Se acabó el sueño de los mexicanos. Vuelve el “Fuera Osorio”, duró poco el romance del técnico colombiano con los manitos, cuatro partidos exactamente fue lo aguantó la gran hazaña de la que todos hablaban.
Nadie nunca va a poder negar lo que realizó Osorio con la selección mexicana al derrotar uno por cero a Alemania, quizá la peor selección teutona de la historia, luego se le complicó el camino con Corea del Sur y ante Suecia fue la debacle, perdió tres por cero, la derrota no fue otra cosa diferente que la antesala de lo que sería el partido de octavos.
No vamos a demeritar lo realizado por México. Durante los primeros 25 minutos hicieron un trabajo impecable en defensa, anularon a Neymar, Coutinho tampoco pudo hacer nada, Gabriel Jesús tuvo que sacar la casta y echarse el equipo al hombro por momentos, pero después vinieron los problemas. Brasil, que era el equipo con mejor posesión del campeonato le entrego la pelota a México, que era uno de los peores conjuntos atacando en jugada armada; ellos habían hecho goles pero de contragolpe en ningún momento tuvieron la necesidad de armar un ataque en conjunto.
Como a Osorio le gustan las estadísticas y los números acá van algunos. México era uno de los mejores equipos defendiendo del campeonato, al mismo tiempo uno de los que menos opciones generaban, su tiempo en ataque no superaba los 10 segundos, sus llegadas con más peligro que terminaron en gol fueron todas de contra ataque, potencia y velocidad, pero de generación nada.
Ahora no todo es culpa de Osorio, si bien se equivocó en los cambios, sacrificó oficio defensivo al sacar a Rafa Márquez que era el único que paraba a Neymar por parar el avance por banda derecha, sin embargo Miguel Layun que era el encargado de cubrir la banda no logró hacerlo, no todo es culpa del risaraldense, no podía pedirle a jugadores que nunca se han caracterizado por generar fútbol de toque que lo hicieran. Brasil les puso en bandeja de oro el partido pero la incapacidad futbolística de los mexicanos les cobró la clasificación.
Dicen que Osorio tiene un preacuerdo con la Federación de Fútbol, no pongo en duda sus capacidades, demostró en México que puede hacer cosas, el problema del “Profe” Osorio es su amiguismo con el periodismo, todos sus allegados están pidiéndolo, todos quieren que llegue y seguro va a llegar, pero qué daño le va a hacer a la Selección que el técnico tenga que rendirle cuentas a sus amigos periodistas, nada parecido a lo que hizo Pekerman que aisló a la Selección y la protegió. Las cosas van a cambiar de seguro si llega Osorio: Por ahora lo único cierto es que con México FRACASO -a él lo contrataron para llegar al quinto partido, no al cuarto-, su era en el país manito concluyó.