La actividad económica peruana se contrajo 0,55% en 2023, arrastrada por una recesión generada por una convulsión política y el fenómeno climático El Niño, señaló el jueves el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
"La producción nacional en el año 2023 registró una variación anual de -0,55%, con mayor incidencia a la baja por el resultado del sector manufactura y en menor medida por la disminución del sector construcción, financiero, telecomunicaciones, agropecuario y pesca", precisó el INEI en un reporte.
En diciembre, la economía se contrajo 0,74% con relación a igual mes de 2022, con lo que sumó siete meses de caídas a lo largo del año. En noviembre había crecido 0,29%.
En este contexto el gobierno sustituyó el martes al ministro de Economía y Finanzas, Alex Contreras, quien ejerció funciones desde diciembre de 2022.
La agricultura peruana registró en 2023 uno de sus peores años, castigada por El Niño, que derivó en un "menor nivel de superficie sembrada de los principales cultivos" en un contexto de lluvias intensas, o alternativamente sequías y heladas.
El sector agropecuario cayó 2,91% interanual, afectando a miles de campesinos de bajos ingresos.
La recesión, que se instaló en Perú en 2023, contrasta con la expansión del Producto Interno Bruto (PIB) de 2,68% en 2022.
El Banco Central corrigió a la baja en septiembre su proyección anual de crecimiento a 0,9%, en lugar del 3,4% previsto en enero.
En 2023 tuvieron "desempeño desfavorable los sectores Manufactura, Pesca, Financiero y Seguros, Telecomunicaciones, así como Construcción", matizó el INEI.
La inversión privada también se vio afectada en 2023 por más de dos meses de protestas y manifestaciones -con saldo de 49 muertes violentas incluyendo a un policía- contra la presidenta Dina Boluarte.