La principal empresa petrolera de Colombia, Ecopetrol, hace unos días había expresado su interés en adquirir activos de CrownRock, una compañía que pertenece a Occidental Petroleum. No obstante, la refinería señaló que no seguirá adelante con el proceso, debido a varias consideraciones estratégicas y financieras.
La compañía indicó que la decisión se dio luego de surtir el análisis y evaluación por parte de los órganos de administración, en una reunión que tuvo lugar el pasado 31 de julio.
Occidental Petroleum anunció que dicha decisión tuvo lugar después de que la empresa estadounidense informara el mes pasado que estaban en conversaciones para una posible venta de participaciones. “Ecopetrol tendrá la opción de optar por la Rodeo Midland Basin Joint Venture para adquirir los activos CrownRock", señaló.
Aunque la compra pudo haber sido beneficiosa desde un punto de vista operativo, al aumentar la producción en la Cuenca Pérmica, también presentaba riesgos significativos en términos de sostenibilidad financiera.
Además, la firma calificadora Moody's advirtió que financiar la adquisición a través de deuda podría debilitar las métricas crediticias de Ecopetrol, aumentando su relación deuda/Ebitda a aproximadamente 2.4x para finales de 2024, en comparación con 2.1x en 2023.
La junta directiva de Ecopetrol optó por priorizar el mantenimiento de métricas financieras saludables y evitar mayores presiones por gastos por intereses, dado el nivel actual de deuda de la empresa. Cabe señalar que CrownRock fue adquirida por Occidental Petroleum por aproximadamente 12,000 millones de dólares, lo que incluyó un pasivo, que se estima en alrededor de 1,200 millones de dólares.
La venta de CrownRock a Occidental no solo representa una oportunidad para la empresa compradora, sino que también permite a la compañía estadounidense gestionar mejor su carga de deuda.
Occidental planea financiar la adquisición en parte mediante 9.100 millones de dólares en nueva deuda y la emisión de acciones, lo que le permitirá reducir su propia carga financiera. Además, esta operación se traduce en un incremento significativo en la producción de petróleo, con expectativas de generar un flujo de caja libre de aproximadamente 1.000 millones de dólares en el primer año, dependiendo de los precios del petróleo.