Buscan que el país entre al listado de naciones que objetan esta práctica en la explotación de petróleo y otros combustibles

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Un proyecto de ley para evitar que en Colombia no se apruebe ni una licencia más en torno a la práctica de explotación hidráulica del subsuelo conocida como fracking, fue radicada en el Congreso por la Asociación Colombia Libre de Fracking. Esta práctica tiene como objetivo la explotación de gas y petróleo de los denominados yacimientos no convencionales (YCM).

La iniciativa que comienza su trámite en el Legislativo es promovida por expertos de todo el país, especialmente en pro del apoyo a la salud y al bienestar de las comunidades –según lo señalaron -. Ellos se muestran optimistas frente a que su llamado tenga eco.

Los proponentes de la iniciativa se basan en experiencias de países como Francia y Alemania, además de seis estados en Estados Unidos, donde ya se prohibió esta tecnología, según la experiencia del coordinador de Alianza Colombia Libre de Fracking, Carlos Andrés Santiago, quien aseguró que en la actualidad hay 48 zonas del país donde se quiere adelantar este tipo de explotación y cinco licencias para este fin ya están en trámite.

“En este momento existen 48 bloques disponibles, esto significa, lugares donde se tiene la proyección de desarrollar explotaciones de fracking, y hay licencias en trámite principalmente para  el Valle del Magdalena medio y el Centro del departamento del Cesar, entre las poblaciones de Chiriguaná y La Jagua. Una ya se otorgó a la Drummond”, aseguró el activista ambiental.

 

No se debe acabar el fracking

 

Sin embargo, alrededor del tema existen voces que no creen que acabar taxativamente con esta práctica sea la solución, porque a su juicio, Colombia ha avanzado en el tema normativo y está suficientemente reglamentada.

 

Así lo dejó ver el exministro de minas y energía, Amylkar Acosta, quien recalca que existe una normatividad que contempla suficientemente los riesgos del fracking y de otras formas de explotación, por lo tanto en su criterio, el objetivo deber ser respetar la mismas con precisión y responsabilidad.

 

Al analizar el tema aclaró que “no se puede excluir la utilización de una tecnología”, ya que cada una se adecúa a la necesidad del recurso, para el caso del fracking se requiere la misma para extraer el hidrocarburo que se encuentra atrapado dentro de una roca con rasgos particulares.

 

Cabe anotar que en Colombia se realizó durante dos años un ciclo de formación sobre el fracking para conocer experiencias de otros países sobre el particular.

Normas expedidas

 

Dentro de las normas expedidas por diferentes autoridades para el manejo del tema se encuentran:

MME: Resolución #180742.  Mayo 16/2012

Decreto 3004, Dic. 26 de 2013

MADS: Resolución 0421.  Marzo de 2014

ANH: Acuerdo 03.  Marzo 26 de 2014

MME: Resolución 90341. Marzo 27 de 2014

Este tema ha generado un intenso debate en el país especialmente entre gobierno y ambientalistas. Desde el Ministerio de Medio Ambiente, el jefe de la cartera, Luis Gilberto Murillo, aseguró que la apropiación del fracking podría hacerse para el 2021, cuando ya se logre fortalecer los controles alrededor del mismo. 

 

Hacia el futuro

 

Ahora cuando inicia un nuevo gobierno, se especula sobre el futuro del debate, pero retomando las palabras del presidente electo Iván Duque durante su campaña presidencial, puede resaltarse que él se mostró muy analítico respecto al tema poniendo la problemática en una balanza económica y ambiental.

Durante varias de sus intervenciones el mandatario electo señaló que el país no puede alejarse de la competitividad internacional, al tiempo que recalcó que debe darse una transición paulatina hacia la menor utilización de recursos fósiles. Por eso insistió en que no habrá fracking.

“Tenemos unos ecosistemas diversos y complejos, acuíferos y subterráneos de enorme riqueza y unos riesgos de mayor sismicidad por los tipos de suelos que tenemos. Por eso he dicho que en Colombia no se hará fracking afectando algunos de sus elementos”, apuntó el Presidente electo, en una de sus alocuciones en campaña.

 

Más yacimientos

 

EL NUEVO SIGLO intentó comunicarse con la Asociación Colombiana de Petróleo (ACP) para conocer su posición frente al tema, pero su presidente Francisco Lloreda, se encuentra fuera del país. Se conoció a su vez que en un primer momento el gremio iba a expedir un comunicado de prensa a propósito del proyecto de ley radicado, pero trascendió luego que la entidad ya no lo iba a enviar. 

Sin embargo, en otras oportunidades Lloreda ha señalado que dada la ostensible pérdida de reservas petroleras, esta tecnología se hace necesaria para encontrar más yacimientos, porque según ha explicado, el crudo se encuentra a gran profundidad de la tierra. Añadió que cerca de 22 países en el mundo aplican esta tecnología.

Lo cierto es que tras ocho años de intenso debate, donde otras asociaciones como el Movimiento Ambientalista Colombiano han pedido aplazar la práctica del fracking en pro de la protección de fuentes hídricas, el debate sigue abierto a la espera de conocer el desarrollo que tendrá ahora en el Legislativo.

Las cifras son contundentes, Colombia puede contar con reservas petroleras a cinco años y aseguraría gas para once años más. Por eso se hace inminente hallar más reservas que según los expertos solo se encuentran en el subsuelo en formaciones rocosas que exigen la utilización del fracking.

 

Hasta el momento no se ha conocido otro tipo de tecnología que permita encontrar yacimientos productivos y el único remedio sería importar. Esta es la parte más sensible del debate dado que Colombia tiene reservas, pero la explotación de las mismas es la que genera controversias.

 

Estudios de ambas partes, tanto los seguidores como detractores, se basan en la experiencia internacional para apoyar sus tesis, pero en el ámbito de otros países la experiencia a favor y en contra ha sido compartida. Pero en lo que ambas partes coinciden, por lo menos a nivel discursivo, es en el cuidado que se debe tener con el medio ambiente.