¿Por qué cada vez más empresarios colombianos toman la difícil decisión de cerrar sus negocios, venderlos a precios muy bajos y buscar oportunidades en otros países, en donde tienen que empezar de cero, muchas veces en medio del anonimato y la ilegalidad, sin poder trabajar formalmente, enfrentándose a humillaciones y a aceptar empleos precarios, donde son explotados de manera directa y sin compasión? 
Este es uno de los interrogantes que siempre se ha planteado el destacado empresario del sector de la seguridad, Edison Manuel Carvajal Méndez, quien afirma que “la principal causa, es la grave situación económica que afronta el país. La inflación incrementa de manera abismal cada día, los impuestos no dan tregua y hubo un aumento exagerado en el precio del combustible. A lo que se suman la devaluación del peso colombiano, la falta de empleo y la importación de productos que se pueden producir en el país, lo que ha afectado de manera directa y despiadada al comercio nacional”.
Sostiene Carvajal, que “otra razón es la curiosidad de tratar de emprender en países desarrollados, ya que se tiene el pensamiento de que crear empresa en otros lugares es algo fácil, gracias al apoyo gubernamental y a la rentabilidad. Esto suena sencillo si no se contempla que se debe contar con un gran capital, ya que nuestra moneda está devaluada en comparación a la de estos países, además de la rigurosidad de las normas cuando se trata de crear cualquier tipo de negocio, el papeleo es interminable, el sector tributario es exigente y al igual que en cualquier parte del mundo, todo nuevo negocio necesita de un componente esencial para que alcance el éxito”. Asegura que “al abrirse un negocio se debe pensar en los altos impuestos y la inseguridad”.