BCE prevé rebaja de crecimiento en 2022 por guerra en Ucrania | El Nuevo Siglo
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, prevé días difíciles para la economía de la eurozona.
AFP
Jueves, 10 de Marzo de 2022
Redacción Economía

El Banco Central Europeo rebajó en 0,5% su previsión de crecimiento del PIB de la eurozona en 2022, al tiempo que elevó en casi 2% su previsión de inflación debido al impacto económico de la guerra en Ucrania.

Este conflicto "tendrá un impacto significativo en la actividad económica y en la inflación, con el aumento de los precios de la energía y de las materias primas, la perturbación del comercio internacional y la confianza", dijo la presidenta del BCE, Christine Lagarde.

Los riesgos para la economía de la eurozona "han aumentado significativamente" debido al conflicto, añadió.

Los expertos del BCE prevén que el PIB aumente un 3,7% este año, frente al 4,2% de las últimas proyecciones, mientras que la subida de precios alcanzaría el 5,1%, frente al 3,2% previsto hasta ahora.

"Todavía se espera que la economía de la eurozona crezca con fuerza en 2022, pero a un ritmo más lento de lo que se esperaba antes de que empezara la guerra", dijo Lagarde. 

Los precios de la energía, que se dispararon un 31,7% en febrero, siguen impulsando la inflación, según la institución. 

La energía "sigue siendo la principal razón de esta elevada tasa de inflación y está haciendo subir los precios en muchos otros sectores", afirmó Lagarde.

Los precios, ya afectados por la elevada demanda tras la pandemia y la falta de oferta, se ven ahora presionados al alza por la guerra de Ucrania porque Rusia es uno de los principales proveedores de energía de la Unión Europea.



Opciones

Con un pin azul y amarillo -los colores de la bandera de Ucrania- en la solapa, Lagarde dijo que la institución con sede en Fráncfort "mantendrá abiertas todas las opciones" para proteger a la economía del impacto de la guerra y de los elevados precios de la energía. 

En su reunión, los responsables del BCE confirmaron el fin, este mes, del programa de compra masiva de bonos de emergencia para la pandemia (PEPP). 

Sin embargo, el BCE sorprendió a los observadores al anunciar que aceleraría la reducción del programa de compra de bonos, anterior a la pandemia, que ahora debería terminar en el tercer trimestre de 2022. 

Por otra parte, el BCE mantuvo sus principales tasas de interés en su nivel más bajo de la historia, en particular el tipo negativo del 0,50% que grava una parte de la liquidez bancaria no distribuida como crédito a la economía.

La institución retrasó el inicio de una posible subida de las tasas de interés, afirmando que se produciría "en algún momento" después del final del programa de compra de activos. 

El "horizonte temporal no es lo que más va a importar", dijo Lagarde, añadiendo que la subida podría producirse "la semana siguiente" o "meses después", y que los nuevos datos económicos serían el factor decisivo. 

"Esta decisión da al banco central la máxima flexibilidad y mantiene abierta la opción de una subida de tipos antes de fin de año", dijo Carsten Brzeski, jefe de macroeconomía del banco ING. 

Hasta ahora, el BCE tenía previsto realizar compras netas de 40 mil millones de euros por mes en el segundo trimestre de 2022, que bajarían a 30 mil millones en el tercer trimestre y se situarían en 20 mil millones desde octubre durante tanto tiempo como fuera necesario.

Sin embargo, las perspectivas macroeconómicas han hecho que el BCE cambie este plan. Según ha comunicado, en abril se realizarán compras netas por valor de 40 mil millones de euros, que bajarán a 30 mil millones de euros en mayo y 20 mil millones en junio. Tras esa fecha, el BCE ha abierto la puerta a finalizar las compras netas de activos al amparo del programa de compra de activos públicos (APP, por sus siglas en inglés) en el tercer trimestre, siempre que los datos apoyen las previsiones a medio plazo de inflación.