“VICEVERSA” es la exhibición con la que culminará la celebración de los 60 años del Museo de Arte Moderno de Bogotá, Mambo, el cual surge tras el análisis profundo y la revisión contemporánea de la colección del lugar.
Esta presentación sugiere interpretaciones alternas que desafían las narrativas visuales convencionales adoptando un enfoque “a la inversa” al tiempo que propone conexiones, contrapuntos visuales y conceptuales inusuales.
De acuerdo con Eugenio Viola, curador y jefe del Mambo, “Viceversa”, a diferencia de las exposiciones de corte tradicional, no está basada en una temática, grupo o periodo histórico específico. Por el contrario, presenta más de 400 obras de artistas de diferentes generaciones, que se exhiben a lo largo de los cuatro pisos del Museo como una sinfonía que se encuentra bajo los ejes de: Memoria, Identidad y Disonancias.
"Memoria" examina la base social y cultural de la colección, destacando preocupaciones temáticas que se repiten a lo largo de diferentes géneros y periodos, convirtiendo el análisis del pasado en una herramienta crítica para abordar el presente. Por su parte, la sección "Identidad" explora la singularidad de la colección del Museo, arraigada en su diversidad y conectada a su contexto social y cultural, lo que ha influido en su historia y desarrollo.
Por último, la sección "Disonancias" que introduce perspectivas alternativas e interpretaciones que exploran cuestiones sociales, como la raza, el género, la identidad y las crisis políticas, desafiando las narrativas culturales predominantes al ofrecer una crítica transcultural a través de obras que plantean contrapuntos, preguntas retóricas y declaraciones revisionistas. De esta forma, la exposición enmarca al Museo como un organismo vivo, lleno de relaciones simbólicas, historias por contar y posibilidades por configurar.
Temas sociales
Eugenio Viola afirma que “Viceversa” muestra una colección de obras que se alejan de las convenciones tradicionales de la historia del arte tal como la conocemos, en lugar de eso, enlaza diversas historias de manera intencionada. Se adhiere a una proporción no sistemática y anárquica: la colección del museo se presenta como un proceso abierto que busca una reescritura crítica y propone una forma de exhibirse como una diversidad de experiencias, funcionando como un laboratorio de investigación imaginativa y producción".
Además, la exposición cuenta con tres proyectos de sitio específico de artistas de procedencias geográficas e inquietudes diferentes, y que ofrecen nuevas perspectivas sobre la historia, la misión y la agencia del Museo: Genealogía de una colección de la argentina Adriana Bustos; Saludos desde Bogotá del italiano Giuseppe Stampone; y Los museos también lloran (y harto) del colombiano Juan Uribe.
De esta forma, “Viceversa” se trata de una experiencia visual que va más allá del pasado y el presente, de lo local y lo internacional, presenta una constelación de obras que se conectan con un amplio abanico de narraciones. Reconociendo la historia y el legado del Museo, la exposición busca desafiar la convención narrativa de la historia del arte, mientras presenta la colección como un proceso abierto a la reescritura crítica conjunta y contextualizada que abra la posibilidad a una multiplicidad de experiencias, investigaciones y producciones artísticas como parte de la constante construcción del arte moderno y contemporáneo.
Obras seleccionadas
En “Viceversa” los visitantes podrán encontrar obras que sentaron las bases de la Colección Mambo, como “Tumba n.° 11” (1963), de Juan Antonio Roda; “Violencia en la selva” (1953), de Ignacio Gómez Jaramillo; “Estirpe” (1967), de Beatriz González o “Nuestra señora de Fátima” (1963), de Fernando Botero.
De igual manera podrán encontrar hitos históricos como “Atrio y nave central” (1996), de José Alejandro Restrepo; “Bocagrande 1” (1976), de Alicia Barney o “Qué hacen ellas mientras ellos trabajan” (1970), de Clemencia Lucena; al igual que adquisiciones recientes como “Recipiente de la transmutación” (2009), de Adriana Marmorek o “Las frecuencias que me hacen” (2017), de María José Arjona. También se encuentran obras de varios artistas internacionales como Jesús Rafael Soto, René Magritte, Claes Oldenburg, Andy Warhol, Leonora Carrington, Gertrude (Gego) Goldschmidt, entre muchos otros.
En resumen, la historia del Mambo se remonta al año 1963, cuando fue fundado. Este 2023 se encuentra celebrando su aniversario número 60, por lo que, el Museo de Arte Moderno se ha constituido en estas 6 décadas como una institución multicultural, dinámica e inclusiva pionera en Colombia. Su objetivo es fomentar el arte y la cultura como herramientas fundamentales para el desarrollo del país. De esta manera, sus exposiciones y la programación educativa están concebidas para promover el debate, despertar interés, desarrollar la imaginación y estimular progresos y cambios en el contexto sociocultural colombiano.