Papás, clave en proceso de prematuros | El Nuevo Siglo
Martes, 11 de Noviembre de 2014

Cada año 15 millones de bebés pretérmino nacen en el mundo, lo que corresponde al 11.1% de todos los nacimientos, según datos de la Organización Mundial de la Salud. Y, en Colombia, de acuerdo con cifras de la Asociación Colombiana de Neonatología, 12 de cada mil nacimientos mueren a causa de la prematurez.

Y, aunque para estos nacidos antes de tiempo la atención médica inicial está  en los cuidados que reciben la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatal (UCI neonatal), profesionales de la salud propenden por unas prácticas más humanas y, sobre todo, con la participación activa de los padres.

El próximo lunes se celebra el Día Mundial de la Prematurez, fecha estipulada por la Organización Mundial de la Salud para alertar a la comunidad sobre esta situación como la primera causa de muerte entre los bebés recién nacidos de todo el mundo.

 “Un parto prematuro no es planeado, toma de forma desprevenida a la madre y al bebé. El recién nacido es el más afectado porque sus órganos no están totalmente maduros, su entorno representa una amenaza y se ha separado de su madre, rompiendo el primer vínculo materno infantil”, explica el doctor  José María Solano, vicepresidente de la Asociación Colombiana de Neonatología.

Por eso especialistas en neonatología, ginecología y pediatría de la Asociación Colombiana de Neonatología  (Ascon) y la Fundación Santa Fe de Bogotá se reunieron en alianza para construir una Guía de Atención a la Prematurez para Padres, con recomendaciones de expertos para mejorar la atención de esta condición en el país.

Esta Guía está dirigida a padres de familia de bebés que han nacido antes de tiempo; sin embargo, también llama la atención de médicos especialistas en el tema de prematurez, para que la atención y el tratamiento de los pacientes se haga cada vez de manera más humana, e involucre a todos los actores del proceso (padres, cuidadores, médicos, profesionales de la salud).

 El objetivo de humanizar la atención de los bebés pretérmino es centrar las actividades de los profesionales de la salud en el paciente y su familia. Esto afirmó el doctor Paolo Manzoni, Neonatólogo del Hospital Santa Anna en Turín y coordinador de la Red Italiana para el estudio de las infecciones neonatales, quien resalta la importancia de “empoderar a los padres en el cuidado del niño prematuro para que sean partícipes del tratamiento. Por ejemplo, mi labor como médico inicia educando a la madre para que no sienta culpa por la prematurez”.

En este sentido, la Red de Apoyo a la Prematurez presenta a continuación las siete recomendaciones de su Guía de Atención a la Prematurez para Padres:

 1.   El bebé prematuro debe recibir una atención humanizada

Humanizar es un asunto ético, que tiene que ver con los valores que conducen nuestra conducta en el ámbito de la salud. Desde el embarazo la madre debe estar asesorada por un profesional de la salud, con el objetivo de que el bebé prematuro reciba la mejor atención. Por esta razón, los médicos y profesionales de la salud en centros hospitalarios no sólo deben garantizar la supervivencia del recién nacido, sino también el cuidado integral, poniéndose en los zapatos de los pacientes y sus padres, entendiendo el momento que atraviesan y ofreciendo confort al bebé y su familia.

2.   La unidad de neonatología es clave para la supervivencia del bebé prematuro

Debido a la inmadurez del bebé prematuro, es necesario que éste pase un tiempo en la unidad neonatal. Por esta razón, es fundamental que los padres de familia identifiquen, según su esquema de salud, cuáles son las que cuentan con personal capacitado, instalaciones y equipos adecuados, que permitirán garantizar la salud del recién nacido. Se calcula que en Colombia existen aproximadamente 210 unidades neonatales.

3.   Prepararse para ser dados de alta

Es necesario que los padres de familia estén preparados para ser dados de alta, ya que el bebé prematuro está constantemente en riesgo de enfermarse. En los centros hospitalarios los profesionales de la salud están en la capacidad de entrenar a la familia sobre cuáles deben ser los cuidados que el recién nacido requiere en el hogar. 

4.   Los programas integrales de seguimiento son fundamentales

En nuestro país, la intervención Canguro es un complemento del cuidado neonatal dirigido a toda la población colombiana. De acuerdo con el Ministerio de Salud, es necesario que el personal de las IPS tenga la capacitación adecuada para el tratamiento integral y flexible de bebés prematuros durante sus primeros días de vida. De esta manera, los recién nacidos y sus familias podrían tener mayor participación en los programas de seguimiento que se llevan a cabo en todo el país.

5.   Las vacunas también son para los bebés prematuros

Los bebés prematuros deben recibir las mismas vacunas que un recién nacido a término, a partir de los 2 kilos de peso. El esquema de vacunación actual está ajustado según la edad cronológica del neonato.

6.   Ojo con las complicaciones respiratorias

La infección por el Virus Sincital Respiratorio es una de las causas más frecuentes de enfermedades respiratorias en niños menores de 2 años, especialmente en prematuros. Se presenta con mayor frecuencia en los meses invernales y constituye un problema importante para la salud pública. La infección respiratoria puede prevenirse evitando la exposición a cambios climáticos, tomando medidas de control como lavado de manos y uso de tapabocas por parte del  personal que brinda los cuidados e inmunoprofilaxis pasiva (administración de anticuerpos específicos contra una enfermedad). Una vez establecida la enfermedad el tratamiento es solo sintomático.

7.   El cuidado de los bebés prematuros es compromiso de todos

Cada uno de los miembros de la familia debe estar pendientes del embarazo de la madre, así como del nacimiento del bebé prematuro. Sin embargo, los especialistas y profesionales de la salud deben ofrecer instrucciones claras y educar correctamente a los padres sobre la mejor forma de cuidar a su recién nacido y mejorar sus tasas de supervivencia y desarrollo.

“La recomendación más importante para los padres es que sigan al pie de la letra las instrucciones de los especialistas durante los programas de seguimiento.” Aseguró el doctor Solano, al explicar que la causa más común de reingreso de  bebés a las instituciones hospitalarias, es por   enfermedades respiratorias que no se monitorean adecuadamente. Adicionalmente, para el doctor Juan Gabriel Piñeros, médico pediatra, jefe del Departamento de Neonatología de la Fundación Santa Fe de Bogotá, aproximadamente el 50% de los bebés prematuros sufren de algún tipo de enfermedad respiratoria, siendo el Virus Sincitial Respiratorio (VSR) la causa más común.

 Esta Guía apoya el tratamiento para los bebés prematuros, el Programa Canguro y empoderar a los papás y familiares en todo el proceso para mejorar el tratamiento.