Teniendo en cuenta los indicadores de inflación que ha tenido el país en los últimos meses, los mercados financieros esperan que el Índice de Precios al Consumidor (IPC), no supere el 3,37% este año.
Esta percepción se desprende de la última encuesta realizada por el Banco de la República entre los inversionistas, en la que se destaca que en el panorama no existen riesgos que puedan impedir que se concrete la meta.
Teniendo en cuenta otros informes privados, solo un comportamiento al alza del precio del dólar o de la tasa de cambio podría complicar la meta inicial prevista por el emisor de entre 2% y 4% para este año con un promedio de 3%.
En general, las expectativas de inflación de cierre de año y las de mayor plazo se han estabilizado entre 30 y 37 puntos básicos por encima de la meta de 3% del Banco de la República en los últimos tres meses, luego de presentar una fuerte tendencia bajista durante la mayor parte de 2017 y el primer trimestre de 2018.
En julio la cifra mensual de inflación se ubicó en -0,13%, siendo la más baja registrada en este mes durante los últimos quince años, mientras que hace un año se ubicó en -0,05%. Por su parte, la variación del grupo Alimentos en -0,56% fue la más baja registrada en los últimos catorce años cuando se ubicó en -0,70%, en 2004.
Acumulado
Entre enero y julio de 2018 la inflación se ubica en 2,34%, mientras que la interanual o de los últimos doce meses es de 3,12%.
Por su parte, las expectativas de inflación sin alimentos presentaron incrementos relativamente importantes, a pesar de que este indicador salió en línea con las estimaciones del consenso.
Cabe recordar que el IPC mensual de alimentos fue negativo de manera consecutiva entre junio 2017 y octubre 2017, mientras que la mayoría de estos datos estuvieron por debajo de sus promedios de los últimos tres, cinco y diez años (para cada respectivo mes), con la única excepción siendo agosto.
Dicho esto, vale la pena mencionar que el grupo de alimentos ha presentado avances por debajo de sus promedios en la mayoría de los meses de 2018, por lo que, si bien se espera una aceleración de la inflación anual de este grupo en los próximos meses, esta no sería tan significativa como para impulsar la inflación total hacia la parte alta del rango meta al cierre de 2018.
Asimismo y dado el escenario de una actividad económica en recuperación (aunque creciendo por debajo de su potencial), y de una inflación relativamente estable en los próximos meses, pero con algunos riesgos al alza (potencial depreciación del peso y precios de alimentos), la tasa de interés del Banco de la República se mantendría estable en 4,25% por un período de tiempo considerable. De hecho, el consenso del mercado espera que la tasa de referencia se mantenga en 4,25% en lo que resta del año, mientras que proyecta un aumento 25 puntos básicos para marzo de 2019.
En una entrevista reciente, el gerente del emisor, Juan José Echavarría, mencionó que le parece “extraño” que el mercado esté viendo incrementos en la tasa a principios del año entrante, pues espera que se mantengan quietas “por un largo rato”.