvenes?
MMV: La adicción o el consumo excesivo de videojuegos se evitan a través del manejo que los padres establecen respecto a los horarios. Es importante que los padres eduquen a sus hijos respecto al balance y el uso responsable de la tecnología. La tecnología no es solo para jugar y consumir, se puede utilizar para crear y desarrollar habilidades claves.
ENS: En Colombia hay una tendencia de la incursión de las mujeres en este mundo, ¿a qué se debe esto?
MMV: Esto podría deberse a que los tiempos cambian y algunas brechas de género van recortándose. Eso es sintomático para un país como Colombia, que va perfilándose positivamente dentro de la industria tech. Que las niñas jueguen más videojuegos puede ser tanto causa como consecuencia de que las mujeres están acercándose cada vez más a las áreas STEM y la tecnología.
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ENS: ¿Cuáles son esos cinco beneficios de aprender a crear videojuegos en la niñez y adolescencia?
MMV: Capacidad de planificación: como en todo proyecto, el primer paso es la creación de un plan de acción, donde el desarrollador plasma los puntos importantes y cómo se conectan entre sí. Es importante recordar que en los videojuegos hay tiempos específicos para desarrollar cada acción, por lo que es mejor llevar un cronograma para que el tiempo de realización no sea tan extenso.
Generar empatía: es uno de los beneficios más importantes, ya que para desarrollar el videojuego, el creador se debe poner en el lugar del protagonista, entenderlo a profundidad y evaluar qué cosas le pueden gustar o no a su personaje.
Toma de decisiones y resolución de problemas: al momento de desarrollar un videojuego se debe elegir constantemente lo mejor para que dicho proyecto cuente con una trama interesante y lógica, así como personajes memorables. También nos podemos encontrar con desafíos para los que debemos encontrar una solución.
Desarrollo de la creatividad: crear historias, retos y personajes que sean originales y atractivos para nuestros jugadores permite trabajar la creatividad a través del arte y el lenguaje (títulos, conversaciones, nombres, etc.).
Incremento del pensamiento lógico y deductivo: la programación de videojuegos requiere de un pensamiento matemático y lógico para que todo funcione en relación a las normas de juego interpuestos.