La Alcaldía de Bogotá denunció un nuevo caso de castigo con cepo contra un menor de 16 años perteneciente a la comunidad indígena Emberá Chami, en la Unidad de Protección Integral (UPI) La Florida. Este hecho fue reportado el pasado 14 de diciembre por la Secretaría de Integración Social, tras ser evidenciado durante un recorrido realizado por un equipo interinstitucional en el marco del Puesto de Mando Unificado (PMU).
En un comunicado oficial, el Distrito informó que, al descubrir el caso, se activaron las rutas de prevención a la vulneración de derechos de niños, niñas y adolescentes. Entre las acciones emprendidas se encuentran:
- Reporte inmediato al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).
- Presentación de una denuncia ante la Fiscalía General de la Nación por presuntos delitos de violencia intrafamiliar.
- Envío de información a las Comisarías de Familia de Funza para investigar posibles situaciones de violencia de género y familiar relacionadas con este incidente.
“El 14 de diciembre de 2024 la Secretaría de Integración Social conoció y denunció el castigo en el cepo a un joven de 16 años Emberá Chami, en la Unidad de Protección Integral La Florida. Esta situación se evidenció durante los recorridos que se realizan con el equipo interinstitucional en el marco del PMU”, indicó la Alcaldía en su comunicado oficial.
Reiteran violencia sistemática en comunidades Emberá
Según las autoridades distritales, dentro de la comunidad Emberá asentada en Bogotá, se han evidenciado prácticas reiterativas de violencia contra mujeres y jóvenes, que incluyen el uso del cepo como medida disciplinaria. Estas acciones, aseguran, vulneran los derechos fundamentales de los menores y contravienen disposiciones legales como el artículo 44 de la Constitución, que prioriza la protección de los derechos de los niños, y la Ley 2089 de 2021, que prohíbe el castigo físico y los tratos crueles, humillantes o degradantes hacia la niñez.
“El Distrito rechaza enfáticamente estas acciones y reitera que los niños, niñas y adolescentes son sujetos de especial protección, cuyos derechos están por encima de los derechos culturales y colectivos de las comunidades étnicas”, señaló la Alcaldía. Asimismo, reafirmó su compromiso de continuar denunciando estos hechos ante las autoridades competentes para garantizar la protección de los menores.
Segundo caso reportado en el mes
Este no es el primer caso de castigo con cepo denunciado por el Distrito este mes. A inicios de diciembre, la Alcaldía reportó una situación similar en la UPI La Rioja, donde seis menores de entre 11 y 14 años fueron sometidos a este tipo de castigo por parte de la comunidad Emberá.
En esa oportunidad, las autoridades recordaron que las prácticas de justicia tradicional no pueden aplicarse en instalaciones distritales. Las autoridades distritales han hecho un llamado a respetar los derechos de la niñez y han advertido que continuarán interviniendo para prevenir cualquier tipo de abuso o maltrato hacia los menores en las comunidades indígenas asentadas en la ciudad.