El Manchester City sufrió una dura derrota (1-2) este domingo ante el Manchester United en el derbi celebrado en el Etihad Stadium de la jornada 16 de la Premier, con dos goles visitantes en los últimos dos minutos para agravar la crisis del campeón.
Pep Guardiola se llevó las manos a la cabeza una vez más al ver a su equipo derrumbarse esta vez desde un grave error de Matheus Nunes en forma de penalti sobre Amad Diallo. Bruno Fernandes convirtió la pena máxima en el minuto 88 y, en el 90, el propio Diallo rubricó la remontada sorprendente de los 'red devils'.
El derbi enseñó dos equipos en crisis, pero el United de Ruben Amorim evitó la tercera derrota seguida en liga de su nuevo técnico y salió con una amplia sonrisa. Sin embargo, hasta ese regalo de Nunes, los visitantes habían dejado mucho que desear, con cero producción ofensiva salvo una ocasión fallada por Bruno Fernandes.
Fue ya en ese tramo final, el United buscó algo que rascar o aprovechar los fantasmas de un City encorsetado, sin convicción en sus acciones ni capacidad de sentenciar el encuentro. Los de Guardiola se habían adelantado en el minuto 36 por medio de Josko Gvardiol y probaron suerte con un par de disparos de Phil Foden, pero en el segundo tiempo confiaron en el pasar de los minutos.
El derbi y tres puntos importantes volaron en un dramático desenlace para un City con una victoria en los últimos 11 partidos, para salir del 'Top 4' de la tabla en la Premier, a nueve puntos del líder Liverpool con un partido más. Mientras, el United, aún más necesitado aunque más acostumbrado a las penas, evitó alejarse más de la zona europea y amargó ampliamente a su vecino.