Los mayores riesgos tienen que ver con los préstamos corporativos como los otorgados a Odebrecht

Con una mejora notable en sus notas, calificadoras como Moody's cambiaron la perspectiva del sistema bancario colombiano. En efecto, y debido a sus positivas condiciones operativas la firma cambió de negativa a estable de las entidades crediticias que durante este año han demostrado fortaleza no solo en sus utilidades sino en sus activos y patrimonio.

Señala Moody’s que con una macroeconomía más robusta, suscripción prudente y crecimiento moderado de préstamos ayudará a estabilizar la calidad de los activos de los bancos y los colchones de capital.

Señala que los bancos colombianos siguen estando expuestos a préstamos corporativos problemáticos y condiciones operativas volátiles en América Central.

Ante la mejoría en sus condiciones, la perspectiva para el sistema bancario colombiano fue cambiada a estable desde negativa, dice Moody’s Investors Service en un nuevo informe.

Indica que un crecimiento más robusto de la economía, como se espera a corto plazo, impulsará mejores condiciones operativas en los próximos 12 a 18 meses, mientras que una suscripción prudente y un crecimiento de préstamos moderado ayudarán a estabilizar la calidad de activos y los colchones de capital de los bancos.

Los riesgos

Sostiene la firma que los bancos colombianos, no obstante, siguen expuestos a préstamos corporativos problemáticos y a los entornos operativos volátiles en Centroamérica que podrían eventualmente dañar sus resultados finales.

“Colombia está experimentando una recuperación económica, respaldada por mayor inversión privada y consumo que está compensando el bajo gasto público”, aseveró Diego Kashiwakura, vicepresidente senior y analista de Moody’s.

Asimismo agregó que “si bien las condiciones macroeconómicas favorecerán la calidad de los préstamos de consumo, los riesgos relacionados con altas concentraciones en deudores individuales y exposición a sistemas bancarios de Centroamérica siguen siendo una preocupación”.

Asegura que los niveles de capital aumentarán levemente y llegarán a aproximadamente 9% hacia finales de 2020, como resultado de menores pérdidas crediticias y un moderado crecimiento de activos ponderados por riesgo.

Los costos

Los costos crediticios estables ayudarán a mantener la rentabilidad, mientras que la capacidad de pago mejorada de los deudores mantendrá los costos crediticios bajo control, respaldando la rentabilidad. Sin embargo, la reciente tendencia positiva en el costo del crédito puede revertirse si los bancos reservan el resto de sus exposiciones aún materiales a conglomerados en problemas. Además, los ingresos por comisiones estables podrían verse perjudicados por la nueva legislación propuesta que prohibiría a los bancos cobrar por algunos servicios.

Mientras tanto, algunos bancos podrían ser multados o penalizados como resultado de investigaciones en torno al caso Odebrecht. Un crecimiento moderado de los préstamos ayudará a estabilizar los activos líquidos de los bancos colombianos y limitará sus necesidades de financiamiento en los próximos 12 a 18 meses, a pesar de que los depósitos minoristas siguen siendo su principal fuente de financiamiento, respaldando la rentabilidad.

Al mismo tiempo, los inversores institucionales, que representan aproximadamente el 70% del total de depósitos, exponen a los bancos a riesgos de concentración de los depositantes. No obstante, los esfuerzos de recuperación de la macroeconomía y la consolidación fiscal probablemente estabilizarán la carga de la deuda del Gobierno colombiano, fortaleciendo la capacidad del soberano de apoyar a los bancos si fuera necesario.