Esta obra es una reflexión sobre la subordinación que tiene el hombre frente al mismo hombre y sus prejuicios.
Encontrar la libertad en un mundo sumergido en las apariencias y los prejuicios es algo complejo y casi utópico, esta difícil situación se manifiesta en la obra Grecia Negra, la zorra y las uvas, mediante la cual el público podrá hacer una reflexión sobre la esclavitud que tiene el hombre con la sociedad.
En pleno siglo XXI ¿será que todos seguimos siendo esclavos de la misma sociedad? Es una pregunta perspicaz y aguda, que bien vale la pena ser reflexionada. Bajo la dirección general del dramaturgo Andrés Midón y con la participación de un destacado elenco, se estrena este montaje teatral el 19 de este mes a las 8:00 p.m. en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán, con entrada gratuita. El evento cuenta con el apoyo de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte.
Esta puesta en escena se enmarca en el 18 Festival de Cultura Negra de Bogotá. Es un homenaje a la cultura negra y a los 'afrobogotanos' en el Año Internacional de la Afrodescendencia.
La Fundación Yambambó será la encargada de la representación que busca reintegrar los derechos de la comunidad afro, pero que también quiere mostrar un espejo de la sociedad de hoy, en la cual la doble moral, la mojigatería y los estereotipos son el pan de cada día, una situación que generó esclavitud y dependencia del hombre con el mismo hombre, con lo material y lo superficial.
Grecia Antigua y las negritudes
La ascendencia africana en los primeros filósofos griegos es fácilmente identificable en todos ellos; igualmente las esculturas griegas tienen grandes características afro en sus perfiles y cuerpos de los negros fulas (superiores en inteligencia y en belleza física; los hombres son buenos guerreros e industriosos, poco asimilables).
La locación étnica de los fulas está en Senegal (África). Incluso, el historiador cubano Pichardo los llamaba mandingas, aunque se consideran provenientes de pueblos distintos. Los griegos viven entre los mandingas por derecho de conquista y han contribuido a la formación de pueblos mestizos, como los torodos, los kasonkés, etc.
Algunos hallazgos arqueológicos encontrados en Creta y Sudán indican la unidad en el tipo de población negra de ambos lugares. Estos hallazgos parecen reforzar la teoría de que grupos de la población negra que ocuparon las costas del Mediterráneo se establecieron en la isla de Creta. La sociedad que allí se desarrolló estaba íntimamente relacionada con la cultura egipcia, con quienes comerciaban y se relacionaban permanentemente.
Hacia el año 1.400 a.C., la isla de Creta fue invadida por tribus bárbaras del norte de Grecia. Puede que esta sea la razón por la que los primitivos griegos eran llamados etíopes por otros pueblos vecinos.
Grecia Negra... La zorra y las uvas" es la historia de una familia negra aristocrática en la Grecia Antigua (Samos), dotados con sus propios esclavos. A lo largo de la obra se revela cómo todos los personajes son esclavos de la propia sociedad, donde un hombre esclavo (Esopo), tullido y horriblemente feo pero inteligente y bello de alma, ama con pasión y va más allá de las bajezas humanas. Esopo demuestra, por medio de sus fábulas y reflexiones, que el hombre y la mujer pueden y deben elegir su destino para encontrarse a través de su propia libertad interna y la dignidad para conseguirla.
Las fábulas que recrea la obra llevarán al público a escuchar una polimería de voces de diferentes continentes e idiomas, desde las más remotas épocas hasta nuestros días. Estas voces preguntan: ¿qué estamos haciendo de nuestra vida y de nuestro mundo?
Muchos contrastes y diferencias separan y distinguen el mundo antiguo del mundo moderno, pero ninguno iguala con tanto relieve como la existencia normal y general de la esclavitud que existe tanto ayer como hoy en sus diferentes variantes y características