La propuesta del senador Álvaro Uribe sobre subir el salario mínimo una vez y de manera "extraordinaria", no fue puesta sobre la mesa de Concertación Laboral

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En medio de un panorama incierto sobre la reforma pensional y laboral, y otra más ‘caliente’, como la reforma tributaria, el Gobierno decidió coger el toro por los cuernos y reunirse con los empresarios y trabajadores para ir perfilando lo que puede ser el incremento salarial para 2019.

Durante dos horas y media se llevó a cabo la primera reunión formal de este Gobierno con la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales. 

Tras el término de ese encuentro, la ministra de Trabajo, Alicia Arango, explicó que sobre la mesa aún no está el tema del aumento extraordinario del salario mínimo que propuso el senador Álvaro Uribe y agregó que el Ejecutivo estudia el impacto fiscal del mismo.

La iniciativa de Uribe, que todavía no se sabe si cuenta con el beneplácito del presidente Iván Duque, tiene con dolor de cabeza a los empresarios y creó una división en el ambiente sindical, pues para la Confederación General de Trabajadores (CGT) todo lo que sirva para incrementar el salario es bienvenido, pero para la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) “es una propuesta que busca distraer a los trabajadores con lo que se viene con la reforma tributaria, además el Presidente no requiere de facultades extraordinarias para decretar un aumento”.

De acuerdo con la ministra de Trabajo, Alicia Arango, “el tema del salario se debe discutir en todos los escenarios. Esta Comisión no es cerrada solo a lo que diga la propia Comisión sino que también está abierta a lo que propongan las otras fuerzas del país".

“Cualquier tipo de aumento al salario mínimo debe ser debatido y discutido en la comisión de políticas salariales”, agregó la jefe de cartera de Trabajo. 

Arango precisó que, "no han empezado las fechas de negociación del salario mínimo, eso es en diciembre. Esta reunión era de acercamiento y para decirles que se deben tratar por ejemplo los temas de la generación de empleo. No tenía que ver aún esta reunión con el salario mínimo".

Proyección

Sobre el incremento salarial para el próximo año, el director de Investigación de la Federación Colombiana de Gestión Humana (Acrip), Lorenzo Ruiz, afirmó que podría rondar el 4,24%

El directivo dijo que siguiendo las tendencias de las últimas investigaciones de salarios y con el panorama económico del país, la proyección apunta a que 2018 cerrará con una inflación cercana al 3,35%, por lo cual el aumento del salario mínimo podría estar en este porcentaje (4,25%).

De otra parte, informó que en el presente año los salarios en todos los sectores aumentaron en promedio un 5,45.

Las empresas que presentan los mejores salarios en el país son en su orden minas y energía, servicios públicos, financiero, químico y consumo.

Entre tanto, los salarios menos competitivos se presentan en hotelería y turismo, textil, confecciones y calzado y los empleados temporales.

Las mejores condiciones en materia de ingresos para los trabajadores se presentan en Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y en la provincia la situación es muy compleja. 

La propuesta

La presentación del proyecto de ley del senador Uribe para otorgarle facultades extraordinarias al presidente de incrementar el salario mínimo, ha despertado una pequeña tormenta de opiniones en el mundo económico. El indicador es la base para definir multas y sanciones. También funciona como un indicador para establecer el costo de vida en Colombia. 

Mario Valencia, de la Red de Justicia Tributaria sostiene que “la propuesta de Uribe es una falta de respeto a los casi 16 millones de personas en Colombia que ganan menos de $1.200.000, cuya capacidad de gasto se ha visto y seguirá siendo afectada por las reformas tributarias”.

“El proyecto del senador Uribe es una cortina de humo para esconder que en la reforma tributaria sí se va a afectar el bolsillo de los hogares por la vía de aumentar la base de productos gravados con IVA y el aumento del impuesto de renta.

Camilo Herrera, creador de la firma de investigación de mercado Raddar, aseguró que “el aumento de salario puede generar un aumento en el gasto, que puede ser un elemento importante de subida en la demanda, bajo la premisa de que solo 15% de los ocupados están vinculados al salario mínimo”. Y añadió que “el aumento del salario desmotiva la creación de ciertos empleos en un momento en el que se están creando muy pocos”.